Una pequeña Luna (Moon boys x hija)

Día de limpieza con sorpresas

Gente tengo la sensación de que éste capítulo les va a encantar por las grandes noticias que se vienen, algo que muchos llevamos esperando bastante tiempo, pero que aún no había sucedido 🤭💖

Marc había tenido que ir a su trabajo temprano por lo que te quedaste sola en casa, y aprovechaste de que los chicos no estaban para limpiar un poco con la música al máximo.

–Aún no entiendo cómo es que no te haz quedado sorda, bestia.–Dijo Khonshu mientras levantaba el sillón y tú pasabas la aspiradora.

–La vida es una, viejo pajarraco cascarrabias.–Le respondiste mientras la música sonaba fuerte en todo el departamento.

Apagaste la aspiradora y fuiste a la habitación para buscar la ropa de Jake tirada en el piso y juntarla para más tarde bajarla y lavarla al sótano donde estaban las lavadoras cuando llegaran los chicos y así te acompañaran.

Recolectaste toda la ropa sucia y dejaste el canasto en la cama de los chicos, mientras comenzabas a revisar los bolsillos y sacar los papeles.

Tomaste un pantalón de Marc y metiste tu mano al bolsillo donde esperabas tal vez encontrar aunque fuera un par de monedas como propina por tus servicios de limpieza, pero en lugar de eso, encontraste una pequeña caja.

–¿Pero qué verga...?–Murmuraste sacándola y dejando el pantalón a un lado para examinarla.

–Se nota que eres una Lockley...–Se quejó el otro donde estaba recostado en la cama.

Mientras tanto, abriste la caja y viste un hermoso y sencillo anillo con tres piedras pequeñas en él, y soltaste un gran sonido de sorpresa.

–¡A LA VERGA NO MAMES!–Exclamaste provocando que Khonshu diera un salto.

–¡Por todos los dioses! ¡¿Ahora qué diablos te pasa, mocosa escandalosa?!

–¡Es un... es un... ES UN PINCHE ANILLO!–Gritaste emocionada saltando con el objeto en tus manos.

–¡Hija ya llegué!–Escuchaste a Marc decir desde la puerta.

Corriste hacia él, casi tropezándote en el proceso y apagaste la música de tu teléfono.

–¡T/N ten cuidado!–Exclamó acercándose para intentar sujetarte antes de que cayeras, equilibrando las cajas de pizza en su mano.

–¡Ustedes tres me tienen que dar una muy buena explicación para lo que me acabo de encontrar!

–¿Disculpa? ¿Y qué se supone que fue lo que encontraste?–Te preguntó riendo ligeramente, llevando las cajas a la cocina mientras tú le seguías de cerca.

–Esto.–Dijiste provocando que se volteara hacia ti, y casi se le salieran los ojos al ver que tenías la pequeña caja con el anillo en tus manos.

–Verga.

–¡¿Cómo fue que lo encontró?! ¡Marc dijiste que lo habías escondido!

Marc inhaló profundamente y se volteó a ver a los chicos en la ventana, para después volver a ti y tomar la caja y guardarla en su bolsillo.

–Mira éste cabrón si no será más pendejo. Así mismo es como la chamaca te encontró el anillo, cara de verga. Seguramente te lo dejaste en el bolsillo. ¿No serás tu el hombre más inteligente del mundo? Pinche culero.

–Jake solo cierra la boca.–Dijo viendo a su reflejo y después a ti que estabas de brazos cruzados.–Okey, bien, si... nosotros—

–¿Le van a pedir matrimonio a mi mamá?

–Y-yo... ¿t-tal vez? Puede ser... ¿qué piensas acerca de—

–¡¡¡SIIIIIIIII!!! ¡AL FIN SE VAN A CASAR! ¡TE LO DIJE!–Exclamaste señalando a Khonshu, mientras comenzabas a saltar y bailar de ma emoción.

–La bestia es toda suya.–Suspiró agotado antes de desaparecer.

–¡Yo sabía! ¡Yo sabía! ¡Yo sabía!–Te acercaste para abrazarlo con fuerza mientras él seguía confundido.

–Ah pues mira parece que la idea le gusta.

–Al parecer si... pero ya enserio Marc, empieza a sacar las cosas de tus bolsillos.

–¿Entonces no estás molesta? ¿Si te agrada la idea?–Te preguntó abrazándote de vuelta.

–¡¿Bromeas?! ¡Es la mejor idea que han tenido en toda su vida! Quiero decir... llevan AÑOS saliendo y aún no se casan, ni si quiera viven juntos. ¡Ya era tiempo!–Le dijiste alejándote un poco para verle a la cara con una gran sonrisa.–¿Y hace cuanto que tienen el anillo?

–¿Un poco más de tres semanas?–Te dijo algo inseguro mientras te veía sacar unos platos y él llevaba las pizzas a la mesa.

–¡¿TRES SEMANAS?! ¡¿Y por qué aún no le han hecho la pregunta?!–Exclamaste dejando las cosas en la mesa, para después traer unos vasos y gaseosa.

–Porque queríamos hablar contigo primero... queríamos saber qué pensabas al respecto, pero ya veo que estás de acuerdo con que nos casemos con tu mamá.–Rió sirviendo un trozo en tu plato y luego en el suyo para sentarse en su lugar.

–¡Claro que estoy de acuerdo! ¡¿Cómo no?! ¡Ustedes son mis papás! Lo único que quiero es que estén con mi mamá y que se casen y verlos juntos y que vivamos juntos y estemos los cinco como una familia y etcétera.–Le dijiste emocionada, sentándote en tu silla para darle un mordisco a tu trozo de pizza.

–Habíamos pensado en invitarla a cenar un día a su lugar favorito... ya sabes que tu abuelo viene la próxima semana y pensamos que podríamos salir un día por la noche y tu te quedas con él. Tampoco queremos presionarla y queremos que sea algo especial.

Layla y yo ya estuvimos casados pero terminó mal, tu lo sabes. Y ésta vez no quiero arruinar las cosas.–Te dijo bajando la vista hacia sus manos que sostenían la pizza.

–Las cosas salieron mal antes porque mi mamá no sabía de mi papá Steven, y ustedes dos se enteraron de la existencia de mi papá Jake al mismo tiempo que ella. Pero ahora mi mamá sabe de los tres, y los ama por igual. Estoy segura de que va a decir que si.–Le dijiste con una sonrisa.

–Gracias hija, por apoyarnos a los tres siempre.–Te dijo con una sonrisa.

–Sí, si, lo único que espero es que de verdad lo hagan pronto. Y como mínimo que me dejen ser la dama de honor.–Le dijiste dándole un mordisco a tu trozo de pizza, haciéndole reír mientras bebía de su vaso.