Marcy Wu era una prodigio con la música pero una que estaba enfrentando el pánico escénico. Sasha Waybright es una adolescente mimada, linda y con gran fama que acaba de mudarse a una pequeña ciudad.
El camino de ambas va a coincidir cuando Sasha e...
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¡Y las puertas estaban abiertas!
Ocurrió una increíble aglomeración de personas, para la mala suerte de Marcy esto era una realidad. Acomodó su vestido con pánico, observó a uno de los mayordomos frotando el arco con la resina para que no tuviera fallas. Después de todo su mamá si tenía grandes expectativas puestas en el espectáculo de esa noche.
Volvió a limpiar sus manos en el vestido, sin tener suciedad ni nada, solo es para calmar los nervios que sentía, esas náuseas que se habían acumulado en todo su ser y se apoderaban de ella. Decidió no comer durante unas cuantas horas para evitar algún accidente fatal que tenga que ver con expulsar su comida.
Escuchó la voz de su padre “¡Bienvenidos sean todos!” se inclinó a la altura del micrófono “Me alegra tenerlos aquí, tener personas tan influyentes.” sonreía falsamente que esa hipocresía solo causaba más náuseas en la pelinegra.
La puerta se abrió dejando ver a la familia Waybright llegando tarde, pero sin dejar de ser icónicos, los camarógrafos apuntaron sus cámaras hacia la afamada y querida familia.
Marcy tuvo que ponerse de puntas para ver qué Sasha llevaba un traje y no un vestido, que portaba una pequeña coleta y que estaba siendo acompañada de Anne que llevaba un chongo y un vestido de gala.
<<¿Que hacen ellas aquí?>> Pensó irritada. No puede ser que estuvieran también en ese lugar.
Los que se encontraban en el lugar comenzaron a aplaudir extasiados. Realmente ellos eran queridos.
Marcy se limitó a seguir las indicaciones de su padre para que ella subiera al escenario.
“Damelo.” dijo nerviosa al mayordomo que portaba su apreciado violín.
Acató las órdenes y observó el escenario, todo estaba como pedía. El atril a la izquierda para poder ver con claridad lo que tocaría.
“¡Marcy Wu tocará está noche. Mi hija..” decía con orgullo el señor Wu.
Sasha se abrió paso junto a Anne sin soltar su mano. Su destino ahora era detrás del escenario, dónde los telones ocultaban la figura de su amada que quizá hoy lucía deslumbrante.
La castaña solo seguía a Sasha bastante desanimada. ¿Por qué se hacía tantas ilusiones? Desde un inicio Sasha aclaró que iban en plan de amigas y ella está consciente de que alguien más ocupa su corazón.
Pero se quería aferrar a ella, quería decirle que no fue una casualidad y un accidente equivocarse de escuela, era claro que sabía leer, pero buscaba una excusa para acercarse a la joven que admiraba todas las mañanas cuando llegaba a sus clases.
Marcy acomodó su cabello detrás de su oreja. Un estremecimiento recorrió su cuerpo al sentir la fría mano de Sasha colocar un broche.
“Te queda bien.” sonrió de forma coqueta.
Marcy se sonrojó al ver a Sasha más detalladamente, en serio era como ver un ángel, todo le quedaba.
Apartó su mirada rápidamente.
“Traje a Anne ¿La recuerdas?” miró a Anne con una agradable sonrisa.
Anne asintió aún aferrándose a la mano de la Alemana. Acción de la que se percató Marcy, sintiendo un poco de celos pero ocultandolos con éxito.
“La recuerdo, pero no recordaba su nombre.” bajó la mirada nuevamente a las manos. “¿ya estás coqueteando, Waybright?”
“¡Ella es mi amiga! ¿Acaso estás celosa?” bromeó con un leve rubor en sus mejillas.
Anne se sentía incómoda al ver a las chicas coquetear de forma descarada frente a ella, o si eso se considera un coqueteo...
Marcy captó la señal de que era su hora de salida, Sasha quiso detenerla para obsequiarle algo, pero Marcy tenía que irse con urgencia.
“Cuando termines tu show será.” dijo la rubia dándose por vencida.
Marcy se paró frente a todos escuchando aplausos de bienvenida que ahora estaban causando mareos. Cerró los ojos fuertemente evitando poner atención en todas las miradas que estaban puestas en ella y exclusivamente en ella.
Tomó una bocanada de aire, su corazón latía frenéticamente. Intentó débilmente poner el violín de forma horizontal mientras temblaba como si estuviera en el jodido polo norte.
Tragó saliva, y comenzó.
Por lo nerviosa que estaba ejerció mucha presión sobre las cuerdas con el arco “No, demonios, así no es...” Murmuró molesta consigo misma.
Ahora sentía el dolor en su pecho, sus ojos se llenaron de lágrimas rápidamente.
Intentó arreglarlo quitando presión, lastimosamente esta vez lo hizo mucho más suave ocasionando que el instrumento sonará igual o peor que antes.
“¡NO! ¡NO! ASI NO ES.” jadeó y agarró su pecho con fuerza, dejando caer el violín.
Marcy sentía como si estuviera a punto de morir, como si su corazón en cualquier momento le fallaría y moriría de un infarto.
Sasha que estaba viendo eso desde la primera fila se aproximó al escenario para ayudarle soltando la mano de Anne.
Corrió por todas las escaleras para llegar a dónde Marcy se estaba dando a conocer.
Momentos antes de poder recorrer el telón e ir en su ayuda antes que cualquier otra persona escuchó un fuerte impacto. Apartó el telón de su vista para percatarse del cuerpo tendido de Marcy sobre el piso de madera.
Rápidamente lo fue a recoger con preocupación y agobiada por el estado de Marcy.
Sasha estaba realmente emocionada por verla tocar esa noche.
