Capítulo XII: Ethan✔

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Maratón 2/5.

Actualidad;

Emily Walton;

Mi respiración es un desastre, al igual que mi cabello, mis ojos están tan hinchado que me duele mantenerlos abiertos. Lucho por mantenerme despierta y dejar de llorar, ¿por qué reaccionó así? Lo único que necesitaba de ella era un abrazo. Supongo que debo tener la madurez suficiente para aceptar que no siempre las personas harán lo que esperamos de ellas. Hoy vi tantas facetas desconocidas de la mujer que me dio tanto desde los ocho años. ¿Quién es ella realmente? La mujer que abrazaba aquellas noches donde las pesadillas eran tan frecuentes que no me permitían dormir, o la que me golpeó, lastimó con palabras y quiso que abortara a un bebé que no tiene la culpa de estar dentro de mí. El auto se detiene, pero no logro ver ninguna casa. Frunzo el ceño y observo a mi guardaespaldas. ¿No me escuchó? Seguramente no me llevará a su casa, dudo que mi noche pueda ser peor.

—Bájese. —Observo en todas las direcciones, nos encontramos en una especie de, ¿parque? Hay muchos árboles.... Suspiro y al comienzo lo dudo un poco, sin embargo, termino haciéndole caso. —Tenemos que ir a pie, es imposible llegar en auto. _Agrega, ¿caminando? Estoy muy cansada, y.... Todo se vuelvo negro por unos minutos a mi alrededor. Cuando abro los ojos lo primero que veo son las iris verdes más hermosas, intensas, inexpresivas y frías que había visto en mi vida. Estábamos sentados en un banco, más bien, él estaba sentado en un banco, yo tenía la cabeza sobre sus piernas. Su rostro estaba muy cerca, era perfecto. ¿Cómo pueden existir hombres tan perfectos físicamento? Comienzo a pensar en Omer y me golpeo mentalmente por eso. El viento sopla con fuerza, parece que va a llover. El robot tiene el ceño fruncido, aun así, no tenía ninguna emoción en el rostro. Quisiera ser así, no demostrar lo que siento, pero por desgracia no puedo ocultarlo tan fácilmente, y más si se trata de una persona que me importa. Me incorporo y masajeo mis sienes. Estoy algo incómoda.

—Estaba a punto de llevarla a un hospital, en su condición no es recomendable que se sugestione de esa manera. —Enarco una ceja, sé que tiene razón, me resulta imposible no sentirme mal después de lo sucedido con mi tía. Las ganas de llorar vuelven a resurgir y me maldigo internamente por romperme de tal manera frente a un extraño que conocí hoy y que carece de emociones humanas. Hace una mueca y palmea mi espalda. —Señorita Walton, no me apetece pescar una neumonía, mi casa está muy cerca. Si quiere llorar, al menos hágalo bajo un techo y donde yo no pueda verla. Sígame. _Masculla, levanto el rostro para poder observar el suyo. Está irritado, y podría asegurar que hasta enojado. ¿Por qué está enojado? Quizás fue un error pedirle que me llevara a su casa en primer lugar. A pesar de todo lo que estaba pensado, lo seguí.

Caminamos muchísimo, por primera vez en mi vida, odié los tacones. El robot caminaba muy rápido y algunas veces pensé que se olvidaba que yo iba a su lado. Maldije por lo bajo cuando mi zapato se rompió. ¡Algo más! Aprieto los puños y me obligo a caminar sin protestar. Al menos tuvo la amabilidad de llevar mi maleta. Suspiro aliviada cuando distingo su casa, ¿por qué vive tan apartado de los demás? ¿Es un ermitaño? Puede que sea asocial, o ese tipo de personas que prefieren estar solos consigo mismo. ¡Muy bien, Emily, ya vienes a molestar a un desconocido con tus problemas! Abre la puerta y me deja pasar primero, detallo la casa por dentro. Pensé que estaría desordenada, pero es todo lo contrario. Estantes de libros por todas partes, la cocina a la derecha, un largo pasillo a mi izquierda y la pequeña sala de estar. Caminé hasta ella, había pinturas verdaderamente sorprendentes en ella, ¿quién pintó tales preciosidades? La chimenea está apagada y frente a ella hay un <<<sofá>>> Otra vez Omer, ¿lo recordaré cada vez que vea un sofá? Me volteo, el robot se encuentra observándome con curiosidad. No es la primera vez que lo hace, ¿por qué me mira de esa manera? Suspiro con pesadez y me dejo caer en el sofá, olvidando mis modales. Estoy tan cansada, podría quedarme dormida con facilidad. El silencio es largo y tedioso, decido romper el hielo y preguntarle su nombre, no puedo llamarlo robot, aunque no le queda nada mal.

Emily... [Libro #2] [Saga bebé] +18✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora