Desastrosos Felices para Siempre

Capítulo 1

Ash

¿Por qué tenía que estar pasándome esto? pensó mientras atónita veía el esponjoso vestido de novia que la obligaban a probarse.

¿Qué pasaba con los modistos estos días?

Como es posible que unas simples telas pesaran más que ella misma, y encima, para colmo los adornos en el pecho comprimían tanto la tela que la hacían parecer una tabla, y con su copa 34C eso era decir mucho. Luego sus caderas, cada vez que se miraba la imagen de María Antonieta rondaba por su mente, el vestido era tan caderón que si estiraba sus brazos recién llegaría a tocar los bordes.

Que pasaba con los simples vestidos de novia por que...

Claro…

Era su madre la que había tomado control de todo. Resignada vuelvo a mirarme al espejo.

Si me ponen la peluca y el pájaro, yo misma me mando al paredón.

―Date vuelta querida ―la diseñadora, una vieja señora que necesitaba comer algo más que aire la miro con una sonrisa que la hizo temblar. Su piel se estiraba de tal manera que parecía que se rompería en cualquier momento. Hice lo que dijo.

Cuatro pares de ojos se posaron sobre mí.

―Sigo pensando que las mangas deben de apretarle más ―como no... su madre siempre preocupándose por su comodidad.

Las dos modistas se miraron, claramente pensando en cómo afirmar mas las mangas sin restringirle la movilidad o peor… cortarle el flujo sanguíneo a la pobre muchacha que miraba desesperada una manera de salir de allí.

De todas las madres que se robaban la boda de sus hijas, podrían asegurar que Dayanne Styles era la peor.

―Las mangas... ―Dayanne se aclaró la garganta y se oyó un triple suspiro

Ni bien su madre dijo eso ya tenía a tres señoras jalando las mangas de su vestido y cosiéndolas como si fuera una segunda piel.

Milagrosamente no le habían pinchado, a Dayanne le daría un ataque si se teñía la preciosa tela de rojo, y ella moriría si tenían que armar todo el vestido de nuevo.

―El corsé debe de ser más apretado. ―puntualizó

Mis ojos se abrieron como platos.

Si lo hacen más apretado y no hay duda de que reventaré como un globo

―Si… ―miré a la diseñadora en busca de ayuda, a lo cual ella solo respondió con un―, es demasiado curvilínea para eso.

Curvilínea.

¿Es enserio?

―Para una persona que solo come aire eso es decir mucho ¿no?

Su madre la vio con reproche, las modistas con aprobación, ese gatito tenía sus garras. Pero Ash ignoro a las tres, su atención estaba centrada en aquella vieja talla 1 para desaparecer, que la miraba pensativa.

―¿Existe esa dieta? ―Ashton abrió los ojos en sorpresa, mientras los demás intentaban contener las risas. Ni siquiera una mordaz indirecta le salía bien.

Sera más tonta esta vieja, toda su comida de seguro se le fue a la cabeza.

―Tienes que dejar de comer carbohidratos Ashton, eso o pasar por el quirófano.

Me gusta comer, ¿es eso un delito?

―No me operare

―Entonces deja de comer.