Daughter

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Después de una semana llena de aventura, el sábado aparentaba ser un día tranquilo, sobretodo por que en la casa, cada uno se dedicaban a lo suyo, entre los niños jugando por toda la sala y las dos mujeres mayores disfrutando de una buena sesión de lectura, pero claro esa paz terminaría en algún punto por cierto compromiso que tenían ese mismo día.

-¿Qué día es hoy?- preguntó la pelinaranja.

-Creo que sábado, ¿por qué?- le contestó su amiga alzando la mirada del libro.

En eso una la niña dejó de correr haciendo que su compañero de juegos chocara contra ella.

-Es sábado, quedé de ir al parque con Mitty y los gemelos - decía preocupada la pequeña temiendo perder a sus nuevos amigos.

-Por eso ...-le dijo a la morena, señalando a la niña preocupada.

-Oh, ya veo.

-Lucecita no te preocupes cariño, aun no es tarde, apenas será medio día- tranquilizó su madre- Vamos- se paró del sillón y le extendió la mano a la niña la cual tomó- Cam, ¿te gustaría acompañarnos o prefieres quedarte?

-Mmm paso esta vez Eda, me quedo con King descansando - le contestó, ya que después de una semana agitada prefería tomar un día relajado.

-Esta bien, regresamos en la tarde- dijo la pelinaranja- Owlber, vamos- hablo al pequeño búho que se encontraba durmiendo en la mesa de café- Cuídense nos vemos- se despidió.

-Al rato nina y King- decía la niña mientras salía junto con su madre.

-Cuídate mija- le dice su madrina desde la puerta con un pequeño bebé demonio en brazos.

-¡Cuidense Eda y Luz!- les dijo su guardián.

-Weh- expresó King, sorprendiendo a todos ya que desde que llegó se había mantenido callado.

-Awww mi pastelito- decía la niña mientras era subida por su madre al bastón.

-jajaja así que si tiene voz- se ríe la pelinaranja ante el sonido que hizo su pequeño amigo.

-Les dije que solo era cuestión de tiempo- les recordó la morena.

-Por algo eres una de las mejores veterinarias Cam- reconoció la mayor-Pero se hace tarde, así que nos vamos.

Dijo como último y emprendió el vuelo viendo como Camila las despedía con la mano y entraba de nuevo a la casa.

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Poco tiempo después madre e hija llegaron al parque de juegos, donde se podía ver a varios niños jugando.

-Cariño,¿estás lista ahora sí?- le preguntó su madre.

-Si mami, como dice nina "nada funcionará a menos que lo hagas funcionar"- le citó, lo que muchas veces escuchaba de su madrina para darse valor.

-Esta bien princesa, entonces vamos.

Ambas entraron observando a muchos niños jugar. Tanta cantidad de infantes le causaba temor a la niña, pero en cuanto vio a Amity y los gemelos cerca de los columpios esa angustia fue disminuyendo.

-Mami están ahí- señaló los columpios, lo cual su madre asintió.

En cuanto se acercaron, una castaña se dio cuenta de su presencia, por lo que le hizo señas a sus hermanos para que presten atención.

-Hola Luz- habló Edric.

-Lindura si viste- le dijo Emira lo cual hizo sonrojar un poco a la niña.

-Se la dejo niños, cualquier cosa estaré en esa banca- señaló la banca que encima tenía un cárter sobre las mascotas.

Love AgainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora