☔Jeon Jungkook Un bohemio, artistas y escritor de 28 años
☔Kim Taehyung un complejo diseñador de interiores de 26 años, mejor amigo de Hanna hermana de Jungkook
☔A pesar de la estrecha amistad entre ellos, Jungkook y Taehyung nunca habían coincid...
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Jungkook
Iba caminando detrás de él. Taehyung estaba tan furioso, que olvidó que llevaba el yeso en el pie; dejó la muletilla en el restaurante. Era precisamente lo que estaba evitando. —Mi amor, por favor, escúchame, Iba a decírlo. Quiero llevarte conmigo, bebe, escúchame.
—Ahora no quiero escucharte. ¿Por qué no lo habías dicho?
—Estaba esperando que estés mejor.
Se sienta en el andén —Prometiste que no te irías por un tiempo; te dedicarías a nuestra relación.
Kook se sienta a su lado, lo abraza: —Quiero estar contigo, mi amor. —Le toma el rostro, aprieta sus mejillas. —Quiero que vengas, por lo menos hasta que estés 100% recuperado. Tome el trabajo, es una buena oportunidad; no lo hago porque quiero, o no pienso en ti, porque tengo algún interés en Yun-Gyeom.
—Es otro problema, ese puto está enamorado de ti. No soy tonto, me da muchos celos.
Le toma la mano llevándola a su pecho—Te amo, mi hermoso Tae —Le quita el cabello que cae sobre sus ojos—Mírame. Mi corazón, todos los sentimientos que habitan en él, tiene un dueño, eres tú. No quiero que sientas inseguridad, que dudes de mi amor y sentimientos.
No quiero que te sientas inseguro. No soy ese tipo de hombre; decidí amarte, decidí quedarme a tu lado, decidí hacerte feliz, ser feliz.
—No desconfío de ti, desconfío de él, siento que quiere algo, mis celos no me ayudan, juegan con mi mente, hacen que explote. Sabes que no me gusta quedarme…
Kook lo interrumpe, aferrándose en sus labios, se separa, le da repetidos besos. —No sientas inseguridad, está bien que sientas celos. Yun-Gyeom es mi ex, pero no pasa nada, por lo menos de mi parte; solamente siento un gran cariño, como amigos, pero esos sentimientos se fueron.
Frunce el ceño—No quiero que vayas con él, no puedo ir contigo, tengo cosas que hacer, me muero de celos del hecho de que iras con él. Se cruza de brazos: —Sigue enamorado, siento que quiere fastidiarme.
—No, mi amor, no pienses esas cosas, no dejes que los celos jueguen con tus pensamientos.
—Lo siento, quisiera ser igual que tú, pero no puedo.
Kook lo abraza: —Vamos a casa para que descanses, después hablamos al respecto.
Pude notar su molestia; cuando nos disponíamos a dormir me dio la espalda. —Mañana iré a mi casa.
—¿Por qué mi amor? No sigas en esto, no quiero que te vayas.
—Necesito mi espacio, es eso.
—Sé que no lo es. —Lo abraza por la espalda; besa su cuello. —Quiero que te quedes, no hagas las cosas de esta manera, solamente porque estás molesto; quiero seguir cuidándote.
—No quiero hablar, estoy cansado. —Jala la cobija. —¡Hasta mañana!
—No quiero que duermas molesto—Lo jala, queda frente a él—Mírame—Le toma el rostro, levanta la mirada.
Taehyung rompe en llanto: —No quiero sufrir, me han hecho mucho daño, me siento inseguro. Los hombres que amo me hacen daño, me dejan destruido; duele demaciado Encuentro algo bueno; también quieres dejarme.
Lo abraza —No mi amor, no te pongas así. Jamás te haría daño, o me burlaría de tus sentimientos.
—Tú no, pero él sí. ¿No te das cuenta de que es el segundo encuentro que tengo con Yun-Gyeom; lo único que provoca es hacerme sentir mal con sus comentarios mal intencionados? Me lastima —llora—. Mis sentidos nunca fallan. La llegada de ese puto trae un fin. Voy a hacer el afectado.
—Quiero que confíes en mí, nunca te haré daño, mi amor, te amo, estoy seguro de lo que siento.
Taehyung es demasiado inseguro y sensible. Lo abracé por un tiempo. Empecé a entender: guarda cosas que no me ha contado. En su corazón hay heridas del pasado, secuelas de desamores. Nunca habla de quienes han hecho parte de su vida amorosa. Como si no quisiera remover los recuerdos, en ese punto es donde radican sus celos e inseguridades. Se quedó dormido entre mis brazos, aferrado a mi cintura. En la mañana cuando desperté, no estaba, tampoco sus cosas.
Me aliste de rapidez, fui a su apartamento, toqué con insistencia, pero no me respondió.
Me senté en el pasillo, esperando que abrirá en cualquier momento; así lo hizo. Me levanté rápidamente, casi pisa mis dedos con la puerta.
¡Espera mi amor! ¿Por qué tienes que actuar de esta manera? ¿Acaso no estás seguro de mis sentimientos?
—Quiero estar solo, necesito pensar.
—¿Pensar en qué? Te amo, estoy enamorado de ti, estoy seguro de lo que siento. ¿No te es suficiente? Lo he demostrado.
—Siento que si te marchas, no será igual.
—Lo será, bebe—Lo abraza—¿Dime quién te hizo daño para no creer en las promesas de amor? Dices que me amas, pero no confías en mí. Estoy loco por ti.
El enamoramiento no es algo que se acaba de la noche a la mañana, por lo menos no para mí. He tomado una decisión, esa decisión es amarte —pasa un par de dedos por sus labios.
Detiene su mano, baja la cabeza. —Mi decisión es la siguiente; si te vas con él, mejor damos por terminada la relación.
—No mi amor, es...
Lo interrumpe llevando el dedo a sus labios: —No insistas, las relaciones a distancia nunca han funcionado.
No puedo irme contigo. Tengo compromisos con mi trabajo. Te iras por un año; la comunicación se dificultará por las ocupaciones. Son siete horas de diferencia.
—Ven conmigo mientras te recuperas, después nos acomodamos. No me hagas esto —le toma el rostro—. Dime quién te hizo daño, no puedes confiar, eh incluso en alguien que está dispuesto amarte bien.
—No me gusta hablar de mi pasado, no quiero traer nada de lo vivido a mi presente; me han lastimado demasiado, tanto que no puedo confiar en personas como Yun-Gyeom.
El dolor que me han infringido me ha llevado a hacer locuras, no quiero volver repetirlas —Rompe en llanto—. No te preocupes, tampoco es justo que detengas tu vida por mí, no está bien que dejes de hacer cosas por una relación que apenas está iniciando.
—Si es el punto donde radican tus inseguridades, dime qué te hicieron
—No es la primera vez que alguien dice amarme, después me lastiman. Sentí el dolor y el sufrimiento de Hanna como si fuese mío. También he pasado lo mismo.
También me han matado el alma; no tengo fuerzas para reavivarla si vuelven a lastimarme.
