Quiero caminar en tu dirección ☆

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Porchay

—Entonces, ¿Nunca vas a decirme tu nombre? —inquirí, un poco esperanzado—. No quiero llamarte "Jack Daniel's" todo el tiempo.

—Nunca lo preguntaste —objetó, levantando las cejas.

—¿Qué? —abrí la boca, sorprendido—. Lo hice, la primera noche que estuviste aquí.

—De hecho no, Ángel, dejaste la pregunta sin formular —dijo obviamente—. Eso no se considera una pregunta como tal, no soy un adivino, ¿Sabes?

Se rio divertido y me desplomé sobre la barra sopesando lo que acababa de decir, y maldita sea, tenía un poco de sentido común.

—Bien, tú ganas —me enderecé rindiéndome—. Vamos a empezar de nuevo ¿Te parece?

—Me parece perfecto —la vibración de su risa hizo que sus rizos rebotaran.

Puse mi inexistente faceta de actor y con una ridícula voz, pregunté:

—Bienvenido a LiveTheMoment —carraspeé, y él estaba tratando de controlar la sonrisa—. ¿Me puedes conceder el honor de saber tu nombre? —pregunté, tocándome el pecho como si fuera una declaración de amor.

Él rompió a reír y no pudiendo contenerme, lo acompañé.

—No entiendo por qué la formalidad y el cambio de voz —dijo entre risas—. Pero valoro el esfuerzo, me llamo Tankhun.

¿Tankhun?

—No pareces un Tankhun—cuestioné confundido, sintiéndome un poco estafado.

—¿Y cómo se supone que son los Tankhun?—preguntó divertido.

—Definitivamente no como tú —le apunté de manera obvia—. Son más del tipo chico malo y apostador, como en las películas.

—Bueno, estoy en ese estándar porque me considero un chico malo, pero contigo es casi imposible serlo —declaró con sinceridad.

Curvé los labios en una sonrisa afectuosa, Jack Daniel's, quien ahora podía nombrar como Tankhun, no había vuelto a mencionar ni una sola palabra sobre lo que pasó aquella noche y yo tampoco pude sacar a colación el tema.

No es algo que quisiera hacer aún, pero en alguna oportunidad lo haría. Por el momento, no volvió a coquetear conmigo y su amistad parecía sincera.

—Chay —Champ me habló mientras se ponía a mi lado y apuntaba con la barbilla al final de la barra—. Quiere hablar contigo, le dije que estabas ocupado, pero es un poco difícil negarle algo —dijo con frustración.

Incliné el rostro para encontrar a P'Kim mirando en nuestra dirección.

Bien, vino.

En el fondo sabía que lo haría y es por eso que le pedí a Champ que lo atendiera si es que lo hacía, pero tal parece que a ese hombre no podías darle un no como respuesta.

Anoche lo pensé demasiado y de cierta manera, él tenía razón, esto no iba a durar mucho ya sea por mis motivos o por los suyos, pero eso no quería decir que la punzada molesta había desaparecido. Nunca fue propio de mí el comportarme como un niño caprichoso así que no empezaría a hacerlo ahora.

Me giré para disculparme con Tankhun cuando él habló.

—Ve tranquilo, yo debo volver al trabajo —dijo con entendimiento y en ese momento me di cuenta de que nunca le pregunté de qué trabajaba.

Luego de despedirnos de él, Champ me miró sin saber que hacer, no le conté lo que pasó exactamente y el tampoco me presionó para que lo hiciera.

—No pasa nada, voy a ver que quiere —presioné un beso en su frente y comencé a caminar en dirección a P'Kim.

Caer en tu sonrisa - SONRÍE 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora