26: Lo estoy perdiendo

695 164 16
                                    

El rubio abrió los ojos con dificultad, soltando un pequeño quejido porque su compañero había interrumpido su sueño. Se restregó ambos ojos sintiendo a Jungkook removerse a su lado.

—Jungkook, deja de moverte tanto —se quejó en voz baja.

Estiró su mano, alcanzando su celular en la mesita de noche. Cerró los ojos con fuerza cuando la luz de la pantalla incidió de forma directa en su rostro, y suspiró al ver que solo eran las 4:57 de la madrugada. Se puso de pie, aún medio dormido caminando con los ojos entrecerrados al baño, dispuesto a descargar su vejiga. Luego de haberse lavado las manos salió y regresó a la cama, todo ello sin detenerse a mirar a su novio.

Cerró sus ojos queriendo volver a dormir pero un quejido que salió de los labios del pelirrojo lo hizo alertarse. Encendió la luz de forma rápida viendo a Jungkook removerse incómodo en la cama, respiraba un poco agitado y estaba todo sudoroso.

—Jungkook— puso ambas manos en sus mejillas comprobando lo que sospechaba, Jeon tenía mucha fiebre —Jungkookie despierta

Lo zarandeó un poco haciendo que el menor medio abriera los ojos, tenía el cabello pegado a su frente debido al sudor y los ojos perlados.

—T-tengo frío —tartamudeó abrazándose a sí mismo.

—Tienes fiebre —comentó con preocupación, buscando un termómetro infrarrojo que días antes había visto en el gabinete del baño—. Mierda...tienes mucha fiebre.

Suspiró mirando el número 39 que salía en la pequeña pantalla, sabía que no había sido buena idea haber salido hasta tan tarde la noche anterior.

—Venga, levántate, te llevaré al hospital —dijo tomándolo del brazo pero el contrario se negó.

—No —balbuceó—, no quiero ir.

—No te pongas terco ahora Jungkook, vamos —insistió, pero el pelirrojo solo le dió la espalda tapándose con la gruesa manta.

El mayor pasó sus manos por su cabello con frustración, sabía que cuando Jungkook decía que no nadie lo haría cambiar de idea. Buscó en una de las gavetas del armario algunos paños limpios y fue a la cocina para mojarlos con agua fría para ver si podía bajarle la fiebre al menor.

.•°•.✿.•°• ✿.•°•.

Frunció el ceño maldiciendo por lo bajo al escuchar su teléfono sonar, Taehyung se removió a su lado, abrazando su cintura y acomodando su cara en el espacio de su cuello, ambos estaban exahustos luego de haber hecho el amor muchas veces horas antes.

—¿Quién carajos llama a las seis de la mañana? —se quejó, haciendo que su novio se despertara y lo mirara con mala cara por decir palabrotas.

—Solo contesta —murmuró cerrando los ojos nuevamente.

—Jimin, sabes que si hay algo que odio es que interrumpan mis horas de sueño —reclamó tomando la llamada al ver que era su mejor amigo.

—Yo-Yoongi —la voz temblorosa del menor lo hizo sentarse de golpe en la cama—, Ju-Jungkook tiene mu-mucha fiebre —escuchó un ligero sollozo y como sorbía su nariz—. Le di una pa-pastilla pero sigue sin bajar, ya no se que hacer.

Rompió en llanto, haciendo que Yoongi se pusiera de pie de forma rápida alejándose de la cama.

—Jimin, cálmate por favor —pidió intentando tranquilizar al menor.

—¡Él ni siquiera despierta!

—Jimin, necesito que estés tranquilo ¿sí? En unos minutos salgo para allá —colgó, corriendo a ponerse algo de ropa y tomar un bolso para echar algunas cosas que necesitaría.

—¿Sucedió algo con Jungkook? —Taehyung estuvo a su lado al instante mirándolo con preocupación.

—Al parecer tiene mucha fiebre.

—¡Voy contigo! —avisó yendo a cambiarse de ropa rápidamente.

Fue cuestión de media hora que ambos llegaran al apartamento del pelirrojo menor. Los recibió un Jimin con los ojos rojos e hinchados, que solo llevaba una sudadera de Jungkook y unos shorts. El rubio sin detenerse ni a saludarlos tomó la mano de Yoongi arrastrándolo hacia la habitación, donde yacía un Jungkook inconsciente y sudoroso, que no paraba de temblar.

Park intentaba retener los sollozos observando a su mejor amigo examinar a su novio, Taehyung solo miraba comiéndose las uñas debido a la preocupación.

—Tae por favor, saca a Jimin de aquí e intenta calmarlo —el rubio negó al instante pero al ver la mirada que le daba Min desistió.

Tae lo sacó de la habitación llevándolo al comedor para que se sentara en una silla y lograra relajarse aunque sea un poco. Le buscó un vaso con agua y se sentó a su lado. Si bien no eran muy amigos que digamos, comprendía por lo que estaba pasando Jimin. El también estaba preocupado, después de todo Jungkook era su mejor amigo, aunque ahora que lo pensaba se sentía un poco culpable ya que desde que Jeon está con el rubio y él con Yoongi han estado algo distantes.

Los sollozos de Park lo hicieron dejar de lado sus pensamientos, las lágrimas corrían por sus mejillas como si no tuvieran fin, la imagen frente a él daba lástima, Jimin sollozaba con tanto dolor que hasta él mismo comenzó a llorar.

—Jimin necesitas ser fuerte —pasó una mano por su espalda de arriba a abajo intentando consolarlo.

—E-Es que no e-entiendes po-por lo que estoy pa-pasando —dijo entre hipidos—, cada vez e-está peor.

Tapó su rostro con ambas manos negando con la cabeza una y otra vez, le dolía tanto ver a la persona que amaba en esa situación, más sabiendo que Jungkook odiaría verlo así y que se sentiría culpable si lo veía llorando.

—Lo estoy...perdiendo Taehyung —sorbió la nariz secando sus lágrimas, lo cual era innecesario ya que nuevas lágrimas volvían a surcar por su rostro—, estoy perdiendo a la persona...que más amo en este mundo.

—¡Oh Jimin! —abrió sus brazos y el rubio no lo pensó dos veces para lanzarse a ellos, sintiendo al pelirrojo sostenerlo con fuerza.

A pesar de que la mayor parte del tiempo se la pasaban discutiendo debido a la tonta rivalidad que tenían para ver a quien prefería Jungkook, ambos sabían que en ese momento solo podían apoyarse el uno al otro y pedir porque la situación del menor no empeorara.

—Ya la fiebre está bajando —la voz de Min los hizo separarse y Jimin en ese momento pudo volver a respirar con tranquilidad.

El mayor pasaba la mano por su frente quitando el sudor, un estetoscopio colgaba de su cuello y por su expresión, parecía que en verdad Jungkook estaba mejorando.

—De seguro despertará en un par de horas —aseguró tomando asiento junto a ellos—. Dejémoslo descansar.

.•°•.✿.•°•.✿.•°•.

Abrió los ojos con lentitud observando la habitación, se sentía algo cansado y su cabeza dolía, con lentitud se levantó de la cama para ir hacia el baño y tomar del gabinete los analgésicos que le había recetado Yoongi. Salió hacia la sala de estar buscando a Jimin, y para su sorpresa no sólo estaba él allí, también estaban Taehyung y Yoongi.

—¡Jungkookie! —el rubio corrió hacia él abrazándolo con fuerza—. ¿Te sientes mejor?

Asintió mirando con una pequeña sonrisa a su novio, acarició sus mejillas mirando los ojitos del mayor algo hinchados, de seguro estuvo llorando por su causa. Se agachó un poco y dejó un par de besitos sobre sus párpados y luego uno un poco más largo sobre sus labios.

—Estoy mucho mejor, Bichito.

—¿Quieres comer algo? ¿Tienes hambre? —preguntó preocupado.

—Sí, comeré cualquier cosa que hagas —dijo sentándose junto a su mejor amigo

—Bien, prepararé algo delicioso para todos.

Una media hora después todos fueron hacia el comedor, elogiando la comida que había hecho el ojiazul ya que estaba extremadamente deliciosa. Y como si nada de lo sucedido con Jungkook hubiera acontecido esa mañana, pasaron el día juntos entre charlas y risas, dejando atrás el mal rato.

10 Wishes - Kookmin #BNAWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora