𝐖𝐨𝐦𝐚𝐧

05

"Muero por que el mundo sepa que tengo a una hermana maravillosa a mi lado"

[•••]

Mientras Stella estaba buscando a Wolff, él se encontraba siendo regañado por Susie y Lewis.

-Te dije que dejaras de investigarla, Torger.- Susie estaba sumamente enojada.- Eso no era de tu incumbencia, ella tiene todo el derecho de no querer hablar sobre su familia y su vida personal.

-Aparte de que eso estuvo muy mal, ¿por qué mandaste a publicar eso?.- habló Lewis.- Ella te puede demandar, Toto.

-Es lo que he tratado de decirles desde el principio, pero no me dejan ni hablar.- ambos lo vieron con los brazos cruzados.- Acepto que sí mande a investigarla y sé que estuvo mal, pero yo no mande a publicar lo que salió.

-Oh claro, llego por arte de magia.- dijo Lewis con sarcasmo.- Esto no es Harry Potter, Toto.- Wolff bufó.- Nosotros somos simples muggles.

-No fue por arte de magia, cuándo la publicista fue a mi oficina se ha deber traspapelado el sobre con la información.- Susie negó y se sentó en el sillón con los brazos cruzados.- Está enojada.

-Muy enojada, pero no tan enojada cómo la italiana que seguro te está buscando.- Lewis rió un poco.- RIP para Toto Wolff.- besó su dedo índice y lo subió hacia el cielo.

Mientras tanto la italiana iba llegando al hospitality de Mercedes, George que iba saliendo al verla se dio la vuelta para volver a entrar y que no lo viera, algo que fue muy tarde.

-George no avances un paso más.- el pobre británico maldijo y cerró los ojos con fuerza.- Quiero que le hables al idiota de tu jefe.

-Hola Stella.- se volteó y le sonrió.- Toto no está aquí.- mintió, Stella lo miró con ambos brazos cruzados.

-Mira George, me caes muy bien y no quiero desquitar mi enojo contigo. Así que lo mejor es que vayas y le digas que estoy aquí esperándolo o entraré sin importarme nada.

George asintió y le pidió a un ingeniero que le avisará a Toto que la italiana estaba ahí.
Ambos se quedaron en silencio, hasta que George habló:

-¿Hoy es un hermoso día, no cree?.- dijo con cierto toque de nerviosismo.

-Era un hermoso día, pero tu odioso jefe lo arruinó todo así que ya no lo es, es un día de mierda.- George rascó su nuca.

-Si es cierto, un día de mierda.- él ingeniero regresó y le susurró algo a George que asintió.- Ya puedes pasar, su oficina está en el segundo piso a la derecha.

Stella le agradeció y rápidamente se adentró al hospitality, el personal de Mercedes al verla enojada lo único que hicieron fue hacer una mueca.

Cuándo ella estuvo afuera de la oficina y tocó, Susan le abrió y la abrazó pidiéndole una disculpa por lo sucedido.