17. Despues de ti

117 14 0
                                    

Rogue POV:
Desperté al siguiente día con los ojos irritados y el corazón pesado de tanto llorar, el verano había terminado al igual que mi fugaz enamoramiento, dolía tanto, no tenía las fuerzas para levantarme, pasaron 2 días sin que pudiera levantarme de la cama, solo faltaban un par de días para que comenzáramos nuevamente nuestra rutina esperada y ahora añadiendo los entrenamientos en equipo, todo se junto de una forma abrumadora.

- ¿Rogue? - tres golpes en mi puerta - Soy Kurt, por favor déjame entrar.

Realmente quería estar sola, pero también sabía que hablar con el me ayudaría, me levante a duras penas de mi cama y abrí la puerta recibiéndolo, traía un bote de helado y dos cucharas, su sonrisa a medias me hizo sentir en casa.
Nos recostamos en mi cama y juntos comimos el helado, hablamos sobre lo qué pasó, me dejé llevar, desahogando cada sentimiento atorado que tenía desde hace días, llorando lo que tenía que llorar, permitiéndome sanarlo.

- Creo que estaba enamorada de él pero, no era la persona indicada. - limpié mis lagrimas suspirando, dejando de llorar.

- Lo lamento mucho. - este pasó su brazo alrededor mío abrazándome - ¿Porque no hablas con el?

- No creo poder enfrentarlo, no ahora. - suspiré - Igual estoy abrumada por todo lo que ha pasado, no solo es Gambito... lo qué pasó con el solo fue la gota que derramó el vaso.

- Comprendo, tienes demasiadas cosas con que lidiar ahora, pero recuerda que estoy contigo. - besó mi cabeza y me enterré entre sus brazos - Rogue, el hablo conmigo.

- ¿Que? - me enderece encarándolo - ¿Gambito hablo contigo?

- Si. - este asintió temeroso - No te enojes, el estaba muy desesperado, no sabía que hacer y acudió a mi, me dio algo de pena así que lo escuché.

- No, no quiero saber nada de él. - mentí.

- Solo te diré que cuando estés lista deberías hablar con el, tratar de aclarar las cosas.

Sabía que debía hablar con el, parte de mi reacción fue porque mencionó a mi madre y ese tema es muy delicado para mi, no tenía idea porque había acudido a ella por "ayuda", no sabia nada, me había adelantado a las cosas, pero no quería lidiar de ello ahora, el orgullo ganaba más que la razón.

*un mes después*

Las clases comenzaron, la Mansión recobraba su vida nuevamente, y la pesada rutina volvía a ser mi día a día. Después de todos se enteraran de lo que había sucedido con Gambito las cosas cambiaron, pasamos a ser el romance de verano a totales desconocidos. Mis amigos reaccionaron muy bien a lo sucedido, las chicas eran más atentas en cada pequeña cosa, mi hermano pasaba más tiempo conmigo, Pyro, como un buen mejor amigo, me mantuvo entretenida, distrayéndome de mis verdaderos problemas.

Trate de superar todo sentimiento que tenía por Gambito, no verlo me ayudaba, más específicos, Bobby ayudaba. El me hacía sentir bien, junto cada pequeño pedazo roto de mi corazón logrando unirlo nuevamente, era paciente, considerado y muy cariñoso, no se porque no vi eso en el antes.

Durante todo este mes salimos y pasábamos casi todo el tiempo juntos, formamos un lazo fuerte, sus intensiones eran claras, a pesar de que aún estaba algo dolida por lo ocurrido decidí darle una oportunidad, realmente me hacía bien tenerlo cerca, quizás, solo quizás.

- Rogue, hola. - este me esperaba todos los días en las escaleras para desayunar juntos - ¿De que tienes antojo el día de hoy? Puedo cocinarte lo que sea.

- Mmm... creo que panqueques. - le sonreí entusiasmada.

- A la orden. - teníamos esta tierna rutina donde el cocinaba y yo solo me encargaba de existir y degustar sus platillos, solía adornarlos con caritas sonrientes y eso me gustaba, me hacía sentir como niña pequeña - Aquí tienes. - dijo entregándome la gran pila de panqueques con fresas y crema batida a su alrededor - ¿Un poco de jarabe de gustaría? - asentí y este baño la pila con jarabe de frambuesa.

Eternamente (Rogue x Gambito) X-MenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora