Una chica de belleza abrumadora con una familia humilde, fue raptada por los otomanos, la llevaron para ser la sirviente de el gran sultán, pero todo cambia cuando la madre sultana la toma como su esclava personal, ¿qué pasará? Seguirá siendo realme...
Ella está sentada frente a mi, me observa en silencio, yo decido comenzar con la pregunta quizás mas importante.
- ¿Que paso?
Ms: cuando te fuiste ese día, el último hasta ahora, me dio mucho miedo al ver como mi hijo te llevaba, yo me culpe de ello, me culpe de que él te hiciera daño porque yo fui la que comenzó todo esto, cosa que no debí hacer nunca, porque esto nos lastima a ti y a mí.
Yo solo espero a que ella termine de contar todo.
Ms: ese mismo día me tomé un veneno, quería terminar con todo esto pero supongo que no fue tan rápido así que la doctora logró salvarme, luego ibrahim llegó yo aún estaba en cama, me trajo acá y me dijo que no saliera de aquí de este palacio si lo hacía era mujer muerta, así que he estado aquí todos estos meses.
- o sea que no se ha enterado de nada del palacio.
Ms: no, pero me gustaría saber.
- le he dado otro príncipe al sultán, todos la hacen muerta, ahora que lo pienso no tiene lógica de porqué el sultán la mando aquí si él me obsequio está casa el mismo día de lo que paso.
Ms: quizás mi hijo ni siquiera sabía mi paradero, solo se lo dejo a ibrahim mi hijo confía ciegamente en él.
- ya el sultán debe estar enterado.
Ms: por qué lo dices?
- antes de yo venir el sultán estaba solicitando a ibrahim cuando él se enteró por mi, que yo venía para acá.
Ms: quizás.
Ella se queda mirando lejos. Yo acaricio su rostro que me da un hermoso perfil.
- qué piensa?
Ms: en que este amor es puro pero es muy sufrido y imposible.
- ¿Qué vamos a hacer? Ms: no lo sé. - no nos preocupemos por el futuro, concentremosno en el presente.
Empiezo a besar su cuello y aspiro su aroma, ella es magnífica, poco a poco nuestros cuerpos ceden ante el evidente deseo que está surgiendo, nos desnudamos y ante la luz de la luna nos volvemos a entregar, nuestros afanados cuerpos a gritos pedían más y más, ya se extrañaban tanto.
Ellas eran dos amantes que bailaban con el viento, al compás de una llorona guitarra, ante el faro de una luz de luna, dos amores fluyentes como el agua y ardientes como el fuego, eran dos amantes que se amaron en la oscuridad de una noche oscura pero alegre, dos simples mujeres y nada más, insignificantes y pequeñas ante la gran tierra.
Me hizo acordar a ustedes cuando vi el meme, pero yo no tengo trece, tenía 17, adivinen quien cumple años hoy, ¡Yo! Felicitenme que ando muy sola, solin, solita 🙂🙂🙂
Pd: los quiero mucho.
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