JOOHEON.

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—¿Cómo terminaron siendo amigos? —Whiplash metió un par de patatas fritas en el ketchup comunitario del centro de la mesa y se las metió en la boca.

De alguna manera, los cuatro, Whiplash, Houdini, Solo y yo, habíamos terminado en una hamburguesería local después de entrenar durante dos horas y ahora nos llenábamos la cara de comida grasienta y batidos, esto probablemente anulaba el entrenamiento, pero
valía la pena porque, maldita sea, esta mierda era buena.

—Pensó que yo era un bastardo guapo, me tiró los tejos y, tristemente, tuve que rechazarlo —respondió Houdini, haciendo que me
atragantara con mi bocado de comida.

Alcancé mi vaso y tragué un poco de soda mientras mis ojos lagrimeaban, puando pude volver a hablar, dije:

—Estás tan lleno de mierda, cuéntales cómo sucedió realmente.

El labio de Houdini se rizó, y cuando se volvió hacia Whiplash, me preparé para lo que fuera que saliera de su boca.

—Bien, ¿la verdad? Fuimos compañeros en el entrenamiento de oficiales y Jooheon me preguntó si podía usar mi largo y grueso lápiz...

Solo resopló, y yo puse los ojos en blanco, con su pelo rubio un poco despeinado desde que empezamos a beber, Houdini pudo pasar su
mano por las hebras más largas, sus ojos casi brillaron, y me dio la sonrisa de niño bonito que usaba para ganarse a las damas.

—Luego me tocó el culo y me dijo que era el más bonito que había visto.

—Nunca sucedió, joder, ni siquiera sabías que era gay entonces, tonto —dije, agarrando un puñado de papas fritas y tirándolas sobre la mesa a Houdini.

Se quitó una de la camiseta y se la metió en la boca, al masticar, dijo:

—Oh, claro, debo estar pensando en alguien más, aunque realmente tengo un culo caliente.

—No te ofendas, Whiplash, pero ¿en serio? —Solo le disparó una mirada incrédula—. ¿Encuentras a este imbécil atractivo?

Whiplash se alejó de Houdini y pasó sus ojos por él.

—Eh, me sentía mal por haberlo rechazado tantas veces.

—¿En el aire? —Solo sonrió.

Se rió.

—Eso también.

—Disculpen, estoy sentado aquí —dijo Houdini, agitando sus manos en el aire—. Y dejo que tu dulce trasero me derribe.

Whiplash alcanzó su batido y jugó con la paja, pellizcándola entre sus dedos y luego deslizándola de arriba a abajo, los ojos de Houdini se agrandaron cuando se movió en su asiento.

—Claro que sí, cariño, claro que sí. —Luego se llevó la paja a la boca en un movimiento obsceno que hizo que Solo y yo desviáramos la mirada.

El pobre Houdini se había buscado problemas por ir detrás de gente como Whiplash, y por lo que parecía, ella era más de lo que él podía
manejar, tuve que admitir que eso era lo que me gustaba de ella, eso y que era una malvada en la cabina del piloto.

Aún así, incluso con el infierno que nos dábamos todos, se sentía bien estar sentado en un puesto en lo que yo suponía que era una especie de cita doble, mo es que haya sido parte de una, pero viendo que estaba con Solo y Houdini y Whiplash tenían algo propio... Eso contaba, ¿verdad? Se sentía bien... normal, algo que me había estado perdiendo aunque no me había dado cuenta.

Estaba en una cita doble en público, y nadie nos miraba como si hubiera algo malo en ello.

Maldición, eso se sentía increíble.

—Entonces, ¿tengo una respuesta real o qué? —preguntó Whiplash, cortando mis pensamientos.

Le había devuelto a Houdini su batido y se centró en mí, probablemente esperando que le dijera la verdad y no una insinuación sexual descabellada.

—Bueno —dije—, nos conocimos en el entrenamiento de oficiales, así que Houdini tenía razón en eso, pero según recuerdo, sólo lo vi
discutir con uno de los instructores visitantes y lo llevé a tomar una cerveza para aliviar la situación.

Houdini ladeó la cabeza.

—No recuerdo eso.

—No lo harías después de emborracharte tanto esa noche, que era lo que importaba.

—No —dijo Houdini, apoyando su brazo en la parte trasera de la cabina detrás de Whiplash—. Creo que te lo has inventado.

—No lo sé —dijo Solo mientras miraba a Houdini—. Eso suena máslegítimo que cualquiera de las historias que estás tratando de contar.

Houdini entrecerró los ojos en Solo, y fue todo lo que pude hacer para no recordarles verbalmente que se porten bien, desde el primer día hubo una tensión protectora de Houdini cuando Solo estaba involucrado.

Pero ahora que estábamos juntos, esperaba mostrarle que lo que teníamos era algo bueno, que Solo era mucho más que un bocazas y una
actitud.

Ese era el plan, hasta que, por supuesto, Solo tuvo que ir y hablar.

—¿Estás tratando de convencernos que Jooheon se te insinuó? Si vas a decir una mentira, al menos que sea una buena.

—¿Y por qué no es una buena? —preguntó Houdini.

—Por dos razones evidentemente obvias, una, le tomó a Whiplash sentir lástima por tu triste trasero para ceder y decir sí a una cita y dos,
Jooheon no me tiró los tejos a pesar de que le ponía la polla dura cada vez que me miraba, así que dudo mucho que te estuviera agarrando el
culo y jugando con tu...

—Bien, creo que todos entendemos el punto —dije, y puse una mano en el muslo de Solo.

—¿Estás seguro? Si mueves tu mano un poco más alto, podrías usar mi lápiz para escribirlo todo para tu amigo aquí.

Whiplash soltó una risa tan fuerte que hizo que los demás miraran hacia nosotros, se inclinó sobre la mesa para chocar los cinco con Solo.

—Muy bueno.

—Eso pensé —dijo Solo mientras se inclinaba hacia atrás en la cabina y extendía su maldita postura.

—Sí, sí —refunfuñó Houdini mientras reflejaba la posición de Solo—. Sólo estaba bromeando.

—Bueno, no lo hagas —dijo Solo en un tono mucho más serio de lo que la conversación justificaba—. No me gusta que la gente toque lo que es mío.

Joder, vale, eso fue realmente caliente, me moví en el asiento a su lado.

—¿Lo que es tuyo, eh? —Whiplash miró hacia mí— ¿Así que esto que tienen en marcha es serio? ¿No es sólo una diversión para desahogarse mientras estamos atrapados aquí en la base?

Como un ciervo atrapado por los faros, todos los pensamientos abandonaron mi mente, miré al otro lado de la mesa y traté de pensar en una respuesta apropiada, sabía que había más entre nosotros que simples amigos de follada, pero como ninguno de los dos había abordado
el tema en profundidad, era difícil saber cuán intensos eran nuestros sentimientos, y este era el último lugar donde quería tener esa discusión.

Solo aparentemente no tenía ningún problema en discutirlo, su mano encontró la mía bajo la mesa y la colocó entre sus muslos extendidos.

—Oh, es divertido, de acuerdo, y definitivamente hay mucho que desahogar y aparte de patearles el trasero en cada oportunidad que tengo, diría que esta es la única otra cosa en mi vida que he tomado en serio.

El silencio cayó mientras Solo se inclinaba y me daba un beso en los labios, cuando retrocedió, sentí que una patata frita golpeaba mi mejilla mientras Houdini gemía.

—Oh, por el amor de Dios, ¿pueden dejarlo? Van a revolver mi almuerzo.







RESERVED [JOOKYUN] #3 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora