Estaba acostada en mi cama intentando leer un libro; tenía las piernas cruzadas y con una de ellas hacía un leve movimiento que delataba mi ansiedad.
Al comprender que no estaba prestando siquiera un poco de atención a las palabras que leía, cerré el libro, lo puse a un lado y suspiré llevándome las manos al rostro.Eran casi las cinco de la tarde y le había prometido a Nancy que iba a llegar a las seis en punto; así que me levanté para ir al baño a darme una ducha. Cuando salí metí en una pequeña maleta las cosas que necesitaba: pijama, cepillo de dientes, ropa interior... ¿Qué más?, me pregunté viendo alrededor, pensativa. Cuando decidí que sería todo, bajé para ir a la cocina, donde tomé la bolsa con los bocadillos y dulces que había comprado por la mañana, y me encaminé a la sala, allí estaban mamá y papá.
—Debo ir a casa de Nancy, ¿quién se ofrece a llevarme? — pregunté sin dirigirme a ninguno en específico. Papá alzó la vista de su libro y me sonrió.
—Yo lo haré.
—Papá lo hará. — dijo mamá.~
—¿Alguna vez estuviste en una relación a distancia? — le pregunté a papá mientras íbamos en el auto, lo que lo hizo verme extrañado.
—No, y no creo que sea una buena idea. — dijo arqueando las cejas.
—No lo digo por mí. — reí — Una amiga...
—Sé que no lo dices por ti, pero amo ver tu expresión cuando tu madre y yo hacemos insinuaciones sobre ti en una relación.Lo vi seria antes de continuar.
—Como te decía... tengo una amiga que está en una relación a distancia y...
—Nancy. — dijo asintiendo.
—No. — mentí.
—¡Por favor! — bufó — Ella es novia de ese chico Byers, ¿de qué otra chica vas a estar hablando?No seguí hablando con él del tema. Si fuera Nancy no querría que mi mejor amiga hablara de mi vida personal con su papá. De hecho era demasiado extraño; pero, ¿qué consejos podía darle yo sobre las relaciones a distancia? O más bien sobre cualquier tipo de relación.
A Nancy no le gustaba hablar de su complicado romance con Jonathan Byers, pero últimamente estaba muy molesta o triste, y claro que no me podía quedar con los brazos cruzados viéndola sufrir, especialmente después de que nos habíamos vuelto tan unidas.
Anteriormente, cuando estudiábamos en preparatoria, pasábamos de largo; en realidad, no estoy segura de que me agradara entonces, pero cuando ambas entramos a trabajar en el periódico escolar, empezamos a llevarnos muy bien. También habíamos comenzado a llevar algunas clases en común y ciertamente éramos una buena influencia para la otra; mis calificaciones jamás habían sido mejores.Cuando me di cuenta, estábamos llegando a la casa; entonces aquel pensamiento adquirió aún más peso: debía hablar con ella de su relación.
Bajé del auto y me despedí de papá.
—No se aloquen con las bebidas y las drogas. — bromeó, a lo que reí.Caminé hasta la entrada y toqué el timbre. La puerta se abrió casi de inmediato dejándome ver a una disgustada Nancy.
—¡Qué bueno que llegaste, me estaba volviendo loca yo sola!
—¿Tan mal estás? — pregunté asustada.
—No, es eso. — señaló hacia un pasillo, de donde provenían unos gritos.
—¿Qué?¿Tienes una fiesta? — reí.
—Ojalá. Son Mike y sus amigos jugando a esa tontería. — fruncía el ceño — Llevan jugando desde la mañana y no hay quien los calle.
—¿Se oye hasta tu habitación? — pregunté mientras empezábamos a subir las escaleras.
—Sí. Me sorprende que no se oiga hasta tu casa.Cuando eran casi las ocho los gritos seguían. Habíamos comido algo e intentado estudiar para nuestra presentación del lunes, pero no lográbamos concentrarnos.
De pronto, Nancy se levantó enojada.
—Es todo, no voy a tolerar más esto.
—¿Quieres apoyo? — prengunté riendo y me levanté para ir tras ella. Las peleas entre Mike y Nancy siempre eran dignas de ver.
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Don't be cruel [Eddie Munson]
RomancePor favor, olvidemos el pasado, el futuro brilla delante nuestro.