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"Susie, déjame explic...mierda"

mierda"

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17 de Noviembre de 2022.
Oxfordshire, Inglaterra.

-Oh dios mio.- ambos soltaron un fuerte gemido al llegar al clímax. Toto dio una última penetración y salió de Stella para acostarse a su lado.

-Eso fue...- no terminó de decir ya que su respiración era pesada, Toto rió y se quitó el condón para tirarlo en el bote de basura que estaba a su lado.

-fue grandioso.- el austriaco terminó de decir.

Ambos se quedaron en un silencio para nada incómodo, lo único que se escuchaban eran sus respiraciones.

El día de ayer el austriaco y la italiana habían llegado a Oxfordshire, ya que el día de hoy iban a ir a la casa de Horner el mejor amigo de Stella para celebrar su cumpleaños número 47.

Después de eso, ambos iban a tomar un vuelo a Mónaco en dónde se iban a encontrar con los italianos, los monegascos y la británica para dos cosas.
La primera, Fio les quería contar de su embarazo y la segunda el celebrar su cumpleaños número 37.

En estos momentos son las 11 de la mañana y ambos ya van sumamente atrasados, Horner los citó a la 1:30 y a ellos les pareció bien el tener un mañanero.

-¿Ya viste la hora que es Christian?.- Stella se levantó rápidamente al ver la hora en el reloj que estaba colocado en la pared de la habitación del hotel.- Joder, Horner me va a matar si llego tarde.

Toto colocó ambas manos detrás de su cabeza y rió al ver que la italiana estaba apurada buscando en su maleta la ropa que se pondría.

-Bueno, hace unos minutos no te estabas quejando.-

Rió aún más al ver como la italiana reviraba los ojos.

-Si en quince minutos no estás listo, me voy a ir y te voy a dejar aquí.- dijo metiéndose al baño para darse una ducha.

El austriaco se levantó, agarró una toalla y de adentro al baño.
Se mordió el labio al ver el cuerpo de Stella siendo enjabonado y sin pensarlo dos veces se metió con ella.

-Creo tendré que bañarme contigo, para así ahorrar agua y tiempo.- mordió el lóbulo de la oreja de Stell haciendo que ella suspirara.

-Esta bien, pero debemos bañarnos rápido ya que es media hora de camino.- Toto hizo un sonido de afirmación y dejó un beso en el cuello de Stella para comenzar a enjabonarse.

𝐖𝐨𝐦𝐚𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora