Love Again

Fungus cold

-Mami, no me siento bien- decía la niña mientras trataba de sentarse, cosa que le costó trabajo por lo débil que estaba.

-¿Qué?- no logró terminar de colocar su último arete y fue deprisa a lado de su hija- Oh, cariño estás ardiendo en fiebre, vuelve acostarte- la ayudó hacerlo mientras convocaba una manta y su equipo médico.

-Vamos a revisar, para llevarte al pediatra en casa ¿si?- preguntó, a lo cual la niña asiente- Bien- comenzó su trabajo.

-¿Qué pasa?¿Por qué tardan en bajar a desayunar?-entra la otra mujer con un pequeño demonio en brazos.

-Luz tiene fiebre- responde la pelinaranja mientras toma la temperatura de la niña.

-¿Cómo?- se acerca con la pequeña-Oh mija, no te preocupes, tu mamá revisara que tienes- le dice poniendo a King aun lado, para acariciar la cabeza de la niña- Tiene un tiempo que Luz no se enferma, debemos llevarla con Rose, para que le de algo Eda.

-No lo creó Cam, lo que tiene no es un resfrío humano- habla, mientras pone sus cosas de nuevo en su maletin- Luz está padeciendo un resfrihongo.

-¿Que?¿Segura?- pregunta.

-Si, tiene todos los síntomas, es parecido a un resfriado normal pero con la excepción de esto- señala un pequeño hongo creciendo por encima de cabello de la menor- No es peligroso, pero es urgente bajarle la fiebre- quería ocultar su preocupación para no alterar a nadie, solo que sus expresiones decían otras cosa

-Entonces, podemos ponerle compresas de agua o le puedes dar la medicina para la fiebre, que trajiste.

-Las compresas pueden servir, pero la medicina no creo, es una enfermedad mágica, por lo que, no sé, hasta qué punto ayuda un medicamento humano.

-Mami- llamó la pequeña- Tengo frío- se puso a llorar. Ver a su hija llorando la alteró, por lo que pensó una solución más rápida para que la pequeña se curé.

-Tranquila mi niña- le dio un beso en su frente, mientras la tomaba en brazos- La voy a llevar al aquelarre de curación, ellos tienen lo necesario para bajarle la fiebre y curarla- envolvía a la niña en la manta.

-Esta bien, ¿necesitas que te acompañe?- preguntó.

-No, tranquila puede que tardemos, debo hacer que la revisen por otras cosas también y sin contar el papeleo- explicó, mientras en una bolsa metía todo lo necesario para ir al hospital- Cualquier cosa yo te aviso-con un último movimiento de mano cierra la bolsa para ponerla en su hombro.

-Estaré atenta Eda- se fue a lado de la pequeña- Estarás bien, mija, sabes que mamá halla la forma de que no te pase nada- le dio un beso, para dejar que la pelinaranja se vaya deprisa.

Salió lo más rápido que pudo de la casa para llevar a su hija al médico. Luz no era de enfermarse pero cuando pasaba, quedaba débil y como madre no soportaba ver a su pequeña así.

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Era la primera vez que viajaba así de rápido con la niña, pero no era momento de ponerse a pensar en eso, debía entrar a las instalaciones del aquelarre.

-Buenas tardes, soy Edalyn Clawthorne, necesito a un curandero urgente, mi hija tiene una fiebre muy alta- habló la mujer una vez que llegó a la recepción.

-En seguida, señora- la enfermera presionó un botón, y momentos después llegaron varios enfermeros de aquelarre con una camilla, para tomar a la niña en brazos de su madre y llevarla a una habitación.