Emily... [Libro #2] [Saga bebé] +18✔

Capítulo I: Enmascarada.

    [Editado]✔

New York;

Omer Rinaldy;

Leves caricias en mi rostro me obligan a abrir los ojos. Observo a la trigueña que me regala una sonrisa espléndida, no es para menos, ayer tuvimos un sexo increíble. Karla y yo llevamos aproximadamente cinco años de relación y desde hace una semana le propuse matrimonio. La prensa enloqueció. Jamás pensaron que me casaría, antes de conocerla tenía encuentros ocasionales y sin importancia, no mentiré diciendo que de vez en cuando no tengo mis deslices, sin embargo, la trato como una princesa. Tardé muchísimo tiempo en encontrar a una mujer por la que valiera la pena  comprometerme, perdía el interés después de tenerlas en mi cama. Karla es una de las modelos más reconocidas del país. Me siento orgulloso de caminar con ella del brazo, soy la envidia de todos los hombres y ella, la de todas las mujeres.

—Hoy es la gala benéfica, ¿crees que deba asistir? Mi mamá me pidió que viajara a Miami en la tarde para la fiesta de cumpleaños de mi hermano. —Camina hasta el baño con una de mis camisas puestas. Aprieto los dientes, ella sabe que detesto que se ponga mi ropa y, aun así, continúa haciéndolo. Decido ignorar ese detalle para no amargar nuestra mañana. Me levanto de la cama también, en menos de quince minutos Amara vendrá con uno de sus típicos vestidos de diseñador puesto a leer mis compromisos del día.

—¿Omer, me estás prestando atención? —Pregunta mi prometida, obteniendo toda mi atención. ¿No se cansa de hablar nunca? Camino hasta el baño y dejo un casto beso en sus labios después de cepillarme los dientes.

Karla me observa a la espera de una respuesta. ¿No puede decidir por ella misma? ¿Dónde quedó esa mujer decidida e independiente de la cual me enamoré? Suspiro con pesadez. —¿El cumpleaños de Arthur no era en dos semanas? —Inquiero y ella asiente. Mi suegra junto a su grupo de amigas son las mujeres más frívolas y manipuladoras que he conocido.

—Sí, pero ya conoces a mi madre. No tolera que el cumpleaños de mi hermano deje de celebrarse, aunque él detesta celebrar la fecha, ella terminó por convencerlo. —Relata, asentí desde la ducha. Por suerte, no tendré que convivir con esa señora. De solo escuchar su nombre, ya se puede deducir lo demás. Me coloco el traje, uno de mis relojes de oro y algo de perfume. Karla elige un vestido color crema que resalta bastante las curvas que tiene y que me vuelven loco.

—Me iré a Miami, ¿te reunirás conmigo el día de la fiesta? —Cuestiona, cierto, debo asistir a la fiesta. Me aburre muchísimo tener que ir. Arthur es contemporáneo conmigo, sin embargo, no nos caemos nada bien. Somos rivales en los negocios y eso es algo que no cambiaré nunca. No tolero su manera de operar. Ambos tenemos varias sucursales de todo tipo de empresas.

—¿Te llevo al aeropuerto? —Pregunto, ante todo debo ser un caballero, mi padre inculcó valores en mí, que ni siquiera la señora que me trajo al mundo logró borrar con su actitud. Es una pena que los años al lado de mi progenitor no la ayudaran a entender que es lo realmente importante. Gracias a ella y a otros sucesos de la vida considero a las mujeres un negocio, aunque quiero a Karla por todo el tiempo que hemos interactuado, no puedo decir que la amo. Me casaré con ella porque llevamos bastante tiempo juntos, es la única que conoce mi historia y como soy cuando no me encuentro frente a las cámaras. Además, puedo asegurar que los hijos que tengamos tendrán un hogar lleno de amor y todo lo material que puedan necesitar. Lo único molesto es la profesión a la que se dedica, asegura que dentro de cinco años tendremos bebés, pero ahora tiene demasiados proyectos como para destruir su cuerpo. El modelaje es muy estricto.