Don't be cruel [Eddie Munson]

21. Para Jessica

La carta estaba escrita con una letra tosca. Normal para un chico de esa edad. Había visto su letra actualmente y había mejorado muchísimo.
Las hojas de papel lucían como si las hubiera abierto y doblado muchas veces, lo que me dio aún más ternura. Empecé a leer:

"Para Jessica de Eddie.

Jessica, espero que te encuentres bien y que no vayas a tirar las hojas en cuanto sepas de quién vienen dirigidas. Escribo esto con la mayor sinceridad posible y solo quiero que entiendas porqué hice lo que hice. En primer lugar quiero decir que lo siento mucho. Nunca nos llevamos bien, pero tampoco éramos enemigos, y ahora estoy aquí siendo miserable, porque a pesar de que ya sabía que no tendría una oportunidad contigo, siento que ahora ni siquiera voy a poder ser amigo tuyo.
Desde que te vi la primera vez me pareciste muy bonita y, cuando te fui conociendo, me di cuenta de que además también eres muy inteligente. Desde el principio traté de acercarme a ti, pero toda mi vida he sido un cobarde y no tuve el valor de hablarte más que por las estúpidas líneas de mi personaje. Pero ese no soy yo, lo cierto es que no soy un romántico, no sé escribir poesía ni me fluyen palabras de amor, pero aún así me moría por intentarlo. El problema es que cuando me acercaba, tú actuabas distante y esquivabas mis miradas, eso solo hacía que me acobardara aún más. Lo siento.

A medida que avanzaba el tiempo y se acercaba el día de la presentación de la obra, sentía más y más miedo, porque después de eso tú y yo no volveríamos a hablarnos. Cuando te conocí, creí que para entonces ya íbamos a ser amigos, pero la realidad fue otra. Ni siquiera nos veíamos a los ojos fuera de nuestros personajes. El tiempo corría tan deprisa y entre más lo hacía, me sentía más cobarde.
El día de la presentación te vi ahí con tu vestido, por cierto, te veías en serio hermosa, en fin... te vi ahí y me sentí armado de valo; pensé que por fin iba a poder encararte, pero luego te vi rodeada de tu familia y de tus amigos. Parecías tan feliz en tu mundo y pensé: ¿Qué tengo yo para ofrecerle?

Huí de vuelta a mi rincón a repasar las líneas. Quizá lo único bueno que podría hacer sería no olvidarlo todo cuando me subiera al escenario. Pero qué feliz me sentí cuando tus papás me dijeron que nos iban a tomar una fotografía, era el momento perfecto para decirte al menos que te veías bonita, pero de nuevo huí, como siempre, tal vez eso sea lo mío.

Mientras estaba en el escenario llorándole a Julieta solo pensaba en ti, así como Romeo, yo también te perdería para siempre. Que tragedia. Me acerqué para darte el beso fingido, solo un rato más y tú y yo volveríamos a ser desconocidos. Me sentí muy vacío y triste y, cuando vi tu rostro tan bonito y sereno, enloquecí y... ya te sabes el resto.
Supongo que me odiaste desde ese momento, si es que no lo hacías ya desde antes, cosa que entendería perfectamente; pero yo solo conseguí quererte más.

Jamás voy a atreverme a decir que lo que hice estuvo bien, pero lo cierto es que si de todos modos no ibas a hablarme nunca más, al menos llevaría en mis labios el recuerdo de ese beso y sí, lo haría de nuevo, te besaría mil veces más si pudiera. Pero siento mucho haberte molestado, y siento haberme reído cuando te pedí disculpas, solo estaba aterrado por dentro y no supe cómo reaccionar, así que recurrí a lo que siempre suelo hacer: fingir que no me importa nada. Pero sí me dolió el golpe, no solo físicamente. Y claro que no te estoy reclamando ni culpándote por nada, solo quiero ser honesto en esta carta.

Lo cierto es que no sé qué podría hacer para que me perdones. Quisiera que luego de leer esto me respondas a eso, en serio estoy muy arrepentido por haber abusado de ti de esa manera y estoy dispuesto a hacer lo que quieras con tal de que por lo menos dejes de odiarme. Entiendo perfectamente que no quieras ser mi amiga, yo tampoco querría ser mi amigo, creo que nadie quiere serlo; pero por lo menos espero que puedas perdonarme por lo que hice y que no me odies, porque lo cierto es que te quiero, eres la persona más bonita e inteligente que conozco, tienes una personalidad muy bonita y me gustan las camisetas que usas, aunque no tenga nada qué ver.

Si llegaste hasta aquí, espero que por lo menos estés considerando la posibilidad de perdonar a este imbecil, aunque sé que no lo merezco, o tal vez sí. Tú dime. En fin... estos días me he sentido muy mal, ya hasta mi tío se dio cuenta. Él dice que te regale algo, y pensé en hacerlo, pero la verdad es que no sé mucho de ti y de lo que te gusta, ni para averiguar eso fui bueno, lo siento. Así que pensé en que tal vez quisieras responder a esto diciendo qué es lo que podría hacer para recuperar tu... ¿amistad? O tu "no odio" aunque sea. Entonces voy a estar esperando ansioso a que respondas, pero entiendo si no quieres hacerlo, y entiendo también si ni siquiera empezaste a leer esto, en cuyo caso no sé para qué me molesto en seguir escribiendo, pero no importa.

Ayer estaba escuchando algo de la música de mi tío y escuché una canción que me recordó a ti, así que te escribo un fragmento, se llama Don't be cruel y es de Elvis Presley, no es mi tipo de música, pero siento que tal vez a ti podría gustarte. Amaría escribirte una canción yo mismo, pero jamás ha sido mi fuerte, en fin, esto me hizo pensar en ti:

"Nena si te hice enfadar por algo que pude haber dicho, por favor olvidemos el pasado, el futuro brilla delante nuestro. No seas cruel con un corazón sincero. No quiero otro amor, nena es solo en ti en quien pienso. No dejes de pensar en mí, no me hagas sentir así."

Y ahora me siento patético por escribir eso, espero que a ti no te lo parezca.

Entonces para finalizar, aunque hay mucho más que quisiera haber escrito de la canción y de lo que siento, pero supongo que no te debe interesar; solo quiero decir de nuevo que lo siento, tú mereces ser tratada con respeto y yo no lo hice, de nuevo lo siento mucho. Espero que hayas leído esto y que sepas que solo lo hice porque estoy completamente loco por ti, eres perfecta y te quiero.
Perdóname, en serio, solo dime que me perdonas y prometo no volver a molestarte nunca más.

Sinceramente: Eddie Munson.

Posdata: Escribe lo que quieras que te regale, no importa lo que cueste, tú lo vales.

Posdata #2: Espero tu respuesta. Te quiero. "

El idiota había escrito tantas veces que esperaría mi respuesta y ni siquiera me dio la carta. Mis ojos se inundaron al pensar en el adolescente Eddie escribiendo todo lo que sentía y diciendo que era un cobarde, en que jamás me entregó las hojas y en que seguro eso solo hizo que se sintiera aún peor consigo mismo.

La leí varias veces más sin dejar de llorar.

...toda mi vida he sido un cobarde...

Parecías tan feliz en tu mundo y pensé: ¿Qué tengo yo para ofrecerle?

..qué feliz me sentí cuando tus papás me dijeron que nos iban a tomar una fotografía...

..de nuevo huí, como siempre, tal vez eso sea lo mío.

...Pero sí me dolió el golpe, no solo físicamente.

...yo tampoco querría ser mi amigo, creo que nadie quiere serlo.

...solo dime que me perdonas y prometo no volver a molestarte nunca más.

...Escribe lo que quieras que te regale, no importa lo que cueste, tú lo vales.

Esas frases me dejaron destruida. Bajé y busqué entre los casetes de papá; después de un rato, por fin lo encontré. Fui de nuevo a mi habitación y tomé mi walkman para meter el casete y busqué la canción de Presley.

–¿Por qué deberíamos estar separados? Te amo de verdad, nena, te lo juro.– decía y eso solo me hizo llorar aún más.

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Don't be cruel