H de Justicia (Editando)

Capitulo 32

*Evelyn*
Respira hondo. Cuenta hasta 10.
Mientras miro el cielo. Juego con mi pelo...
-¡Pero por dios relajate!.- me dije para mí misma.
Ya no sabía que decirme a mi misma para tranquilizarme. Toda esta situación me tenía muy nerviosa. Esta es la primera vez que me enfrento a algo así yo sola, y la verdad es que la situación empezaba a superarme. Me revolví en mi asiento y busqué otra vez en mi mochila. Saqué el antifaz rojo y lo miré fijamente.

Si alguien hubiera venido a principio de curso a decirme que a solo unos días de graduarme tendría que luchar contra un tio disfrazado de super villano...La verdad es que me habría reido tan fuerte que habría soltado la leche del desayuno por la nariz.

¡Ah! Y eso sin olvidar que ahora lanzo fuego por mi cuerpo, tengo un novio con el que no me hablo y uno de mis mejores amigos se pasea por las calles disfrazado creyéndose el jodido ¡Batman!

-Absolutamente subrealista.-me dije mientas suspiraba y a la vez me llevaba la mano a la frente y apretaba mis sienes. Que absurdo dolor de cabeza...
-¡¡JODER!!.- gritó el conductor del autobus antes de dar un frenazo brusco.
Me agarré como pude al asiento de plástico. No tuve tiempo de asomarme a mirar. Y cuando me quise dar cuenta, una fuerte sacudida hizo saltar en sus asientos a todos los pasajeros, incluyendome a mi. El conductor empezó a gritar desde la cabina:
- ¡Qué todo el mundo permanezca sentado! ¡Agarrensé a lo que puedan!.- su voz era alarmante. Me asomé por el pasillo hacia el cristal del parabrisas.

La figura de un enorme hombre estaba sonriendo mientras miraba en el interior con las manos apoyadas sobre el parachoques. Era grande...muy grande...Su cuerpo ocupaba casi todo el campo de visión. Y era casi tan alto como el vehiculo.
-¡Hoooolaaaa!.- Saludó con una voz grave.- Vengo en busca de un heroe. Se que estás aquí dentro pulguita. ¡Sal para que Goliath pueda aplastarte!.
El conductor hizo un gesto con la mano tratando de dar marcha atrás. Se escuchó el ruido del motor rugir y acelerar sin ningún resultado. La gente empezó a dar gritos de ánimo al conductor.
-¡Esta sujetando el autobus! No puedo hacer nada...-dijo el conductor mostrando ese sentimiento de miedo...
El grandullón soltó una risa estridente desde fuera sin soltar el vehiculo.

-Mierda...tengo que hacer algo-me dije a mi misma, buscando mi fuerza interior.
Miré a mi alrededor. Estaba sentada justo en los asientos del final. No había nadie a mi alrededor. Por suerte había previsto una situación de peligro en la que tuviera que actuar rápido y me había puesto el traje por debajo de la ropa antes de salir de casa.
Empecé a desabrocharme poco a poco la camisa y a meter mi ropa en la mochila. Me puse el antifaz y me puse en pie.

-¡Abra la puerta trasera!.- Le grité al conductor. Los pasajeros que se sentaban a unos metros de mi se giraron de golpe. El conductor me miraba confuso. Alcé mi mano y la prendí en llamas sosteniendole la mirada.- Confie en mi.

*Víctor*
-Bien.- Dije atandome las protecciones al cuerpo.- Repasemos, ¿Protección? Listo, ¿Chaqueta?.- miré hacia mi cama. Sara estaba dandole los últimos retoques a mi disfraz.
-¡Lista!.- dijo alzando la chaqueta negra para que la observara. Era mi chaqueta de siempre, solo que le habíamos pegado tiras de cinta americana amarilla en la espalda, formando una letra Hache.
-Perfecta, aguantará.- Me acerqué a mi armario.- Ahora veamos las armas...- Dije sacando una enorme espada de dentro. Era casi tan alta como yo. Era plana, de color gris y con la empuñadura rojiza. Sara abrió los ojos como platos al verme cargarla sobre mis hombros.

-¿¡Pero que bestialidad es esa!?.
-Es de Softcombat, tranquila, pensaba usarla para un disfraz de Cloud en el salón del manga...pero creo que aquí será más util.- Miré la espada con orgullo.
-Ya...¿y no crees que será pasarse?
-Sara...¿tu has visto el tamaño del gorila que tiene Jason?.
-¿Y crees que con un espadón acolchado vas a detenerlo?.- No dejaba de mirarme confusa.
-Mejor que nada.- Me encogí de hombros.- Modo Guerrilla Urbana ¡Activado!.- Puse mi pose heroica.
-Vaya telix...-Revoleó los ojos.
-¿Y tu? ¿No vas a cambiarte?.
-¿Qué tiene de malo mi ropa?.- Me dijo sarcastica.
-Pues hombre...-La miré de arriba abajo.- Un chandal gris, con un top negro enseñando el ombligo...No es muy de superheroe.- me reí.
-¿Cómo que no?.- Se hizo la ofendida.- Yo seduzco a los enemigos y tu te encargas de acabar con ellos.- Adoptó una pose sexy.
-¿Y si no sale bien?.- la miré de reojo.
-Entonces te diré nuestra señal secreta y los dos echaremos a correr. Ya luego...al que pille le ha tocado.- No pude evitar soltar una risa ante aquel comentario.
-De verdad...no tengo una mejor amiga mas tonta...- Me cortó
-No me copies mi frase, inventate tu una.- Me dijo dirigiendose a la cócina.- Voy a cambiarme, evidentemente no voy a salir así.- Asentí.