Capitulo 16

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N/A: Se inspiró para este capítulo en Hella Potter and the Reincarnated OC. El crédito es para el autor.

(ROTS)

Edmund estaba absolutamente furioso y al borde de romper algunos cuellos. Alastair Moody, había asumido que Moody sería un buen maestro, pero no, era el peor. Lanzar imperdonables justo en frente de ingenuos adolescentes de catorce años, hizo que Edmund lo despreciara. Por lo que había escuchado, Moody torturó a una araña con cruciaticus justo en frente de Longbottom, cuyos padres todavía estaban en coma inducido mágico en San Mungo.

Edmund gruñó de nuevo y cortó su espada recubierta de chakra de viento en un muñeco de entrenamiento. Todo volvió a un hombre estúpido. Albus, el siempre tan excéntrico, entrometido, chupapollas y maricón Dumbledore. Oh, Edmund lo odiaba. Había entendido el juego del anciano. Desde el momento en que Iris pisó las paredes de Hogwarts, había estado en muchas situaciones que amenazaban su vida y tuvo que soportar todo el peso de la mentalidad de oveja de los magos. Tuvo que enfrentar peligros todos los años y al final del mismo, fue enviada de regreso con sus familiares, quienes oraron por su muerte todos los días.

Todo esto fue causado por un viejo cabrón delirante. Había dejado a Iris en los umbrales de la magia que odiaba a los muggles, la había empujado constantemente contra viento y marea poniéndola a prueba a su manera retorcida y la había manipulado para que lo mirara como su salvador. Pero, ¿qué podría hacer Edmund para que Iris viera la realidad? Sus dos acosadores siempre estaban a su alrededor y hacían todo lo posible para aislarla y alejar a quien intentaba acercarse a ella. Sus sentimientos por Iris eran extremadamente claros y le dolía verla lastimada, tanto física como emocionalmente. Todo lo que necesitaba era una oportunidad, solo una, y expondría a todos los que habían tratado de dañarla, controlarla y usarla para su beneficio.

(ROTS)

"Te creo."

En el momento en que las palabras salieron de sus labios, Edmund se preguntó si serían las equivocadas. La mirada en el rostro de Iris Potter mientras giraba la cabeza para mirarlo era... desgarradora, por decir lo menos.

Cuando la copa seleccionó a Iris como la cuarta campeona, Edmund pudo ver la conmoción y el miedo en su rostro. Estaba muy claro que la tomaron completamente desprevenida y no tenía intención de participar en el torneo.

Pero, siendo los adolescentes ingenuos y el hábito de comportarse como ovejas, se culpó a Iris de ser un sabueso de la gloria y un tramposo. Muchos estudiantes querían participar en el torneo y fue un gran problema para ellos. Para un niño de catorce años engañar a la copa y luego reclamar inocencia, se sintieron agraviados. Incluso sus mejores amigas, Weasel y Granger, la habían abandonado, la primera acusándola de hacer trampa y tener toda la gloria y el dinero, mientras que la segunda simplemente siguió a la multitud, dedicando una mirada de culpa a Iris y marchándose sin decir una palabra.

Al final del día, ni uno solo de su Casa estaba todavía con ella, dejándolos solos en el corredor que Edmund había elegido para enfrentarse a Iris.

Edmund, permitió que una sonrisa apareciera en su rostro y dijo en un tono tranquilizador: "Te creo. No ingresaste tu nombre en el torneo".

Te creo. Tres pequeñas palabras. En tres palabras, Edmund Vulpis se las había arreglado para lograr lo que Malfoy y Snape habían intentado y fracasado durante los últimos años. Había roto a Iris Potter. Ella casi se desplomó hacia adelante en su túnica, sus sollozos y gemidos amortiguados por la tela de alta calidad, pero definitivamente podía sentir el temblor de su cuerpo cuando la rodeó con sus brazos.

Edmund rápidamente se puso a trabajar para calmar al 'Salvador del Mundo Mágico'. Frotando círculos en la espalda de la pequeña niña con una mano, acarició con la otra su cabello enredado.

TRADUCCION_Harry Potter: El origen de la espiral_COMPLETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora