Capitulo 12

119 5 0
                                    

*Evelyn*
El fuego se seguía propagando por toda la planta inferior. A esa velocidad no tardaría mucho en llegar a este piso. Y si el humo seguía subiendo...《No, basta ya de pensar en eso, tengo que hacer algo》. Alcé la mano de nuevo y traté de absorver el fuego de las escaleras, pero fué inutil. De nuevo habían fallado mis poderes. No sé que me está pasando. Esto no me había pasado nunca. Me senté con la cabeza entre las rodillas, con la camiseta tapandome la boca para alejarme del humo y poder respirar. Esto es el fin, es mi fin. Aún con los ojos cerrados y aceptando mi triste derrota solo me podía venir a la mente una cosa : Dilan. Una lagrima recorrió mi mejilla. Ojalá...Ojalá hubiera tomado otra decisión...Quisiera poder habertelo dicho. Ojalá estuvieras aquí, con tu mirada siempre optimista, mirandome a los ojos de esa forma que me encanta. Ya es tarde, me he rendido. Adios chicos. Cerré otra vez los ojos y me preparé para lo peor.

Una voz pareció sacarme de mi letardo. Era extrañamente familiar. Parecía que me llamaba.
-¡Evelyn!, ¡Evelyn por favor, contestame!.- Dilan gritaba desesperado por todo el tercer piso.
-Dilan..., ¡Dilan!, estoy aquí.-Me levanté del suelo y corrí a buscarle.
Lo vi al otro lado del pasillo. Había pancartas en llamas por todas partes, pero mi mirada estaba fija en la suya.
Dilan dio un paso hacia adelante para acercarse a mi, pero antes de que pudiera acercarse más una de las taquillas se desprendió de la pared y vi como él la sujetó para que no se le callera encima.

-¡Dilan!, aguanta.
-Eve...Yo..., Ah!.- Dilan no aguantaba más sujetando la pesada taquilla, si seguía así segurmamente le quedaría poco tiempo.《Tengo que hacer algo, tengo que...》Mi pulso se aceleró. Tenía que hacer algo. No podía permitir que le pasara nada. No puedo explicar bien que me pasó, solo sé que algo despertó dentro de mi.
Alcé de nuevo mi mano, las lagrimas desaparecieron de mi cara, centré todos mis pensamientos en Dilan y en la taquilla. Una bola de fuego salió disparada de mi mano impactando contra la taquilla y lanzandola escaleras abajo.

Dilan se quedó asombrado mirandome, no podía creerse lo que acababa de ver. Yo tampoco tenía mucha idea de porqué había funcionado esta vez. Solo podía concentrarme en Dilan y en que estaba a salvo.

-Tu..., Eve...Tu...- Dilan estaba asombrado.
Yo no dije nada, simplemente me acerqué a él y le abracé con mucha fuerza.
-Eve, tu..., Tienes....- No le dejé terminar la frase, antes de darnos cuenta los dos estabamos unidos en un calido y apasionado beso. Ni el calor de las llamas de la estancia era tan intenso como lo que sentía en aquel momento. Aquellos segundos paralizaron el tiempo a mi alrededor. Fué algo muy dificil de describir. Cuando nuestros labios se separaron nuestras miradas estabas fijas la una en la otra, podía sentirle tan cerca de mi..., algo en mi interior había despertado. Ahora lo tenía claro.

-¡Dilan, Evelyn!, ¿Estais ahí?, tenemos que salir de aquí, ¡vamos!.- Los gritos de Víctor procedían del piso de abajo.
-Vamos Dilan, tenemos que salir de aquí.
-Sí, vamos, no tenemos tiempo que perder.- Me cogió de la mano y juntos descendimos por las escaleras.

*Víctor*
Habia entrado en el edificio. Todo estaba lleno de humo y fuego en las pancartas de papel de las paredes. Subí al primer piso en busca de mis amigos. El humo no me dejaba casi ver nada, por suerte las lentes de mi máscara me permitían ver algo más claro. En cuanto llegué al primer piso, lo crucé en busca de las escaleras pero algo me dejó paralizado.

Una persona un palmo más alta que yo, con una sudadera oscura con capucha, tapandole toda la cabeza y con una mascarilla, estaba usando un mechero y un spray para prender fuego las pancartas.《¿Ha sido él el causante del incendio?》

Se me quedó mirando, no podía reconocerme pero yo a él tampoco. Fué corriendo hacía mi como tratando de huir.
-¡Eh!.- le grité. Los dos tuvimos un rápido combate que duró a penas dos empujones. Parecía aturdido, como si no supiera que hacer. Estaba a punto de avalanzarme sobre él y quitarle la capucha, cuando un ruido enorme resonó en el tercer piso.
El encapuchado aprovechó el momento de confusión para poder salir corriendo por las escaleras traseras y bajó hacia las puertas traseras del instituto.

No tenía tiempo de perseguirlo, mis amigos me necesitaban. No sabía donde estaban asique me limité a gritar. Antes de verlos bajar por las escaleras, me quité la máscara y me la metí en los pantalones. Dilan y Evelyn bajaron entonces pornlas escaleras de arriba y juntos nos dirijimos a la entrada del instituto para reunirnos con los demás.

El profesor no estaba buscando desesperadamente.
-Lo que habeis hecho es una completa locura, no penseis que vais a libraros así como así.
-Lo siento, la culpa a sido mia, Yo fuí quien salió corriendo a por Evelyn, Víctor solo trataba de impedirmelo y yo le frené.
-No, Dilan no tiene la culpa, yo tambien estaba preocupado y tambien salí tras de él en lugar de pedir ayuda.
-Tambien es culpa mia..., No debí separarme del grupo, lo siento profesor. Pero debería usted saber que si Dilan y Víctor no hubieran venido a por mi, ahora quizas estaría muerta.
El profesor nos miraba temple. La situación había sido muy estresante para todos pero parecía alividado de que al final estuvieramos bien.

-Informaré al director de todo, por ahora descansad.- el profesor de marchó y nos dejó solos.
-Me alegro de que esteis bien, siento haberos hecho pasar por esto.
-No te preocupes Evelyn, lo importante es que estamos bien.-Le dije compasivo.
-Sí.- Me miró y los tres nos dimos un abrazo de grupo.

*El sonido de mi móvil empezó a sonar*

Disculpadme chicos, es Maya, voy a contestar. Luego nos veremos. Me despedí de ellos y me marché a contestar la llamada.

*Evelyn*
Cuando Víctor se marchó, cojí a Dilan de las manos y nos alejamos de la gente.

-Esta tarde quiero que vengas conmigo, tengo...Que enseñarte algo. Y oye, lo que dije antes...yo..., verás simplemente.
-Sssh, Eve, no digas nada, lo entiendo, todo está bien.- me sonrió y seguimos mirandonos a los ojos.
Antes de darnos cuenta estabamos otra vez fundidos en un beso.

Esta vez la sensación fué más intensa, el alivio de estar a salvo mezclado con el calor que desprendía Dilan eran la mejor sensación que había sentido en mi vida. Me abrazó y nos quedamos juntos un rato más. Estaba segura de que podía confiar en él. Esperaba que ese momento durara para siempre.

H de Justicia (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora