Capítulo 9

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Desperté renovada, miré a mi lado y Peter no estaba.. ¡¿Qué había sido toda la locura de ayer?!
Fui al baño y estaba todo el espejo empañado, entonces supe que se había dado una ducha antes, hice lo mismo, me cepille los dientes y caminé hasta la cocina, ahí lo vi, preparando pancakes de banana.
-¿Hoy te despertaste con hambre?-interrumpí sus pensamientos y al verme me sonrió-hola Peter
-Buen día La la land-dejó un besito en una de mis mejillas e hice lo mismo-¿mate?
-Sí-asintió y puse a calentar el agua.
Nos quedamos en silencio, yo sin saber que decir, que decirle.
-Hoy voy al comedor con vos, no te olvides de que voy a pasarte a buscar, ahorita me voy a la empresa-estaba preocupado.
-Es tu primer día ahí, ¿no?-elevé mis cejas y asintió todo nervioso- va a irte bien, sos una de las personas más inteligentes que conozco-lo alenté y se le formó una sonrisa-¡así quiero verte!
Él me guiñó un ojo coqueto y me reí.
-¡Sos un tarado! Ni un cumplido te puedo decir que...
Peter puso su mano sobre mi boca y nos quedamos mirándonos a los ojos, miré sus labios y sentí una tentación absurda, sí había vivido por años sin besarlo ahora también iba a poder vivir sin hacerlo.
-Yo también tengo que irme-preparé el mate y le di el primero.
Fuimos a la mesa y comí los pancakes de banana.
-Esta bueno-fui sincera- ¿los comías en Canadá?
-Sí, los aprendí, y se comían con miel de maple en el desayuno.
-¡¿Miel de qué?!-se me escapó una risa.
-Proviene de un árbol
-¿Sin abejas?-elevé mis cejas.
-Sin abejas
No pudo más y se me cagó de risa en mi cara porque notó que estaba muy confundida.
-Voy a esperar que me consigas eso, ¡necesito probarlo!-le besé una mejilla después de levantar todo- tengo que irme
-Te llevo, aguardame cinco minutos que limpio todo
Iba a discutirle, a decirle que iba a encargarme de eso después, pero la mejor idea era encargarme de eso ahora, no sabía a que hora podía volver.
Terminamos lavando todo juntos, y después me senté en el auto de Peter, en el asiento del acompañante, en un semáforo recibió una llamada telefónica.
-Hola, no puedo hablar ahora, estoy manejando-serio- ¿te puedo llamar más tarde? Ok, genial, gracias-suspiró y aceleró el motor.
-¿Pasó algo?
-Nada, trámites, tengo que gestionar unas cosas, quiero poder tener acceso a mi cuenta de banco de Canadá en caso de urgencias, y bueno, básicamente eso
Encendí la radio y empezó una canción de Morat, "Bajo la mesa".
"¿Cómo puedo hablarte sin hablarte y decir todo?
Debí ensayarlo, pero ya ni modo, yo sé que tú, tú sientes algo por mí, ¿por qué negar este amor, si lo confirman tus besos?, yo sé que tú no estás aquí por error, si estoy muriendo por ti, que me revivan tus besos, porque si tú no te vas conmigo, no te vas conmigo, no te sorprendas si nunca, nunca jamás te olvido, no te vas conmigo, no te vas conmigo, a menos de que me encuentres, yo seguiré perdido"
Bonita canción, ideal para escucharla teniendo a Peter a mi lado.
-Gracias-lo saludé con la mano bajando del auto después de que estacione en la puerta del jardín de infantes.
-¡Cuando salgas voy a estar acá!-también me saludó con la mano.
Tomé aire y solté un suspiro, vi a mis colegas y la saludé con una sonrisa.

La jornada fue medio jodida, porque más de un nene tuvo problemas para dormir, les tuve que cantar o simplemente quedarme al lado de ellos, otros se metían el chupete en la boca, por ahora iban a poder guardarlo con ellos un tiempito más, ¡después chau chupete! Y más adelante, ¡chau pañales! Cada logro siempre lo celebraba como si fuera uno propio, ver la carita de felicidad de los chicos era algo que me alegraba el alma.
-Hoy estuviste revisando mucho el teléfono-María me llamó la atención-¿hay algún problema?
-No.. Solo estoy esperando que Peter me confirme tipo que hora viene
-Peter eh-Justina se acercó y elevó sus cejas- vi una foto en Instragram y esta muy lindo
-No se lo digas a Lali en la cara porque te va a mandar una perimetral-María me molestó y la fulminé con la mirada.
Todas mis compañeras de trabajo se rieron, genial, todas estaban enteradas de mi situación sentimental.
-Bueno, ¡nos vemos mañana!-las saludé después de que los padres pasaron a buscar a sus hijos, y salí a la calle y no había rastros de Peter, ni me había respondido el mensaje.
Esperé media hora y nada, suspiré, molesta me subí al primer colectivo que se me cruzó, llegué al comedor y besé las mejillas de todos los voluntarios.
-¡Perdón por llegar tarde Mecha! Tuve un imprevisto-me sentía muy mal, odiaba jugar con el tiempo de las personas, y Peter había jugado con el mío.
-No pasa nada Lali, a veces pasan cosas, sos humana nena-me dio un codazo en modo de joda y me sonrió-¡ahora prepará la chocolatada vos!
Asentí y empecé a preparar todo lo que podía, todo lo que estaba a mi alcance.
-¡Ya está la leche chocoltada!-salí al sector del comedor y busqué con la mirada a Gastón para que me ayude.
Levanté mi mirada y Gastón estaba hablando con Peter.
-¿Qué pasa por acá?-los interrumpí mal humorada-Gas, ¿podes llevar la olla?
-Te ayudo, y Gastón solo estaba explicándome como hay que majarse-Peter me miró y mordí mis labios, di media vuelta- ¡Lali perdón!-me siguió.
-Después hablamos de eso, ¡ahora ayudá! Viniste a eso, ¿no?
Él asintió con la cabeza y me hizo caso.
-Lo tenes atado con collar y se está arrastrando solo con una correa imaginaria, ¡¿que onda?!-Gastón se rió.
-Es una persona algo impuntual, llegó a pasarme a buscar y tuve que venir sola, no me jode el venir sola, lo que me jode es haber llegado tarde, cuando toda la vida fui una persona puntual-suspiré.
-¿Más tranquila?-Gastón me miró tranquilo y asentí- ahora hagamos lo nuestro
Tenía razón.
Di galletitas, serví tazas con leche, jugos, y hablé, hablé con cada chico, me contaban de sus avances en el colegio, uno me contó que ganó un concurso de escritura.
-¡Bien!-le sonreí y chocamos los cinco.
-¿Hace falta hacer otra cosa más?-Peter se secó las manos al terminar de lavar platos, vasos y jarras.
-No, es todo por hoy Pedro-Mercedes se acercó y le dio una palmadita en el hombro- aprecio la ayuda de todos, gracias por venir, pero la próxima vez, si hay próxima vez por favor vení más temprano, no solo por respeto a todos los que estamos desde antes, también porque vas a tener el perdón de Lali muy complicado
Mercedes lo miró a él y después me miró a mi.
-Mecha ya entendió-le di un abrazo fuerte-¡nos vemos!
-Nos vemos-Mercedes me abrazó a mi y después a Peter.
-¡Ey volvé conmigo!-Peter me tomó del brazo con cuidado y lo fulminé con la mirada medio mal-vamos a ir para el mismo lado Lali, además, quiero pedirte perdón otra vez, tuve un problema y..
-No me expliques nada, esta bien, vamos
Apoyé mi culo en el asiento del acompañante y Peter encendió el auto, me di cuenta de que estaba la misma estación de radio que dejé puesta por la mañana.
-Facturas-Peter apareció detrás mío mientras me preparaba un té en la cocina, me asusté-¡perdón! Yo no quería..
-Basta de pedir perdón Juanpe, esa es la palabra que más escuché a lo largo de mi corta vida.. Perdón por no haber podido venir, perdón porque me mandé una cagada, perdón por engañarte, perdón por no haberme cuidado cuando querías descansar de la búsqueda de un bebé y te dejé embarazada, y lo perdiste.. Perdón por...-la voz se me quebró, suspiré y sentí una caricia en una de mis mejillas- no quise terminar hablando de lo mío-volví a la realidad, al presente.
-Fue... fue muy injusto con vos, y que desconsiderado.. Pasaste por tanto La, te admiro-se puso a jugar con mi pelo- y te deseo cosas buenas
-Lo decís por pena, no necesito eso
-¿Podes parar de tomarte todo como si te estuviese atacando?-elevó sus cejas.
Abrí la bolsa con las facturas y comencé a masticar una media luna, después me senté en el sillón y me puse a ver las fotos que junto a las otras maestras sacamos de las actividades de hoy, se las mandé por mail a los papás.

Estúpido e ingenuo corazón cálidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora