☔Jeon Jungkook Un bohemio, artistas y escritor de 28 años
☔Kim Taehyung un complejo diseñador de interiores de 26 años, mejor amigo de Hanna hermana de Jungkook
☔A pesar de la estrecha amistad entre ellos, Jungkook y Taehyung nunca habían coincid...
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Jungkook
Pasaron un par de días.
A pesar de las circunstancias, estábamos felices. Ocho días después del accidente, le dieron a Taehyung.
Como es un consentido y pretencioso, no quería que nadie que no fuese yo lo cuidara, así que decidí llevarlo a mi casa, con la ayuda de una enfermera.
Jungkook se arregla para salir
—¿A dónde vas?
—Tengo una reunión, con lo de tu accidente deje algunos compromisos tirados —Se acerca, le da un beso—Nos vemos más tarde, cualquier cosa me llamas.
—¿En serio me vas a dejar solo, Kook?
—Será un par de horas, mi amor, no demoro.
—¿Y quiénes son esas personas?
—Unos clientes de República Checa, específicamente de Praga.
Frunce el ceño—No vayas a tardar, me aburro metido en esta cama.
—Lo prometo. . . .
A causa del accidente de Taehyung, tuve que posponer el compromiso que tengo con estos clientes. Me reuní con ellos y Yun-Gyeom, quien está en frente de todo. —Tenemos que viajar en un mes.
—Es poco tiempo, sabes que Taehyung está convaleciente; lo tengo bajo mis cuidados.
—Podría esperarte mes y medio, cuanto mucho. Está en tus manos la decisión.
—Espero que de aquí a un mes esté totalmente recuperado.
—¿No me digas que vas a perder esta oportunidad? Lo acepto por ti; sé lo bueno que eres; si no vas a hacerlo, dímelo con tiempo.
—Si voy a aceptar, no es fácil, tengo que hablar con mi novio. Me iré por un año, a penas estoy iniciando mi relación. No sé si quiere ir conmigo, cómo vamos a manejar el tiempo, la distancia.
Yun-Gyeom baja la cabeza. —En realidad estás muy enamorado; en otro tiempo hubieses dejado todo sin pensarlo dos veces.
—Lo que sucede con él es diferente, estoy muy enamorado, no quiero perderlo.
Frunce el ceño—Ni siquiera tiene que decirlo. Lástima que no causé ese efecto en ti. Que suerte tiene Taehyung. Nunca hubieras dejado un trabajo tirado por otra persona.
—No quiero que pienses que fuiste menos importante, pero las cosas con él son distintas.
—¿Entonces tu decisión depende de él?
—No como tal, pero tenemos que hablar. Me gustaría llevarlo conmigo por un tiempo, mientras se recupera.
—Lo dejo en tus manos, si se complican las cosas me avisas con tiempo.
Le entra una llamada de Tae. —Hola, Bebe.
Yun-Gyeom frunce el ceño.
《¿Ya vienes?》 Tengo hambre, no quiero cenar solo.
—En media hora llego a casa, mi amor.
《Es mucho, ven ya, estoy muriendo de hambre》
—Espérame, voy saliendo.
《Está bien, date prisa—Cuelga》
Yun-Gyeom levanta la ceja. —Estoy viendo difícil que vayas a Praga. Se nota que Taehyung es posesivo.
Ríe: —Es un poco caprichoso; hasta el momento no hemos tenido problemas o discusiones por celos.
—Le contaste que estás reunido conmigo; le has contado quién soy en tu vida.
—Le he hablado de ti; sabe que eres el dueño de Bohemios, que tuvimos una relación, pero no le he contado que estás de regreso. No creo que vaya a crear un conflicto. Se supone que entre los dos las cosas quedaron claras.
—Así es, como dos personas maduras, hicimos nuestra relación a un lado, y retomamos nuestra amistad. Espero que no desaproveches la oportunidad. Si Taehyung te ama, lo entenderá, te apoyará.
—Claro que sí, es cuestión de organizar nuestro tiempo. Te dejo, nos vemos para definir detalles.
—Mañana pasaré por tu casa, así me lo presentas.
Jungkook se marcha
Yun-Gyeom lo sigue con la mirada (pensamiento). No puedo permitir que lleve a Taehyung a Praga. Viene a recuperar lo mío, a retomar lo que deje tirado.
No será difícil sacar a ese pretencioso del camino. . . .
Jungkook
Cuando acepté esto, no esperaba que Tae sufriera un accidente; ahora las cosas cambian. No quiero perder la oportunidad de trabajar para esa gente. Praga es una ciudad llena de cultura histórica, lugares que son unas obras de arte.
Tengo que hablarlo; además, lo llevaré conmigo mientras se recupera. Al día siguiente recibí la visita de Yun-Gyeom. Aun no hablaba con Tae respecto a mi viaje. Llega con un arreglo de rosas. —Como lo prometí, vine a conocer al hombre que se ha robado tu corazón.
Suben a la habitación.
Toca la puerta… —¿Puedo pasar mi amor? Traje a alguien. Quiere conocerte.
Tae acomoda su cabello. —Sí, está bien, puedes pasar.
Yun-Gyeom entra a la habitación con una actitud efusiva: —¡Hola! Hasta que por fin tenga el gusto de conocerte, Kim Taehyung.
Ríe—¿Con quién tengo el gusto?
Le extiende las rosas—¡Mucho gusto, Kim Yun-Gyeom! El dueño de Bohemios.
Al escuchar aquel nombre, el ánimo de Taehyung cambia—Qué gusto conocerte.
—Me contaron que eres un fiel cliente de mi bar.
—Así es; junto con Kook lo hemos convertido en uno de nuestros lugares favoritos.
—Bohemios es un lugar para enamorarse. Siento mucho lo que te pasó; justamente el día de tu accidente regresé de viaje y estuve reunido con Kook.
Cuando lo dejé en su casa, a los cinco minutos llamó para decirme que volviera a recogerlo. Habías sufrido un accidente.
Taehyung mira a Kok. —No lo sabía. ¿Por qué no me contaste, mi amor?
—Con el susto lo olvidé.
—¿Entonces hace días estás aquí?
—Sí, vine hacer negocios con Kook.
Taehyung se cruza de brazos y murmura entre dientes: —Kook. No sabía, mi novio no me ha contado.
—Y no seré quien lo diga, eso le corresponde a Kook.
Cada vez que Yun-Gyeom dice Kook, Taehyung aprieta la mandíbula. —Qué bueno conocerte, es todo un placer, gracias por las rosas.
La visita de Yun-Gyeom va en curso. Hace comentarios respecto a nuestra relación, cosa que le tenía el hígado a reventar a Tae; puedo notarlo en su cara de disgusto. Yun-Gyeom continua con sus comentarios incómodos; al parecer lo hace con la intención de molestar a Taehyung.
—¿Recuerdas aquella vez que nos embriagamos en una playa en Ibiza? Terminamos tan ebrios y desnudos—ríe.
Kook se siente incómodo—Si tenía pantalones.
—Los recuperaste, pero te los había quitado antes. ¿Y cómo se conocieron ustedes? De todas las cosas que hemos hablado, nunca me contaste.
Tae se ve molesto. — Nos conocimos de la manera más hermosa, era su cita. Coincidimos cuando me perdí en el laberinto. Me encontró; aquí estoy a su lado, viviendo los momentos más hermosos. —Extiende la mano donde tiene el anillo. — Hace unos días este hombre se convirtió oficialmente en mi propiedad.
Yun-Gyeom aprieta la mandíbula. —¡Vaya! No me habías contado, Kook.
—Se lo iba a pedir en nuestra cita, el día que se accidentó.
Tae rie con malicia. —Ahora somos novios, pareja. No pienses que estoy en su casa, porque está haciendo caridad conmigo. Estoy aquí, porque este hombre es un sol. Quiere estar pendiente de su novio todo el tiempo.
Yun-Gyeom ríe con hipocresía: —Ni lo digas, llevo mucho tiempo conociendo a este maravilloso hombre, sé perfectamente a lo que te refieres, son trece años de amistad y algo más.
Tae voltea los ojos: —Qué lástima, ahora es mío, y no se tomó media vida pensando en convertirme en su novio.
La molestia en Yun-Gyeom es notoria; las respuestas de Taehyung lo dejaron fuera de base. Decide marcharse: —Fue un placer conocerte, lástima que sea en estas condiciones.
—El placer fue mío. ¡Adiós! Que tengas bonito día.
Yun-Gyeom y Kook abandonan la habitación.
Tae toma la muletilla que usa para apoyar el pie; tira el ramo de rosas que Yun-Gyeom le llevó. — Hipócrita, únicamente, viniste a conocer de cerca a tu rival, si no conocieras a los tipos como tú.
Ese hombre es mío; no vas a meterte donde no te han llamado; tu año ya fue, querido Yun-Gyeom.
