18. Caminos trazados.

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"¡Capitán!", "¡Lo hemos extrañado mucho, capitán!"

No hubo comentarios de más en medio de todo el bullicio, aunque las preguntas se encontraban implícitas en medio de cada grito que compartían los tripulantes del Polar Tang; pues habían pasado más de tres años en que ninguno había visto el rostro de otro nakama, siempre en misiones obligatorias encomendadas por aquel hombre que ahora se proclamaba dueño de las vidas y voluntades de cada uno de ellos.

Pasada la algarabía, el submarino parecía sin vida, muy a pesar de la presencia de la casi totalidad de la tripulación; las únicas voces que se escuchaban, provenían de la garganta seca del capitán que dirigía la nave. Cada uno parecía notar como la voz del moreno se desgarraba con cada indicación que daba, pero no era por la fuerz que empleaba; sino por el desgaste de sus cuerdas vocales.

Law haciendo caso omiso de las miradas preocupantes de sus nakamas, solo se encontraba enfocado en la culpable de los acontecimientos de estos cuatro años; quería encontrarla a como de lugar, y si no fuera porque tenía que entregarla sana y salva, la mataría ni bien la viera.

Mirando el Eternal Pose en su mano, solo parecía visualizar el rostro de la morena en su lugar; leyendo las palabras "Divine Hell", hacía que en su rostro se dibujara una sonrisa retorcida al conocer a donde los estaba dirigiendo el aparato.

"Al fin te tratan como lo que eres, (Tn)_______. Una puta en toda la extensión de la palabra."

* * *

- De tin, marín... de don...

- ¡No puedes decidir nuestro futuro de esa manera! - gritaba furiosa Nami mientras propinaba un golpe fuerte en la cabeza del capitán.

- ¡Pero es que no me decido!

- Apuesto a que Urma tiene más capacidad de decisión que tú - rieron todos tras el comentario del espadachín.

Pero lo que fue chiste e irónico para todos, no lo fue para el que estaba a cargo del destino de todos en el barco; y sin poder evitarlo, Luffy tomó en sus brazos a la menos del grupo y la colocó a la altura de la muñeca de la pelinaranja y pidió que señalara con su dedo cualquiera de las tres opciones. 

- ¡Qué te pasa!

- ¡Oye, Luffy! 

- ¿Qué? - miraba a todos confudidos - ustedes dijeron que Urma debe elegir la siguiente isla.

- ¡Ninguno de nosotros dijo eso! - exclamaron enojados los pobres tripulantes.

- Pero...

- ¡Este! - interrumpió la voz eufórica de la pequeña pelinegra.

- ¡Listo! - avaló el capitán.

- ¡¿QUÉ?! ¡NO! - intentaban refutar todos inutilmente.

Pues era en vano el reclamarle a Luffy por el nuevo destino tomado, debido a que sabían que una ves dicha la ruta, no había marcha atrás.

Los ojos claros de la menor de todos, no dejaban de observar el bullerío que ocasionaban los adultos en ese momento; luego bajó la vista a la muñeca de la navegante donde aquella agujita que señalaba al oeste le había llamado la atención.

Ignorando la pelea que empezaba a desarrollarse alrededor del capitán, Urma se dirigió a su cuarto, solo con el fin de cumplir con algo que se le había hecho costumbre, y quería manterlo así.

El cariño y cuidado de los mugiwaras, y el hecho de que tenía apenas cuatro años; no anulaba la realidad de que su madre había desaparecido de la noche a la mañana, y de que había un sentimiento de vacío en la menor. 

Viendo el cartel de recompensas de su progenitora, con un nombre distinto al que ella había conocido en su corta vida, llenaba de preguntas en su cabecita; pero principalmente, ella se preguntaba si su mamá se había cansado de ella y había decidido abandonarla.

"Mami", llamaba para sí misma, mientras abrazaba el cartel; "Mamita, regresa por favor, prometo ser buena."

Y a ojos ajenos y desconocimiento de la tripulación, una figura femenina hacía aparición en la oscuridad para consolar a la pequeña Urma, quien se refugiaba en aquellos brazos, tratando de sentir ese calor materno que añoraba.

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¡No me odien! Sigo viva, y sin ganas de dejar la obra o mis escritos.

He estado en mi trabajo, y por unos asuntos, he decidido independizarme; y pues... consume mi poca paz mental que tengo y mi dinero jajajaja.

Pero aquí estoy dejandoles algo corto, pero que decidí mejor subirlo a que hacerlas esperar.

Espero les guste mucho, y prometo procurar no desaparecerme tanto.

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Las quiero mucho, y espero que todas se encuentren bien <3

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Mala (Zoro Rorona x Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora