Katy y el Dolor |+18| #3 de la Trilogía Moretti. -Finalizada- ✔️

Capítulo 41.

Franco: 

Al día siguiente...

Aún no habían noticias de Enzo, me quede con Katy toda la noche al pendiente de ella y los bebés. Aun no podía creer que seria padre de tres bebés, todavía no le hemos dado la noticia a nuestros padres.

Mi bonita tiene su rostro golpeado, Kate se encargo de dejarle así el rostro, espero que la hayan atrapado y llevársela a la cárcel, Katy no me ha dicho como es que salieron de ahí, tampoco quiero preguntarle, ha tenido muchas cosas encima y no quiero abrumarla. 

Abrí lentamente los ojos, sentí una pequeña caricia en mi mano, era Katy.

—Hola bonita —me acerque a ella— ¿Cómo te sientes? —acaricie su vientre.

—Bien, solo algo cansada ¿no has sabido nada? 

—No me he movido de aquí, no voy a dejarte sola, estas bajo mucho estrés —ella asintió— ¿tienes hambre?

—No, solo quiero saber como esta Enzo.. —sus ojos se llenaron de lagrimas.

—No llores mi amor, pronto tendremos noticias —la abrace. 

Sabina había entrado a la habitación.

—Buenos días —sonrió leve— te traje esto —me tendió un café— se ve que lo necesitas y a ti Kat, te traje comida, debes comer aunque sea un poco ¿si? 

—Gracias Sabina, lo necesitaba —alce el vaso.

Katy le recibió la comida, le agradecí a Sabina  de nuevo por el café, mi teléfono empezó a sonar, me aparte un poco para poder atender. 

—Jimmy ¿Qué me tienes? 

—Kate esta detenida aquí en la estación ¿vas a venir? 

—Por supuesto —tome del café— tengo que verle la cara a esa infeliz. 

—Bien, te espero aquí entonces —colgué. 

Camine de nuevo hacia Katy. 

—Sabina, ¿podrías quedarte con Katy por unas horas? 

—Seguro —asintió.

—¿A donde vas? 

—Voy a averiguar que dicen de Enzo, debo ir a la casa por algo de ropa para ti y quitarme el traje —ella asintió— vendré en una hora o menos, hare todo rápido. 

—Ve tranquilo amor, estaré bien con Sabina. 

—Esta bien —bese su frente— te amo.

Sali del área de revisión y me dirigí a la sala de espera, ahí estaban mis padres, Cameron les estaba entregando café, Cedrik también estaba aquí. 

—Gracias hijo —papá Ángelo le agradeció a Cameron— se aprecia.

—No hay de que señor Moretti.

—Hijo —mi mamá se levantó— ¿Cómo esta Katy?

—Ella esta bien ¿alguna noticia?

—Hasta ahora pidieron un solo donador, tu padre donó sangre para Enzo —ella sonrió leve.

—¿Por qué no te vas a descansar un poco papá? —me agache a su altura. 

—No pienso moverme de aquí —miro a otro lado— mi hijo esta en cirugía y no pienso irme, estoy bien, estoy tomando todo con calma. 

—Tienes que cuidarte, tienes nietos a los cuales cuidar —le sonreí.

—¡Por supuesto! Tu padre es un hombre muy fuerte, podre cuidar a Axel y mi Lía.