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- AAAAHHH! - Gritamos ambas al unísono por el susto y yo por lo vergonzoso de la situación. A Alya se le aflojaron los brazos por lo que se resbaló sobre mí hacia abajo, arrastrándome junto a ella directo al suelo alfombrado. Caímos ambas de cabeza pero con la diferencia de que ella giró por el envión y terminó sentada mirando a los chicos, yo quedé trasero para arriba, obviamente aún mi tanga no solo sigue totalmente expuesta sino que ahora pueden verme de lleno LAS NALGAS divididas en el medio por una delgada tira de encaje! ADRIEN ME ESTÁ MIRANDO TODOOOOO!!

Vi como Alya se tomó de la cabeza adolorida pero inmediatamente volteó a comrpobar cómo estaba yo. - AHHH! Marinette! - Gritó y gateó hacia mí para cubrir con sus manos y con mi falda mis pobres partes nobles que de íntimas ya no tenían nada. - TÚ NO MIRES! - Gritó y señaló a Nino enfurecida. - TÚ SÍ PUEDES MIRAR! - Señaló a Adrien, que desde donde yo podía ver tenía sus ojos abiertos como dos huevos y las mejillas de color carmín. - Pero vengan a ayudarme a levantarla, por favor! Qué acaso no sabes golpear la puerta, Nino? -

- Por qué golpearía la puerta de mi propio dormitorio? - Preguntó confundido.

Los dos entraron finalmente a la habitación y mientras mi amiga me cubría, me ayudaron a reincorporar. No hace falta que explique de qué color tenía la cara porque es evidente que estaba VIOLETA ya de tanto sonrojo y por la cantidad de sangre que se me había subido a la cabeza al estar dada vuelta.

- Estás bien? - Preguntó Adrien tomándome de la mano para levantarme del suelo.

Más allá de que ya perdí gran parte de mi dignidad, si de hecho no es toda, creo que sentir su mano sosteniendo la mía hace que olvide todos mis problemas. - S... Sí, estoy bien. Gracias. - Contesté sin poder mirarlo a los ojos.

- Amiga, necesitas algo? Una compresa fría para tu cabeza? Un analgésico? - 

- No, Alya, estoy bien, no fue un golpe taaan terrible. La alfombra amortiguó bastante, creo que tú caíste mas fuerte que yo. - Le sonreí, aunque de verdad me dolía la cabeza y cintura, pero mi mano seguía siendo sostenida por Adrien, eso curará mis males.

Mi amiga observó la situación, miró a Nino y tomó aire. - Bueno, entonces nosotros nos vamos a terminar de cocinar, ustedes quédense aquí... - Giró rápidamente y empezó a empujar a su novio fuera de la habitación. 

- Espera Alya, debo seguir con las pizzas... - Dije comenzando a sonrojarme por intuir de qué se trataba su sospechosa actitud tan repentina.

- Noooo, no hace faaalta. Hace 3 años que le cocino y aún no murió! - Exclamó sacudiendo su mano izquierda por encima de su hombro mientras señalaba con movimientos de su cabeza a Nino.

- Oye?? Qué quieres decir con eso, nena? - Preguntó confundido siendo expulsado de la habitación delante de Alya.

- Adrien, tú procura que no se duerma, se golpeó la cabeza! Nosotros les avisamos cuando la cena esté lista, tienen 15 minutos!!! - Canturreó al salir para luego cerrar la puerta y dejarnos a Adrien y a mí, que aún seguíamos tomados de la mano, encerrados ahí dentro.

- Ok...? - Contestó Adrien una vez que el pestillo se trabó. Me miró y levantando los hombros despreocupado, me sonrió. - En serio estás bien? Haces muecas de dolor. - Me soltó la mano, me acarició la mejilla y me indicó con un gesto que me sentara al borde de la cama para luego colocarse a mi lado.

- Un poco me duele, pero estaré bien. Tengo más dañada la moral que otra cosa, creo que no elegí la ropa interior correcta para el outfit de hoy. - Marinette, la inteligente, se pone una mini braga con falda. Menos mal que es Adrien y no un desconocido quien.... Ay no, acabo de recordar que Adrien me vio hasta... Hasta donde no suele llegar el sol. Y no en la situación en la que me gustaría que lo hubiera hecho.

Vanilla Lemon -MLB AU Adrienette-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora