Capítulo 24

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Ashton

Todo sucede muy rápido a partir de allí. Detrás de mí siento a Alan empujando a Katrina y Katrina empujándolo a él. Supongo que ya conocen lo que les espera con solo ver la expresión de su rostro, y es por eso que Alan no escatima en con un último empujón mandar a su hermana al frente.

—Mamita... —balbucea Kat delante de Alana.

—Nada de mamita, Katrina Alexandra Dawson Bates. ¡¿Por qué no me dijiste que estabas aquí?! —Katrina corre y se vuelve a esconder detrás de mí. Adelantándose y usándome como escudo.

—Mami, es que yo...

—No señorita, ya no harás lo que quieras. Crees que no me enteré de lo que le hiciste. ¿Qué tu abuela no me contaría del niño? NO TE CRIÉ ASÍ.

¿Niño?

—Mamá...

Alana pasa su mirada a Alan

—Y tú... ¡COMO TE ATREVES A OCULTARME ESE TIPO DE COSAS! Crees que no me enteré. Oh no. Ustedes cuatro tendrán una charla conmigo jóvenes.

—¿Cuatro? —tartamudeo

—Creían que me olvidare de ustedes. —Alana no mueve la cabeza pero señala al otro lado de la sala donde West intenta escabullirse—. Das un paso más West Finnigan y juró llamar a tu abuela.

—Perdone señora.

—¡SEÑORA! —chilla alana

—¡¿Señorita?! ¡Alana! No me agarre de las patillas —llorá.

Miro a Jesse, intentar controlar su risa, y Abby mirando emocionada a la madre de su ídolo.

—Um... disculpe, yo no tengo que ver aquí —dice Jesse acercándose a nosotros—. ¿Puedo irme?

—Tú, tienes que ver con ella —me señala a mí—, y por lo que puedo decir les ira peor que a estos tres.

¿Peor?

Intercambiamos miradas con Jesse. El aroma de la sala cambia a Channel #5 muy repentinamente, comienzo a temblar.

—Sí, mi nariz no me engaña —dice Alana con fingida pena—. Aun después de 24 años...

Alana niega levemente, yo solo miro a Alan y Kat espantada.

JODER.

—¿Qué?

—ASHTON REBECCA WOOD.

Ay dios mío.

—Mi mamá.

Nombre completo, NOMBRE COMPLETO. Eso nunca es bueno.

—¡¿COMO POR UN DEMONIO SE TE ATREVIÓ A VER A TU PADRE?!

Mátenme ahora.

Bueno... tranquilízate Ashton, esto no es tan malo. Poniéndolo en perspectiva con tu vida esto no es nada comparado a tus escándalos.

Puedes controlarlo.

Puedes controlarlo.

PUEDO CONTROLARLO.

Voy a responder cuando otra voz me interrumpe, y soy jalada en un abrazo.

—Ashalia, que bueno que llegaste a salvo, vine tras de ti para saber que estabas bien. Perdóname hija mía, no pude...

Mi mandíbula se descuelga y me separo de mi padre. Mi cuello gira muy lentamente a Dayanne que esta blanca como un fantasma.

Aborten

Desastrosos Felices para SiempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora