14. Heroína.

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No pudo evitar dar un beso en su pequeña frente y mirar con tranquilidad como ella arrugaba su nariz entre sueños y abrazaba un peluche de oso que Franky le había regalado. Le parecía tan irreal que una criatura tan pequeña y adorable tuviera esa aura que habían sentido con anterioridad.

"Se activó con Enma" - concluyó él. Pues conocía bien el aura de su katana, solo que esta vez, esa aura se había multiplicado a una magnitud que ni él había logrado.

Tomó un respiro antes de dejar la habitación de Nami y dirigirse a donde todos estaban reunidos.

- ¿Creen que fue ella? - escuchó mientras llegaba.

- No había nadie más - contestó Sanji - por la magnitud, creí que se trataba de un enemigo poderoso.

- Yo estaba entusiasmado por luchar - mencionó sin importancia Luffy, ganándose un golpe en la cabeza de su navegante - ¡Pero no iba a hacerlo con Urma! 

- ¿Es la primera vez que sienten ese tipo de fuerza? - cuestionó Robin.

- Uhhhm - se puso a pensar el moreno - tal vez porque es una niña, pero algo similar fue con la princesa sirena llorona.

- ¡No denigres a una princesa, oye Luffy! - entró en cólera el cocinero - aunque ahora que lo mencionas - volvió a su actitud relajada - el llanto de la princesa tenía el mismo empuje.

- Por eso nunca me dejé llevar por su apariencia - chisteó Zoro - Tal vez solo fue una coincidencia, aún no conozco del todo a Enma - pausó - Urma solo quería jugar como ella creía que yo lo hacía.

- ¿Piensas que fue Enma la que ocasionó esa fuerza?

- Es lo más lógico.

Todos parecían resignados a dejar el tema en esa conclusión, excepto por una inteligente arqueóloga que tenía una hipótesis interesante; pero como toda buena científica, no iba a exponer nada hasta tener las suficientes pruebas.

- Amor - dijo invitándolo a dormir - ¿Qué sabes de (Tn)______-san? - la pregunta hizo que el espadachín diera un minúsculo salto.

Pues hablar de ella era lo que menos quería en ese momento, porque algo propio de él, era llevarse por el instinto; y esta noche, este le había dicho que no había duda en que Urma era suya.

- ¿A qué te refieres?

- A de donde viene - se acostaron debajo de las sábanas - ¿Quiénes son sus padres? Tenían que hablar más que de peleas cuando conversaban.

"No hablábamos mucho" - respondió para si mismo con sarcasmo.

- Solo una vez me contó que había tenido una infancia que le gustara recordar. Pero eso es todo.

Zoro cortó la conversación, pues era un mal mentiroso, y a pesar de todo; no iba a divulgar lo que ella le había confesado algunas veces en la intimidad.

"- ¿Piensas que fui una hija de papi?

- Te comportas como una - respondió con sorna, ganándose un golpe de parte de la morena - duele - se "quejó" él, mientras peñiscaba su pierna desnuda, haciendo que por inercia se acercara él dándole un gemido de sorpresa.

-Idiota - sonrió - pues te equivocas, nunca conocí a mi padre.

- Entonces fuiste una hija de mami.

- Un tiempo lo fui - replicó mientras trazaba su cicatriz en el pecho - tengo pocos recuerdos de cuando a mi mamá parecía agradarle - suspiró - uno de esos pocos, era cuando me acurrucaba en su pecho - acomodó la cabeza del peliverde de la manera en la que relataba - y me hacía piojitos hasta quedarme dormida.

Mala (Zoro Rorona x Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora