–¿De verdad no nos vas a decir qué pinches vergas te dijo el pajarraco?–Le preguntó mientras conducía su taxi, y tú ibas en tu asiento que compraron el día anterior en la parte de atrás del coche.
–Ya les dije. A Khonshu no le gustó la idea de que tuviéramos una bebé por las misiones y todo lo que les he mencionado ya anteriormente.–Le dijo desde el reflejo de la ventana junto a él.
–¿Y estás seguro de que fue solo eso? Porque de no ser así, ¿para qué la necesidad de bloquearnos?–Preguntó desde el reflejo del espejo retrovisor.
–Eso, ¿pa' qué lo ocultas? A no ser que sea que el muy hijo 'e su puta madre le quiera hacer algo mi mini dama.–Dijo mientras aparcaba el coche en uno de los estacionamientos del hospital.
–Deja de hablar así frente a ella. No quiero que su primera palabra sea alguna grocería que escuche de ti.
–Tengo las cosas bajo control, ¿si? Nadie le va a hacer nada a T/N.
(.....)
Jake ya estaba contigo dentro de la oficina de la pediatra.
Ya te había examinado, te había pesado, y en general se había asegurado de que todo estaba en orden.
–Muy bien. Todo está muy bien con su hija, Señor Lockley. Lo único que me queda por preguntarle es, ¿le gustaría que perforaramos sus orejas?–Le preguntó con una sonrisa, acomodando su estetoscopio alrededor de su cuello, mientras tú estabas en la camilla recostada.
–¿Se refiere a ponerle aros?
–Así es. A los bebés se los ponen generalmente cuando están pequeños para que sea más fácil. Y viéndola ahora, su madre no lo hizo antes. Pero no hay ningún problema con perforar sus orejas en este momento.–Le explicó con la misma sonrisa, mientras tú tomabas el dedo índice de Jake y te lo llevabas a la boca.
–Dile que si. Se va a ver hermosa.
–Ah... bueno, si, si. Está bien. Hágalo.–Le dijo volteando la vista hacia ti y luego a la doctora.
–Perfecto. Solo déjeme buscar las cosas.
La pediatra buscó las cosas que necesitaba y se acercó a Jake que se había sentado en la camilla contigo en sus brazos para que fuera más fácil.
Le hizo escoger a Jake unos pendientes para ti, y los tres se decidieron por unas pequeñas medias lunas.
–Muy bien, sujetela. Va a ser muy rápido.–Dijo antes de perforar tu oreja.
Una vez lo hizo, comenzaste a llorar en los brazos de Jake.
–¡TENGA CUIDADO CON MI PRINCESA!–Exclamó tomándote en sus brazos.
–Lo sé, tranquilo. Es normal que llore. Pero ya se le va a pasar.–Le dijo con toda la tranquilidad del mundo, estirando los brazos para acercarse a ti y perforar tu otra oreja, pero Jake se hizo un poco más atrás para alejarla de ti.
–¡LE DIGO QUE LE DUELE! No se atreva a poner sus manos en mi hija. Ya basta.
–Va a ser muy rápido, Señor Lockley. Es solo un pequeño pinchazo y ya.
–Jake ya déjala hacer su trabajo.
–Perdóname, mi pobre princesa...
Jake se seguía negando, así que Marc forzó un cambio y volvió a acomodarte para que la doctora perforara tu otra oreja.
–Listo. Que sea rápido, por favor.–Dijo con expresión y voz seria, como si el escándalo anterior no hubiese pasado.
La pediatra le quedó viendo confundida ante el gran cambio en su actitud que había tenido de un momento a otro.
–¿Qué está esperando? Haga el otro orificio para llevármela de aquí.
–C-claro, lo siento...–Se acercó y puso el otro aro lo más rápido que pudo, para después alejarse y quitarse los guantes.–Ya está lista. Pueden irse.
–Gracias.–Marc tomó tu bolso y te volvió a meter en la mochila que se ponía en el pecho, para luego salir de allí contigo tomada de su dedo índice sin soltarlo, mientras la doctora le veía confundida.–¿Ven que no fue para tanto?
–Claro, como no fue a ti que te insertaron una aguja en la pinche oreja, cabrón.
—————
Marc estaba medio recostado, medio sentado en la cama con su laptop en su regazo, terminando de escribir unos informes de su trabajo. Mientras te tenía a ti tapada con tu manta en su pecho, durmiendo y dejando su playera ligeramente con saliva.
En un momento te moviste, haciendo un pequeño ruido de molestia.
–Sh, sh, sh... tranquila...–Susurró acariciando tú espalda y acomodando la manta, para luego seguir con su trabajo.
En un momento sintió una brisa junto a él, para después ver a Khonshu acercarse y sentarse en los pies de la cama, pero Marc seguía con lo suyo.
–¿Qué parte de "deshacerse de la mocosa" fue la que no entendiste, gusano?–Le preguntó con voz molesta.
–La parte en que me deshago de ella. Te dije que no la iba a dejar.–Le respondió sin dejar de ver a la pantalla de su laptop mientras escribía.
–Entonces no me queda otra opción más que—
–Más que aceptar el hecho de que la pequeña se queda.–Levantó la vista hacia el dios ante él con el ceño fruncido, dejando su mano en tú espalda con cuidado.–No vas a arrebatarnos a T/N, Khonshu. Por más que lo intentes, ella no se va a mover de nuestro lado porque es nuestra hija. Te guste, o no. No es tu decisión.
Khonshu soltó un gruñido molesto, y luego desapareció haciendo que te despertaras a propósito y comenzaras a llorar.
–Ya, linda, tranquila... ya se fue.–Se levantó y comenzó a pasearse contigo alrededor de la pequeña habitación.–Te dije que no iba a hacerte nada.
Jake y Steven simplemente observaban desde el espejo sin que Marc se diera cuenta, y sin tampoco decir nada para no estropear el tierno momento entre ustedes dos.
Hola gente! Paso por aquí porque quería preguntarles qué les gustaría que pasara en el siguiente capítulo mientras tn aún es una bebé. Tal vez alguna situación que les gustaría leer, o no sé. Déjenmelo aquí en los comentarios 😁❤️
También mil gracias por el apoyo que le están dando a éste libro, y me alegra muchísimo que les esté gustando tanto como a mi 💖
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Una pequeña Luna (Moon boys x hija)
FanfictionUna noche, Steven llega tarde del museo y ve una caja fuera de la puerta de su edificio con una bebé dentro junto con una carta. Marc insiste en dejarla en un hospital, y Jake que se hagan cargo. ¿Podrán tres hombres, conviviendo en un mismo cuerpo...