Katy y el Dolor |+18| #3 de la Trilogía Moretti. -Finalizada- ✔️

Capítulo 8.

Franco: 

Dos semanas después... 

Han pasado dos semanas desde que Enzo regreso a la familia de nuevo, todo ha ido tomando su curso, como debió ser desde el inicio, aun sigue sin aceptar la vicepresidencia de la empresa ya que ese es el puesto en que estoy actualmente y mi papá ocupa la presidencia. 

Hemos dejado que Enzo se familiarice con la empresa, hasta ahora lo ha hecho muy bien, es muy bueno con los números y nos ayuda con las cuentas de la misma. 

Nuestra relacion ha ido mejorando poco a poco, hablamos mas y compartimos aun mas, eso me tiene muy contento porque el muchacho inmaduro que era ya no queda nada, por una parte me entristece que haya aprendido de la peor manera, pero lo importante es que ahora esta aquí con nosotros y mamá ahora sonríe aun más, Luna fue la mas contenta al saber que Katy esta trabajando en la casa cuidando a mi papá.

Katy, ella es una chica genial, Enzo y yo hablamos casi siempre con ella cuando vamos de visita, ella es una chica muy agradable aunque un poco cerrada sobre si misma, se que sufre de ansiedad porque eso lo vi cuando le dio ese ataque en el medio de la calle, hace unos días supe que esta buscando un departamento pequeño donde arrendar y que aun no encuentra algo acorde a lo que quiere. 

Ella es hermosa, muy hermosa y bastante sencilla a pesar de las cosas que vivió, no soy tonto se que ella la tuvo aun mas difícil que Luna al salir de ese sitio ya que ella duro secuestrada por meses junto a ese hombre y eso Enzo también lo sabe, por eso hemos tratado de no acercarnos tanto a ella para que no se asuste, hemos notado que no le gusta el contacto físico y se aísla de las demás personas al igual que el ruido, ya que nosotros al ser una familia grande a veces solemos ser muy ruidosos, espero poder acercarme un poco mas a ella para que se sienta cómoda y sin miedos, ella me cae muy bien. 

—Bro —Enzo entró en mi oficina— ¿Podrías firmar esto? Es la contabilidad del mes. 

—Bien —revise los papeles— todo está en orden, muy bien Enzo. 

—Gracias, sabes que me he esforzado mucho. 

—Siéntate —lo hizo— Enzo.. ¿Has sentido la necesidad de beber? 

—Siendo honesto a veces me siento ansioso por algo de alcohol, pero luego lo medito y escucho música o me pongo a hacer cualquier cosa para olvidar esos pensamientos.. 

—Lo se y confió en que lo harás bien hermano —sonreí. 

Se que estos temas le incomodan pero no puedo evitar preocuparme por el y su salud, ya lleva tres años limpio y no quiero que esa racha se le acabe. Es mi hermano y lo quiero cuidar. 

—Ya es hora de salir, te invito un café —el sonrió. 

—¿A donde me llevaras? —pregunté. 

—Escuche que por aquí cerca hay una cafetería.. No recuerdo el nombre pero según que hacen los mejores cafés y postres. 

—Vamos, yo ya termine aquí. 

El asintió, yo tomé el saco junto con el maletín y las llaves del auto, Enzo aún no maneja ya que dice que siente ansias cuando lo hace. 

Bajamos al estacionamiento, mi padre es el ultimo en irse, ambos subimos a mi auto y maneje hasta la cafetería donde Enzo me iba a invitar un café cuando lo divisamos decía "Casa Coffee", estacione el auto y ambos bajamos, al entrar vimos que estaba casi lleno. 

—Enzo, este lugar está lleno —miraba todo el lugar buscando una mesa. 

—Vamos —lo seguí.