Entrenamiento

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— Vámonos. Es uno de los Jeon — dijo Taemin y huyeron.

Yoongi recogió mi pantalón lleno de barro y me lo entregó — ¿Qué mierda haces aquí sólo? — se veía molesto.

— ¿A caso no puedo salir sólo? — pregunté en el mismo tono, arrebatándole mi prenda.

Me puse de pie y lo coloqué de nuevo.

Sus ojos se quedaron en mis piernas por un segundo y desvío la mirada — ¿Jungkook sabe qué estás aquí?

— No — le dije ya vestido de nuevo.

— Se va a molestar muchísimo.

— Me importa un diente de ajo — le respondí. Estaba pasando el susto. Tendría que aprender a defenderme mejor.

— Sabes que andar solo por aquí es peligroso y más con ese jodido olor.

— Como sea, gracias por la ayuda. Debo volver a casa.

Se acercó a mí y pasó su mano por mi rostro dónde tenía una pequeña herida abierta.

Sus dedos largos quedaron manchados con mi sangre y sus ojos cambiaron a un rojo fuerte.

Pensé que la iba a probar pero no lo hizo. La limpió con su ropa. Sus ojos volvieron al naranja — ¿Cómo llegaste?

— Caminando...

— Estás demente. Te llevaré de vuelta, esperemos mi hermano no te mate.

  Sostuvo mi mano entrelazando sus dedos con los míos y en un instante ya estábamos en el patio de la casa — Gracias — dije aún sin soltar su mano.

— ¿Se puede saber dónde estabas? — Jungkook se veía furioso. Miró el agarre de nuestras manos y nos soltamos de inmediato.

— Salí a dar una vuelta — dije dispuesto a subir a la habitación.

— Yo me voy, no le hagas nada — habló Yoongi antes de desaparecer.

Comencé a caminar y Jungkook fue detrás de mí — ¿Qué hacías con él y por qué estás así de sucio?

Subí los escalones ignorándolo hasta entrar en el cuarto. Una vez ahí me empecé a quitar la ropa — Fui a ver a Nicolás.

— ¿Sólo? ¡Aún no sabes defenderte! ¡Te prohíbo qué lo vueltas a hacer!

— ¡Tú no puedes prohibirme nada! — Quedé totalmente desnudo y ví como su rostro ahora parecía asustado al ver mis heridas.

— ¿Qué te pasó?

— Nada...

— Jimin, dime que te pasó... — se acercó.

— Fueron esos jodidos lobos, los que me atacaron aquella vez en el centro de salud.

— Los voy a matar.

— Tranquilo. Estoy bien, solo quería salir por mi cuenta. Tu hermano me ayudó.

— Perdóname, me asusté mucho. No quiero que nada te pase — comenzó a besar mis heridas — vamos para ducharte.

Me sentó en la tina y fué dejando salir el agua fría. Lavó mi cabello y mi cuerpo hasta dejarme limpio, teniendo especial atención y cuidado.
Luego me acostó sobre la cama y me abrazó.

Me sentía tan cansado. Deseaba tanto poder dormir y no solo eso... Sino dormir con él, cómo una pareja normal.

  No me gustaba esto de ser vampiro, lo odiaba. Quería tener a Jungkook en mi vida pero sin toda esta mierda.

Un rato más tarde busqué el libro que me había dado Nicolás, en mi gabán, pero no estaba.

Busqué por todos lados y me entró muchísimo desespero al no hallarlo. Lo más seguro era que se me había caído en el bosque durante el forcejeo.

— ¿Qué buscas?

— Un libro... Pero olvídalo — tenía que volver por él ¿Pero cómo? — Quiero que me enseñes a teletransportarme.

— Está bien. Pero debemos ir con la madame ¿Trato?

— Trato — puse los ojos en blanco.

Otra vez ver a esa vieja lunática que dice que yo soy un eclipse y no sé cuántas cosas más.

                               ~

  Después de un día aburrido en el banco, fuimos de nuevo al pantano.

La mujer casi me besa de la emoción. Seguía pensando que yo era un ser sobrenatural.

— Lágrimas salieron de sus ojos y detuvo la convulsión — le contaba Jungkook.

— Te lo dije, tiene el don de la sanación y conserva aún su alma humana.

— ¿Qué significa? — pregunté.

— Verás... Tu madre era médico... Tu padre de sangre; un chamán y quién te entregó su alma y poderes era un vampiro. Tienes los dones de los tres. Tu alma está pagada, por lo tanto al volverte un vampiro aún la conservarías.

— Sí, ok. Quiero teletransportarme — dije ignorando todo lo que dijo.

— Eso es fácil. Sobre todo para tí, tienes un hombre a tu lado el cual tiene ese don.

lo miré levantando las cejas para que viera que era su responsabilidad que yo aún no supiera como hacerlo.

— Debes comenzar un entrenamiento, bebé.

— Es cierto. Debes entrenar — estuvo de acuerdo madame Camile.

Sin tener otra opción acepté.

— Bien. Lo haré ¿Cuándo empiezo?





Tres caps seguidos. Tal vez crean que son aburridos o no fue nada relevante pero todos los detalles valen para cosas que pasarán más adelante. Presten atención.

Por cierto yo nunca he visto una peli de vampiros ni nada de eso. Pero he leído desde que me pidieron escribir; muchos foros sobre el tema. Quiero que mi historia sea diferente al resto y tenga cosas nuevas. Recuerden que es ficción so... Otra cosa, en mi historia si se bañan jajajaja leí por ahí que no lo hacían o que lo hacían con leche (???) Pero pues bueno. Yo no quiero que huelan a sangre y culo.

Las amo. Me wa dormir.

IN THE WOODS (KOOKMIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora