capitulo seis: volver a mirarse

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Franco no sabía cómo sentirse luego de ese abrazo, la mujer que había corrido hacia él era una completa extraña, no la recordaba para nada, pero le fue imposible no sentir nada en ese abrazo. La desesperación mezclada con felicidad en la voz de aquella mujer lo había conmovido, por supuesto al escucharla, tan desesperada gritando su nombre, pudo adivinar que se trataba de su esposa, aquella esposa que no recordaba.

Ni siquiera había tenido tiempo de mirarla, ella estaba tan desesperada por ir a su lado que Franco no había alcanzado a ver su rostro antes de sentir ese par de brazos femeninos alrededor suyo, apretandolo con fuerza y suavidad al mismo tiempo

—Franco, ¿te sientes bien? -preguntó Albin acercándose a él- creo que han sido muchas emociones para cinco minutos

Si, definitivamente había sido demasiado. No solo acababa de enterarse de la muerte de su hermana pequeña, lo cual lo había destrozado, si no que también había vivido el reencuentro con una mujer a la cual no recordaba y resultaba ser su mujer.

—Me siento extraño, pero tranquilo, estoy bien.

—¿Quieres ir a descansar?

Franco lo pensó, por supuesto sus hermanos no le dirían nada, todas estas nuevas emociones y noticias lo habian cansado bastante, pero no quería irse a descansar con tantas preguntas en la cabeza.

Quería saberlo todo, quería conocerla. Necesitaba escuchar de la boca de esa mujer que estaban casados, conocer su historia, saber cuanto tiempo llevaban juntos, si él era un buen esposo, conocer a sus hijos.

Sabía que no era recomendable recibir tanta información de golpe en su estado, y que mucha información en tan poco tiempo podía ser contraproducente, pero en ese momento era lo que deseaba.

—No, de hecho... necesito hacer algo

—¿Qué quieres?

Fuera de la sala, Sarita Elizondo seguía en shock luego de las palabras de su cuñado.

"Franco no te recuerda"

Quiso reírse, y luego regañar a su cuñado por bromear con algo tan serio como la salud de su esposo, pero algo en la voz de Oscar Reyes le indicaba que aquello no era ninguna broma, los dos hermanos Reyes estaban completamente serios, y Sara pudo notar la tristeza de ambos en sus ojos, verlos asi, fue lo que le confirmó que Oscar decía la verdad, si todo estuviera bien, ambos estarían saltando de alegría de haber encontrado a Franco.

Sara recordó lo sucedido hace tan solo instantes, el momento en que puso sus brazos alrededor de su esposo, ella se esperaba que Franco la recibiera con los brazos abiertos, se había imaginado un abrazo eterno, lleno de lágrimas por parte de ambos, había imaginado que por fin su esposo le diría que la amaba luego de dos años, pero había sentido a Franco completamente distante, como si no tuviera ganas de estar ahí junto a ella...

O mejor dicho, como si no la conociera.

La mente de Sarita no pudo evitar comenzar a crear mil escenarios donde ella y Franco no volvían a estar juntos nunca, porque Franco no la recordaría jamás.

¿Y si Franco se enamoraba de otra?

¿Y si ya no la encontraba atractiva?

¿Y si jamás recordaba a ella y a sus hijos?

¿Qué pasaría con Andrés y Gaby? ¿Como les diría lo que sucedía?

—Por favor, expliquense -pidió ella-

Necesitaba saberlo todo antes de volverse loca.

—Sara, aún no sabemos exactamente qué pasó, ni siquiera Franco lo sabe, pero no recuerda nada de lo que ha pasado en los últimos diecinueve años -Habló Juan-

El corazón no olvida (Sarita y Franco)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora