Pasado presente

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*Más puerquedad *

Jungkook abrazó a Jimin por el pecho y aspiró cerca de su cuello -Me gusta cómo hueles... todo tú me gustas, eres hermoso- 

El mayor sintió un escalofrío ante su acción y sus palabras. Sonrió sin saber qué acotar al respecto, solo un -Gracias- y aunque el otro quizá esperaba algo más, no le pareció mala respuesta. 

Después de unos tres minutos de recuperar fuerzas, Jimin fue el primero en moverse y ponerse en pie -Me voy a dar un baño ¿vienes o esperas a que salga?- dijo juntando lo poco de su ropa que quedaba en el suelo para ponerlo en el cesto. 

-Voy contigo. Así ahorramos agua y podemos tener otra ronda- se apresuró a ponerse en pie y abrazarlo por la espalda sincronizando sus pasos hacia el baño y tal como había previsto, su miembro y el del otro chico volvieron a despertar. 

-Me parece perfecto, yo también me quedé con ganas de más- dijo caminando junto con él, pero al entrar al baño lo primero que hizo fue buscar en las puertitas de su espejo-botiquín los condones -esta vez sí ponte uno- 

Jungkook asintió, bajó la tapa de inodoro y se sentó para ponerse la protección. Una vez puesta, Jimin no tardó en sentarse en él, tomarlo por los hombros y auto-penetrarse impulsando una y otra vez sus piernas arriba y abajo dando a Jeon una agradable vista de su rostro perlado y expresiones de placer que su polla entrando y saliendo de su cuerpo, le brindaban. 

Se puso de pie con Jimin aún empalado y lo subió al lavamanos para ahora ser él quien controlara las estocadas que dieran placer al chico y a sí mismo porque estar dentro de él, era un deleite para Jungkook -Ah si Jimin, me tomas tan bien, oh, si, vuelve a apretar así...- le decía mientras el otro contraía y aflojaba sus paredes al compás de sus penetraciones. 

Era tan erótico, tan lascivo, tan hermoso ver sus ojos cerrados y su boca en una perfecta o acallando sus gemidos que el pelinegro pensó que se podría volver adicto a ese perfecto rostro, tentador cuerpo y personalidad excitante.  

Unas cuantas penetraciones más se necesitaron para que ambos exploraran en su clímax de nueva cuenta -Jungkook, me encantas- le dijo al fin complementando sus pobres palabras anteriores. 

Entraron ambos a la regadera para tomar un baño de forma normal (o eso pensaban) y Jungkook supo por fin cuál era ese delicioso olor que emanaba de su cuerpo -Ah, conque gel de ducha olor a durazno y miel- el otro asintió y se dejó enjabonar la espalda y los glúteos excitándose de nueva cuenta y su menor al percatarse atinó a masturbarlo así como Jimin hizo lo mismo con él para liberarse rápidamente. 

*Fin de la puerquedad*

Al finalizar, los dos habían quedado nuevamente limpios y frescos, se vistieron y Jungkook tomó sus cosas para retirarse a su departamento -Ahora sí, nos vemos mañana Jimin-sii- y se marchó. El peli-plateado solamente necesitó unos minutos para caer rendido en su cama debido al agotamiento que tres venidas le dejaron, había sido increíble. 

Cuando llegó a su casa también fue vencido por el sueño y la pesadilla no tardó en llegar.  Jungkook vio frente a él al niño -Te prometo que volveré por ti- lo abrazó y desapareció por la rendija de la pared. Al quedarse solo, miró las grandes cajas, el techo alto y abovedado. De pronto escuchó una puerta abrirse y a un hombre llamado -Hey ustedes, mocosos, vengan a comer-. Jungkook se dio cuenta que estaba caminando hacia donde había llamado ese señor a quien no pudo reconocer su rostro, pero sostenía una bandeja con dos platos que dejó sobre una caja a su lado -¿Y el otro niño?- preguntó. Él respondió elevando sus hombros -Se fue-y en ese momento despertó sobresaltado.  

-¡Esto no es un sueño!... ¡esto es un recuerdo!- al fin cayó en cuenta pues siempre había pensado en que era de esos sueños con mensaje o que tu inconsciente te manda para avisarte de algo pues nunca habían continuado, nunca habían sido tan lúcidos como a partir del día anterior que se había quedado con Jimin. Miró su reloj, eran las cuatro de la mañana y no creía poder volver a quedarse dormido así que se puso a pensar en lo que acababa de ver en sus sueños -¿Quién era ese hombre? ¿Por qué estaría llevando comida a ambos y en una bodega? Seguramente no queremos estar ahí, por eso el otro niño se fue y promete que volverá por mí ¡Estamos cautivos!- Esto lo tendría que hablar con sus padres tan pronto pudiera, pero no tenía idea de que algo así le hubiera ocurrido, quizá estaba pensando de más y sí se trataba solo de un mal sueño. 

Llegó a su oficina poco antes de su hora como de costumbre y también ya estaba ahí Jimin quien lo saludó con una sonrisa -Hola Jungkook- se acercó a él -Oye, qué cara traes, pensé que tú también habrías descansado bien después de todo el ejercicio de la tarde- trató de bromear, pero el semblante del chico no parecía mejorar -¿Estás bien?-. Jeon asintió sin mucho ánimo -Sí, solo que... no, nada. Iré a mi oficina... por cierto, quería decirte... decirle... que mientras estemos en áreas comunes en el trabajo deberíamos mantener nuestro trato como jefe-empleado, creo que es lo mejor- 

Jimin frunció un poco el entrecejo y lo dejó ir, pero sintió un malestar en su pecho y aunque Jungkook tenía razón en tener un trato formal en la oficina, no le había gustado que él pusiera esa distancia. Fue a su oficina y elevó sus brazos hacia atrás para estirar su cuerpo y poder ponerse a trabajar. 

A media tarde, poco antes de la hora de la comida, Jisso llamó por el intercomunicador -Señor Park, tiene una llamada telefónica de Lee Seung-Hyun CEO de Sycom Security-. Jimin confirmó que recibiría la llamada así que los enlazó de inmediato -Lee-nim buenas tardes ¿A qué debo su llamada?- 

-Buenas tardes Ji... Jimin- había estado a punto de usar su otro nombre pero se percató a tiempo -Tal como me dijiste, te llamo pues he descubierto un dato que creo podría serte de utilidad con respecto al anterior dueño del predio donde hoy está mi empresa. Sabes que es una información delicada que debe ser solo vista por ti así que sería importante me pudieras proporcionar tu correo electrónico y teléfono personal vía e-mail- dijo Lee-nim poniendo en alerta a Jimin sobre que quizá las cosas que hablaba con cualquier otra persona en la oficina no eran tan privadas y en un momento dado, pudieran ser escuchados por Jisso, algo de lo que no había caído en cuenta y estaría más pendiente. 

-Por supuesto Lee-nim, le haré llegar esos datos en un momento...- tecleó en su computadora rápidamente y envió el correo -listo, ya deben haber llegado. Muchas gracias por su apoyo- 

-No hay de qué. Recuerda que eres como de la familia. Por cierto, me gustaría invitarte a cenar esta noche con mi padre... Aún no le he comentado nada sobre que nos vimos, pero quizá, solo si estás de acuerdo, podríamos hacerlo partícipe- 

Jimin pensó en las palabras de su padre sobre que los Lee eran personas de fiar así que aceptó la invitación y en ese momento, su celular notificó la llegada del mensaje con la información que Lee-nim le había enviado a su correo personal. 

-Nos vemos en la noche, te envié también la dirección, cualquier duda, la discutimos allá. Ten una buena tarde- se despidió. 

Park leyó la información, era un artículo de un periódico y un video -El famoso líder del Cártel del Dragón, Kwon Chung-Ni fue aprehendido el día de hoy en una de sus tantas bodegas donde almacenaba mercancía clandestina y fue condenado a cadena perpetúa en la prisión de máxima seguridad debido a la gravedad de sus delitos que incluyen tráfico de drogas, armas y... secuestro... de menores...y asesinatos- sintió como si su corazón se detuviera por un momento y después abrió el video donde claramente se podía ver la cara de aquel maldito quien sonreía ante las cámaras sin ningún remordimiento acerca de sus actos. Jimin quitó ese video de inmediato, si era capaz de todo eso -quizá ese niño no esté con vida- 

Alguien tocó a su puerta y al recibir la invitación Jungkook entró a la oficina de Park -¿No va a salir a comer hoy?- no era que él tuviera mucha hambre, no había podido recuperar bien su ánimo pero quizá si estaba con él mejorara, sin embargo -¿Sucede algo?- Cerró la puerta y se adentró -¿Qué tienes Jimin?- 



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