33. Castigó justo. (borrador).

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-¡¿Que?! ¡De ninguna manera pienso disculparme! -De nuevo, la expresión de furia de Kosair se hizo presente y Sovieshu se tocó la frente con los dedos. Ese hombre lo sacaba de quicio.

-Ya sabes porque lo digo. Ella está en cinta. -Kosair se molestó más y poco estuvo de intentar darle un puñetazo al peli-negro. Navier le tomó el brazo al ver sus intenciones y los guardias se pusieron alerta. Todos ya sabían el mal humor que el tenía, pero ni Sovieshu se inmutó.

-¡Esta en cinta y aún así te fuerzas a que le pida perdón a esa...! -Sovieshu de inmediato puso una mirada que Navier conocía muy bien. Sabia que estaría tomando una decisión muy apresurada si ella no intervenía.

-Creo que ambos están tomando un camino un poco acelerado. -Ambos hombres fijaron su atención en la rubia, quien seguía con esa aparente serenidad. -Kosair, el haber intentado lastimar a Briddget esta muy mal, ella está esperando un hijo del emperador y, querramos o no, será su primogénito a pesar de no tener jamás el título de príncipe. -un golpe en el pecho se sintió por parte de Sovieshu. Navier estaba molesta con el y no se molestaba en ocultarlo. -Tambien debemos aclarar que la mujer a la que atacaste ayer no era Briddget, era Rashta. La ex amante del emperador.

Kosair de inmediato cambio su expresión. Aún así, eso no cambiaba el hecho de que ella si había sido amante de Sovieshu y poco o nada cambiaba su pensamiento respecto a ella. Ella parecía un angel pero era el mismo demonio.

-¿Entonces que importa quién sea quien? Eres despreciable, mi hermana da todo por el imperio y mientras tú...

Sovieshu finalmente había explotado. Le propinó un puñetazo al que Kosair de inmediato reaccionó. La emperatriz fue enviada hacia atrás por los caballeros, mientras los guardias recibieron algunos puñetazos por parte de ambos mientras estaban separándolos. No costó mucho por parte de Sovieshu, pero Kosair parecía estar hecho una fiera. Lo detestaba, pero el peli-negro sabía que debía mantener la compostura. También sabía que no tenía probabilidades de ganar contra el, así que eso influyo mucho.

Kosair aún intentaba acercarse a Sovieshu, y Navier intentó tranquilizarlo. Su hermana era una de las pocas personas por las que Kosair si obedecía.

-Kosair. -Sabia que hablar con el lo enfurecia más, pero con Navier frente a él, no intentaría lanzarse a menos que quisiera lastimar a su hermana en el proceso. -Rashta si fue traída aquí con el propósito se ser una amante. Pero ella se opuso por la misma razón que tu: Navier. Si,fue presentada como mi amante oficialmente, pero jamás tuvimos algún tipo de acercamiento. Y creo que también se debe a que ella esta enamorada del príncipe Heinley, del reino de Occidente. -Kosair de inmediato dejó su rostro hecho una furia, para pasar a la confusión. -Heinley y Rashta se conocieron en el palacio y, al parecer tuvieron ciertos encuentros. Rashta está embarazada si, pero no es mío porque no existe posibilidad de que sea mío porque jamás permito que la tocara. Ella incluso fue dama de compañía de tu hermana por un muy corto tiempo, hasta que incluso tu hermana pensara que el bebé que ella esperaba era mío.

-¡E-Estas mintiendo! -Kosair podía aceptar muchas cosas, pero que había lastimado a alguien inocente no sería una de ellas.

-¿Porque tendría la necesidad de mentir? No seré castigado por tener amantes, así que no tendría porque mentir respecto a que el bebé de Rashta es mío, pero no lo es. El hijo es del príncipe Heinley, tu hermana los descubrió incluso juntos ya dos noches. Al inicio, Heinley pareció negarlo, pero ahora incluso será su futura esposa.

El rubio palidecio ante sus palabras y giró su cara en torno a su hermana, buscando algún rastro de que su esposo estuviera mintiendo ya que el la conocía mejor que nadie. Pero su semblante siempre pareció estar serio, y finalmente los guardias lo soltaron cuando el parecía haberse calmado.

La nueva Rashta (la emperatriz divorciada).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora