Capítulo 3. Arrepentimiento.

10 1 0
                                    

Me tuve que coger de una pared porque casi me caigo.

-¿C-como que está en coma?

-Te podría contar la historia pero aquí no porque son todos unos cotillas.

-Pues dónde sea pero cuéntamela.- insistí.

Nos adentramos a su piso y luego directo a tu habitación.

Nos sentamos en la cama y contemplé que su cuarto era blanco con algunos cuadros de sus amigos de deporte en banquetes colgados de la pared. Un armario sencillo y abierto por la cantidad de ropa que sobresalía. Y el cuarto deshecho.

-Eli empezó una relación con un chico. Sé conocieron pero fueron muy rápidos porque salieron a las semanas de conocerse y el chico quería como que todo con ella.

-Comprendo.

-Pero el empezaba a cogerse mucha confianza y Eli lo dejaba, estaba muy enamorada. El chico empezó a amenazarla de que hiciera cosas pero Eli se negaba porque sabe que ella le gusta ser libre.

-No me gusta como va esto.

-A mí tampoco me gustaba cuando me lo contaba. Bueno, Eli quedaba con amigos y su novio lo comprendía. Hasta que llegó el día que le dijo que no fuera más con hombres y ella al negarse recibió una paliza y así otra tras otra. Al final le dio tan gran paliza que le pegó en un punto débil del cuello y la dejó en coma. Y lleva así dos años.

-Que hijo de puta. ¿Que ha pasado con él?

-Está en la cárcel. Pero perdió las dos manos porque al ponerlo junto en una cárcel con los otros presos le cortaron las manos para que no tuviera que volver a maltratar a nadie.

Me alegré de que ese hijo de puta tuviera su merecido. Aunque quería ver a Eli.

-Con razón Eli dejó de escribirme. Pero, ¿porqué nadie me lo dijo?

-Porque pensábamos que ya no te hablabas con ella pero debíamos decírtelo.- dijo apenado.

-¿Puedo ir a verla más tarde?

-Claro. Te acompañaremos.

-¿Quién viene más?

-Samuel. Alex si quieres decirle de venir pero hemos perdido contacto.

-Alex que no venga. No tengo ganas de verlo.

-Sofia, te conozco. ¿Desde hace cuando que no habláis?- dijo Lucas sabiendo que soy muy rencorosa y no es la primera vez que paso tanto tiempo sin hablar con mi hermano.

-Un año.

-¿¡Un año!? Pero Sofia es tu hermano tienes que hablar con él. ¿De tu familia sabes algo?

-Llevo el mismo tiempo sin hablar con nadie de mi familia.

-Pues mañana ya estas comunicándote porque no puedes estar así.

-Bueno, haré lo que me sea pertinente.- dije con un tono de molestia.

-Dime con quién te hablas de nuestro grupo de amigos desde que entraste a la uni.

-Con nadie. Angela y Hugo se fueron a estudiar a LA. Tu y Eli vinisteis a la misma uni. Samuel ni idea. Y mi familia pues dejamos de hablar.

-Yo debí hablarte pero entre la uni y asuntos que tenía por arreglar se me pasó.

-Tranquilo. Ahora que estoy aquí me gustaría celebrar por los viejos tiempos aunque después de decirme que Eli esta en coma. ¿Está grave? ¿Se va despertar? ¿Hay posibilidades?

-Pocas pero nosotros confiamos en ella.

Me quedé a dormir abrazada a Lucas sintiendo su calor que tanto añoraba.

-Te he echado de menos.- le dije antes de dormirme profundamente.

Profundas Verdades (2/2) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora