Llegue al departamento de Yeong y toqué desesperadamente hasta que me abrió. Me tomé la libertad de adentrarme sin previo consentimiento.
- Yoongi, pensé que no vendrías....
Observé a mi alrededor y vi que tenía todo sumamente impecable, como si hubiera terminado de hacer el aseo, tenía velas en cada esquina y la mesa ordenada, solo para servir la comida.
- Seré breve. - dije llevando mi mirada a ella. - No me interesa ninguna puta explicación, no confío en ti y por mas que me digas, nada hará cambiar este asco enorme que siento al verte.
Yeong frunció su ceño y me observaba detalladamente.
- Creo que la última charla está de más entre nosotros... lo único que necesito es decirte esto, lo cual guarde por años... - apreté mi mandíbula.
- Me entenderías si me dejarás explica....
- ¡No te voy a entender ni un carajo! ¡Me hiciste daño Yeong! Por años estuve cargando este puto dolor y ahora que vuelvo a enamorarme de una mujer, porque ella si es una gran mujer...- suspiré.- No pretendo cagarla con este pedazo de mierda.- la vi de arriba abajo. - Ni contigo, ni con nadie.
- ¿Estás consiente de lo que me estás dicie...
- ¡Si! ¡Estoy plenamente enamorado de mi esposa! - interrumpí.
- ¿Tu esposa? ¿De que carajos me estás hablando? - preguntó de inmediato.
- Oh ¡Sorpresa! - sonreí sarcásticamente y enseñe mi mano, justo donde llevaba mi anillo. - Estoy casado, si, me case y doy gracias al universo por no haberlo hecho contigo.
- Eran nuestros planes Yoon...
- Tu lo dijiste, eran y la verdad no se en que estaba pensando cuando te lo dije. - reí ligeramente. - En realidad no puedo creer en lo idiota que estaba hace unos años ¿¡Cómo pude perdonarte tantas veces, carajo!?
Lleve mi mano a la cintura y otra a mi rostro para dar media vuelta y rápidamente regresar mi postura hacia ella.
- Se que me equivoqué, estoy muy consciente de mis actos, pero cambié, tuve varios años para reflexionar sobre mis errores....
- Es una lástima que no lo hayas hecho en su debido tiempo y mira que te di mil oportunidades de cambiar Yeong. - suspiré.- Ahora es demasiado tarde.
- Se que aún sientes algo por mi, yo también lo sentí al verte.
Quedamos en silencio mientras la veía por algunos segundos.
- Tienes razón Yeong... - sonreí y me acerqué a ella.
Yeong empezó a sonreír y llevo sus manos a mi rostro.
- Me das asco. - quité sus manos bruscamente. - Un asco inmenso... ni por más idiota que estuviera, pensaría en cambiar a mi mujer por una como tú... con ella tengo absolutamente todo, no tengo que buscar en otra parte.
- Se que no me olvidas. - dijo molesta.
- ¿Y que se supone que no he olvidado? - reí.
- A mí, me extrañas, extrañas absolutamente todo de mí, te conozco Min Yoongi.
Fruncí el ceño y me reí aún más de sus palabras, haciéndola molestar aún más.
- Hea... - la vi de pies a cabeza. - Si lo dices por el físico... Hea está mil veces más deliciosa que tú.-sonreí. - No hablemos de sentimientos, educación y lealtad, porque no es algo que tu des, así que esos puntos los tienes ella también.
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- Sabor a mí -
De Todo- " Tú necesitas de alguien como yo y yo necesito a alguien como tú." No se aceptan copias ni adaptaciones.
