Katy y el Dolor |+18| #3 de la Trilogía Moretti. -Finalizada- ✔️

Capítulo 16.

Katy: 

Dos meses después.. 

Han pasado dos meses desde que ya tengo una relacion formal con Enzo y Franco, desde ese entonces todo ha sido maravilloso para mi, todo ha sido amor de aquí para allá, siempre que pueden sacan tiempo para mi, hace un mes acepte la propuesta de Franco de ir a terapia de nuevo, fue algo gratificante ya que la doctora me quito los medicamentos y los reemplazó por otros que no me dejan dopada -al menos no tanto- y que no me quitan el apetito, gracias a eso adquirí algo de peso, me he sentido mas entusiasmada y con ganas de salir. 

Salir fue todo un reto para mi, la primera vez que lo hice fue a un parque al aire libre, al principio me sentía ansiosa por la cantidad de personas que habían pero luego me relaje y estuve a gusto con ellos acompañándome, aquel día no lo olvidaré, ese día tomamos nuestra primera foto, luego saque dos copias y le entregue una a cada uno, Enzo coloco la de el en su habitación y Franco en su oficina, la mía la coloque en mi sala en un lindo cuadro que me regalo Sabina. 

Desde aquel día en la casa de los Moretti los padres de Lily no fueron más, por lo que me contó Franco, se querían ir del pais ya que estaban avergonzados sobre lo que había hecho su hija, que por cierto la internaron ya que se supo que ella era alcohólica.

Hoy estaba en el departamento de los chicos, me estaba despidiendo de Franco ya que hoy se va de viaje a Italia a arreglar unos asuntos de la empresa junto a su padre, Enzo se quedará a cargo de la misma.

—Me llamas cuando llegues ¿si? Voy a extrañarte —hice un puchero. 

—Lo hare hasta que regrese —asentí— yo también te voy a extrañar bonita. 

Le di muchos besos por todo su rostro, me iba a hacer mucha falta estas dos semanas. 

—Me iré —rio leve— si sigues besándome así harás que me quede y debo trabajar. 

—Lo siento —negó— iría al aeropuerto pero sabes que habrá mucha gente, no seria bonita la despedida. 

—No te preocupes, lo que me importa es que no te agobies —miró su reloj— me voy, papá ya viene por mi, cuídate mucho —miró a Enzo— cuídala ¿esta bien? 

—Si señor —hizo el saludo militar. 

Ambos se abrazaron y el me volvió a besar, tomó su maleta y salió del departamento. 

—Se acaba de ir y ya lo extraño. 

—Ya veras que dos semanas pasaran volando —me abrazó— ¿Qué quieres hacer? 

—Vamos a caminar ¿si? Tengo ganas de ver un rato la calle —reí leve. 

—Que eso venga acompañado de un helado ¿te parece? 

—Vale. 

Tomé mi bolso y el su chaqueta, salimos del departamento, bajamos a recepción y salimos del edificio. 

Tomados de las manos empezamos a caminar, vimos algunas tiendas de ropa y zapatos, me encantaba estar así con ellos, en este caso Enzo, me gusta y alivia a la vez que sean tan pacientes conmigo, caminamos un rato hasta entrar a una heladería, ambos ordenamos los helados, yo ordené chocolate y el de napolitano.

—¿Te gustaría quedarte conmigo el fin de semana? 

—Si —acepté.

—Cuando salgamos de aquí, vamos a tu departamento para que tomes algunas cosas. 

Solo asentí, comimos el helado y luego salimos hacia mi departamento, al llegar, entre de una vez, fui hasta mi habitación, tome unas pijamas, ropa interior, otra muda de ropa, mis pantuflas, medicamentos y cosas de higiene.