Aang
Me he pasado la noche coordinándome con el equipo de limpieza y preparando nuestra partida.
Si hay algún aspecto positivo en todo esto, es que pronto estaremos en casa y podré obtener más pistas sobre Thais sin distracciones. Nos habían dado pistas falsas acerca del paradero y déjame decir que esas personas se lamentaron de eso.
Mientras regreso a casa, mi teléfono vibra.
[Tenemos novedades. Debemos acelerar la partida.]
Se me pone la adrenalina por las nubes. Al entrar en casa, intercepto a Elliot en el pasillo.
—¿Qué ocurrió?
—Kent, nuestro contacto de la CIA, me ha enviado un correo electrónico —dice, apartándose el pelo mojado. Debe haberse dado una ducha para deshacerse de la sangre de los hombres de Escorpión. —Un boceto de Gian está circulando por la oficina local del FBI. Debe habérselo proporcionado uno de los agentes que se escapó. Supongo que fue él quien traicionó a Thalia... —no termina la frase, pero no hace falta. —Bueno, un contacto nos aviso haberlo visto cerca de los Alpes, si lo encontramos sabremos de Thais.
—Envía a Lars a que prepare el avión —le digo.
—¿Cuántos guardias enviarás en el avión?
—Cuatro, por si acaso —digo después de un momento de reflexión. —El resto puede quedarse para formar parte de nuestro equipo de ataque.
—De acuerdo.
Escuchamos los pasos de alguien.
―Señor Briand, Terrence ha venido a verlo.
Seguro que Elliot le había llamado para avisarle.
―Que pase.
―Sí, señor ―Anton va hasta la puerta.
Elliot sigue su camino y yo voy a mi despacho, me sirvo dos vasos de whisky y espero a que llegue mi amigo. Terrence entra en la habitación un segundo después, con vaqueros oscuros y una cazadora de cuero. Se deja caer en la silla junto a mí, agarra la bebida y se reclina contra el respaldo, relajando su postura.
Yo me poso el whisky sobre la rodilla, acariciando el cristal frío con las yemas de los dedos. ―¿Estás viendo a alguna mujer nueva?
―No.
―Todavía estás colgado de la última, ¿eh?
―No ―yo nunca me había colgado de nadie. Ni siquiera por Anjoly quien fue mi prometida.
―¿Estás seguro de eso? Pareces bastante deprimido desde que ella no está.
―Siempre estoy deprimido ―respondo con sequedad.
Terrence suelta una risita sarcástica. ―Estás hecho polvo. Además, es la primera vez que me pides ayuda para buscar a una mujer. Admítelo de una vez, estás enamorado.
―Solo lo hago porque es mi culpa lo que pasó ―por qué tiene que fastidiarme.
―¿Por qué no hablas con ella cuando regresa, y ya está?
―¿De qué? ―doy un sorbo―. No hay nada que decir.
―Aang, no entiendo por qué estás siendo tan imbécil con este asunto. Si quieres a la chica, ve y díselo.
―No la quiero.
―Y una mierda.
―No lo hago ―lo diré cuantas veces sea necesario.

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Absurda [Libro #2]
RomanceSegundo libro de la «Saga Placeres Culposos». El amor y el odio son el mismo sentimiento que se expresan y se viven de forma distintas. Y así es Thais para mí, con ella experimente una turbulencia de emociones desde el amor más absurdo hasta el odio...