Hasta que llegaste a mi mundo

Buenas nuevas.

Pov Calle.

El resto de la noche me la pasé a lado de Poche, mis padres se dieron cuenta que había pasado algo con Matu, pero no me preguntaron nada, supongo que mañana será hora de confrontarlos.

- Calle, quiero ir al baño, dame permiso - me dijo Poche, procedí a levantarme de mi asiento y seguirla, no me quería separar de ella y se que es un poco empalagoso y tóxico de cierta manera, pero ahora quería estar cerca de ella por el tiempo que estuvimos separadas.

Salió de baño y no me aguante las ganas la acorralé contra la pared y la besé, ella me siguió el beso nuestros labios tan bien complementados deseaban volver a sentir los de las otra, el beso comenzó a subir de tono, con mi lengua delinee el labio inferior de Poche pidiendo acceso para que mi lengua se encontrará con la suya, ellas danzaban mientras nuestros labios se hacían uno, lleve a Poche a un lugar un poco más obscuro, que debido a la gran cantidad de luz en casa todo estaba iluminado, ahí bajo ese lugar coloqué mis dos piernas entre una de sus  piernas, volví a pegar mis labios comunicándole el gran deseo que sentía en se momento por ella, la atraje a mi mientras doblaba mi rodilla un poco precioné el centro de Poche en mi rodilla y ella gimió.

Pov Poche.

El truco de la rodilla famoso entre Calle.

- ¿Qué estás haciendo? Con todas esas personas afuera, en cualquier momento nos pueden ver o venir a buscar.- le dije con una leve preocupación y gran deseo.

No hay nadie más, solo nosotras - me dijo tratando que me calmara. Al diablo, yo la quiero hacer mía de nuevo.

- Vamos a un cuarto, mejor - me dió una sonrisa pícara y tomo mi mano mientras subíamos las escaleras, entramos a la que antes era la habitación de Calle.

- Aquí está mejor - me dijo Calle la cual me volvió atraer de la cintura mientras nos besábamos, nos acercamos a la ventana para que pudiera cerrarla al igual que las cortinas.

Era muy fácil creer porque apresar de todo el tiempo que nosotras pasamos separadas y de como Calle había vivido una mentira, ella conservaba un buen corazón muy en el fondo, y cuando de nuevo me dejó verlo, fue tremendamente hermoso.

Calle tenía un sillón en su habitación se sentó sobre el y me atrajo para sentarme en sus piernas bajo el cierre de mi vestido y bajo a mi cuello, mientras lo mordía y succionaba le retiré el saco y comencé a desabrochar su camisa entre jadeos, le quite su brasier y me quedé con una imágen tan pero tan perfecta, tome uno de sus pechos en mis manos como a ella le gustaba comencé a jugar con el pezón de este mientras Calle hacia su cabeza hacia atrás por la exitación y jadeaba.

La deseaba tanto, tome el broche de su pantalón y lo baje dejándome ver la gran erección de Calle aún con el boxer, baje su boxer y su pene salió de su escondite, "dios se me había olvidado lo grande que era" pensé, lo tomé con mis manos mientras baja y subía pasé mi lengua por la cabeza de este provocando que Calle gimiera, subí mi mirada y solo me concentre en su mirada que me veía con gran fuego en los ojos, comencé hacerle un oral, con mi boca subía y bajaba por toda su longitud.

- Poche me voy a correr - me dijo con su voz ronca por la exitación.

- Hazlo es lo que más deseo - le dije y sentí ese líquido caliente y dulce. Su sabor lo conserva que rico sabe.

Me levanté del piso y me quité el vestido quede en ropa interior, me di cuenta de que Calle me devoraba con su mirada.

- ¿Te gusta lo que ves? - pregunté ella solo asintió y se levantó para llevarme a la cama me tiró en ella y sentí como quitaba mis bragas con rapidez.

Pov Calle.

Verla ahí desnuda y completa para mí, me hizo recordar cuando éramos novias.

Baje a su clítoris y con mi lenguaje lo empecé a lamer sus gemidos para mí eran significado de que le estaba gustando y podía continuar, con mis labios comencé a dar besos por toda su parte íntima y paré justo en su clítoris lo comencé a succionar y sin dar aviso dos de mis dedos entraron en ella.

- Joder Calle, que rico lo haces, no sabes lo que te extrañé, Ahhhh... Sigue - simplemente acaté ordenes.

Seguí masturbando a Poche, mis dedos comenzaban a sentir ese apretón que significaba que estaba por correrse, baje y con mi lengua y dedos la ayude a qué todo saliera.

- Ahhhh, Calle, que rico.

Con mi lengua retire todos los fluidos, corrí a mi pantalón para sacar mi cartera y de ahí saqué un condón, me lo coloqué y atraje a Poche a mi, me senté en la orilla de la cama y senté a Poche encima mío entrando de una en ella, le quité su brasier que me dejaba sus perfectos pechos y mientras mamaba uno ella subía y baja.

Pov Poche.

Es que por qué todo lo que hace lo hace tan bien, aventé a Calle a la cama y  volví a sentarme encima de ella con mis piernas a su costado, comencé a subir y bajar ella puso sus manos en mi cintura para ayudarme, la habitación era toda gemidos y ruidos de nuestros cuerpos al chocar, comencé a sentir los primeros espasmos del orgasmo aumente mi velocidad y llegué a mi orgasmo hice un par de movimientos más y Calle llegó al suyo.

...

Se llama técnica de alineación coital, hay libros enteros sobre el tema que Calle leyó o nunca necesito hacerlo tal vez la práctica la llevo hacerlo de maravilla.

–Yo te cuidare– Me dijo mientras nuestros gemidos se hacían uno solo.

Cuando se hace bien, proporciona la mejor conección, tanto física como emocional, me sentí tan cerca de ella que de nadie más. En realidad éramos eternas.

Esta técnica consiste en la estimulación externa del clítoris mientras el pene está dentro. La idea es que la persona que está en el fondo se balancee hasta el orgasmo, es una variante de la posición del misionero solo que está si maximiza la masturbación del clítoris.

Llegamos a nuestro último orgasmo, Calle cayó sobre mí y después se recostó a un lado mío y coloqué mi cabeza en su pecho desnudo y me hizo volver a nacer, estar con ella me da tanta paz que quisiera que nunca más me deje.