Te prometo...

Marcando territorio

+21 pero sé que hay menores y les vale jajaja. Después de todo, a veces son gente más instruida y conocedora en estos menesteres. 

Jungkook estaba siendo casi arrastrado por el más bajito, pero jalaba algunas veces pues quería su brazo de vuelta -Jimin suéltame ¿Quién era ese tipo?- 

-No me hables Jungkook- se sentía realmente molesto y no iba a hablar y resolver las cosas en la calle. 

Caminaron las cinco calles a una velocidad impresionante, hasta la gente se les quedaba viendo por cómo iban, pero poco y nada le importaba a Jimin y Jungkook no parecía prestar atención a lo que pasaba a su alrededor. 

Al llegar al edificio saludó con un movimiento de cabeza al hombre de la puerta y se adentraron al elevador. Llegando al departamento al fin lo soltó para meter sus llaves y abrir. Cuando ambos estuvieron dentro Jimin lo tomó del cuello para tenerlo más a su altura y estampó sus labios con los del contrario con deseo y sed, con enojo y desesperación adentrando su lengua y pasándola por toda la cavidad comenzando luego a danzar con la de Jungkook. Luego, vinieron las mordidas, primero del labio inferior y luego en el cuello dejando violáceas marcas mientras Jungkook se dejaba hacer sin poner resistencia. 

Las manitas del mayor comenzaron a desabotonarle la camisa y al fin pudo admirar lo que tanto había deseado. Jungkook era poseedor de unos maravillosos pectorales, fuertes brazos y un abdomen totalmente esculpido cual escultura renacentista. Se dedicó un momento a delinearlo usando sus manos y su lengua elevando la excitación en ambos y Jungkook no esperó para deshacerse también de la camisa de su jefe. 

-Vamos a la habitación, quiero que me folles ahí- le dijo Jimin sensualmente al oído y luego lo besó de una forma intensa como la anterior, sintiendo la necesidad de saltar y pasar sus piernas por detrás de su cintura y que se lo llevara cargando de esa forma. Se adentraron al departamento cruzando la sala y el pasillo hasta llegar a la habitación siendo depositado en la mullida cama. 

Jungkook se posicionó entre sus piernas y empezó a restregarse y simular estocadas aún con las prendas inferiores puestas, su respiración se notaba ya agitada y Jimin dejaba escapar algunos sexys gemidos mientras seguía tocando cada que podía el firme torso de su menor -Sí le diré lo del gimnasio, eso es seguro- 

No pasó mucho tiempo hasta que ambos quedaron completamente desnudos sobre la cama -Ahora no tenías puesta la joya... ¿tienes lubricante?- le urgía lo trajera para poderlo comenzar a preparar y adentrarse en él. 

-Sí- deseaba volverlo a sentir entre sus piernas, pero primero quería hacer otra cosa -Pero espera- dijo escuetamente y se puso en pie para ir a buscar en su armario un pote de lubricante y dos corbatas -Esta vez deseo jugar un poco. Permíteme tus manos- 

-No pensé que tuvieras esta clase de fetiches Jimin... eres una persona muy interesante- comentó con una sonrisa de lado y se dejó atar de pies y manos que colocó también atadas a la cabecera de la cama. 

Jimin sonrió complacido pero cambió su rostro a uno de molestia cuando se trepó en él y se empezó a frotar en su erección mientras lo volvía a besar apasionadamente pero también con furia ante lo que Jungkook dejó escapar unos quejidos. 

-¿Qué? ¿Te dolió?- se separó y comenzó a bajar su lengua por su cuello, clavículas, pecho y ahí se detuvo y dio un mordisco -Nunca...- mordida -En tu vida...- mordida -vuelvas a hacerme...- mordida -Una escena...- 

-¡Ahhh! No me muerdas- el pelinegro se quejaba cada que el otro apretaba con sus dientes su piel, sorprendiéndose del por qué lo hacía y el mensaje que le había dado -¿Y quién era ese tipo?- 

Lo miró con el entrecejo fruncido -¡Un vecino. Lo acababa de conocer y ahora seguro piensa mil cosas sobre nosotros por la tremenda escenita que montaste!- 

-Pues que piense lo que sea. ¡Eres mío!- dijo ante lo que ambos se miraron incrédulos y Jimin volvió a atacar su boca pero ahora con agrado mientras sonreía. 

Se separó de nuevo y bajó a su entrepierna -Yo también quiero que tú seas solamente mío- Adentró su falo en su boca para comenzar con el oral que sabía a Jungkook lo volvía loco, pero esta vez, aunque él también disfrutaba cuando se venía en su boca, cuando estuvo a punto de hacerlo, dejó de darle placer. 

-¡Qué! ¿Pero por qué? Ya estaba a punto- reclamó al risueño peli-gris. 

-No voy a dejar que te corras. No al menos hasta no quedar satisfecho con mi castigo ante tu afrenta. Prepárate Jungkook- dijo y fue hacia el baño de donde trajo el pene de goma y lo mostró -Mira quién me va a satisfacer el día de hoy- 

-No te atrevas Park- retó removiéndose en la cama y tratando de soltarse para impedirlo pero sin éxito. 

Jimin tomó el lubricante, untó sus deditos en este, se subió a la cama dando la vista de su hermoso trasero a Jungkook y comenzó a adentrarlos en sí mismo dando ligeros gemiditos -Oh sí, se siente bien- 

-Jimin, de verdad no sigas. Desátame y deja que yo lo haga, sabes que esa cosa no te dará más placer que yo- 

Era totalmente cierto. Aquel artilugio no lo satisfacía como la grande y ancha polla de Jungkook, pero no cedería, no aún. Una vez que su entrada estuvo lubricada y expandida un poco, tomó el juguete y comenzó a introducirlo en él y hacer algunos ruiditos satisfactorios para acompañar la acción aunque no fueran del todo reales sino un poco fingidos. 

Jeon se seguía removiendo en la cama tratando de soltarse y evitar Jimin siguiera haciendo eso, no soportaba ver que se estuviera dando placer de esa forma, teniéndolo a él ahí y al fin lo logró; el nudo en sus muñecas cedió y rápidamente se deshizo del de sus piernas. Jimin que ya se había dado cuenta, sabía lo que le esperaba y no podía estar más anhelante de recibirlo. 

Jungkook tiró de la mano del chico y junto con esta sacó el pene de goma de su entrada, arrojándolo fuera de su alcance. Se  puso de rodillas y alineó su ya goteante erección con el orificio que pedía ser llenado, sin decir nada se adentró, sacándole un verdadero gemido a Jimin -Ah, sí, por favor, fóllame duro. Necesito de ti- 

Y como si sus deseos fueran órdenes, comenzó a salir y adentrarse rítmica, constante, pero sobre todo, fuertemente deshaciéndose ambos en sonidos que delataban sus ímpetus hacia el contrario.

Salió de él y lo jaló hacia la orilla de la cama subiendo una de sus hermosas y torneadas piernas a su hombro y volvió a penetrarlo -Ahhh... ahhh, f..k- 

-Desde la mañana tenía deseos de escucharte decir esas palabras. Suenas tan sexy que me excitas aún más- confesó 

-Así que te gusta el porno y escuchar esa clase de palabras. Ya ves, tenemos nuestros fetiches- volvió a gritar de placer al sentir una nueva estocada ante el cambio de posición donde ahora eran las dos piernas las que reposaban en los hombros del más alto. 

-Siii, siii, ah, yes, yes, aaaaahhhh- ya no sabía en qué idioma gritar, se sentía increíble como se lo estaba cogiendo con tal intensidad y además, era la primera vez que sentía el miembro de alguien sin látex de por medio -Ah, f.ck... no te pusiste... un maldito condón... ahhhh-

Jungkook iba a decir algo al respecto, pero ya no aguantaba más, las paredes de Jimin se contrajeron en ese momento y él expulsó todo su semen en su interior. Salió del chico y se tiró a su lado mientras un hilo blanquecino escurría del cuerpo del mayor hacia las sábanas. 

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Ahí está su capítulo largo con harta puerquedad jajaja. Que lo disfruten.