Parte 11

112 4 0
                                    

Estuvimos en carretera durante 6 horas aproximadamente, hicimos un par de paradas para comer algo o ir al baño de alguna gasolinera, según me había dicho Acacia, la mayoría de sus familiares y amigos cercanos ya se encontraban en el lugar, ellos se encargarían de decorar y recibir a los músicos, al personal que atendería y esas cosas, yo había dormido un rato en la camioneta por lo tanto ahora me encontraba con mucha energía.
La casa en la que nos encontrábamos estaba situada en un pequeño pueblo arbolado y con gente que a simple vista parecía tener demasiada gentileza, era bastante amplia, tenía muchas habitaciones en dónde rápidamente nos instalaron, en cuanto llegue lo primero que hice fue darme una ducha ya que estábamos contra el tiempo, el patio estaba relleno de césped y árboles o plantas de colores brillantes, alrededor estaba decorado de puertas vacías en forma de arcos y junto a la pared había bancas con macetas a los costados.
Mi habitación tenía una cama con sábanas blancas y el respaldo de madera, a lado había un pequeño buró con una lámpara, una libreta y un bolígrafo cerrado, también tenía una alfombra de colores y diseños alegres sobre el piso de madera, había un baño pequeño instalado en la habitación, solo tenía el inodoro, un lavamanos y la regadera con un espacio bastante estrecho, había un juego de toallas sobre un mueble, jabones delgados en empaque, shampoo y cepillos de dientes sin usar, además de la pasta dental y papel higiénico.
Saqué la ropa de mi maleta con cuidado para poder elegir entre los vestidos que había traído de casa, antes de mirarlos detalladamente, le envié un mensaje a mis padres para avisarles que ya había llegado, además de que les envié un vídeo breve sobre la habitación.
Un par de golpes se escucharon del otro lado de la puerta y después esta se abrió con lentitud, mi mejor amiga se asomó por ahí y al ver los vestidos que yo tenía sobre la cama, entró histérica.
Acacia: ¿pero que haces? no usarás esos vestidos.- los señaló con su dedo índice, yo los miré tratando de encontrar el defecto en ellos.- tranquila, son bellísimos y sé que te mirarías increíble con ellos, pero antes de venir compré un par de vestidos para ambas.- hizo un puchero mientras tomaba mis dedos y comenzaba a menearse con ellos.- ven acompáñame, te los mostraré.- alcance a tomar mi celular antes de que ella me arrastrará fuera de la habitación, pude observar que la gente corría por los pasillos tratando de acomodar con rapidez. Entramos a la habitación que le correspondía a mi mejor amiga, estaba del otro lado del pasillo principal, cerró la puerta con el pestillo y después abrió su maleta para sacar unas prendas envueltas en una tela con cierre de color negra.
Acacia: este es para ti.- lo tomó de la punta del gancho y después me lo entregó con ilusión, lo deje sobre la cama para poder abrir el cierre y por fin sacar el vestido. Mis dedos tocaron una tela bastante suave y mis ojos se iluminaron por los brillos de este, tenía un color auténtico, sus tirantes eran finamente delgados y podía ver qué me quedaría a la perfección.
Acacia: bueno, ahora entra al baño y cámbiate, mientras tanto me alistare yo.- asentí tomando el vestido con delicadeza entre mis brazos y dirigiendome al baño de mi mejor amiga.
Rápidamente me deshice de la ropa que llevaba puesta y la dejé doblada sobre el inodoro, el vestido acaricio con sutileza mi piel amoldandose cómodamente a la forma de mi cuerpo.

En cuanto termine de ponermelo salí a la habitación, Acacia se había colocado un vestido de color negro que se ajustaba a su figura, estaba desnudo de la espalda y solo se ataba por un nudo que terminaba en su cintura, me miró a través del espejo ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


En cuanto termine de ponermelo salí a la habitación, Acacia se había colocado un vestido de color negro que se ajustaba a su figura, estaba desnudo de la espalda y solo se ataba por un nudo que terminaba en su cintura, me miró a través del espejo y sonrió entusiasmada.
Acacia: ¡Te ves preciosa!- se levantó del taburete y caminó hacia mí con sus finos tacones, me miraba de pies a cabeza con sus ojos brillantes.- mierda, ese vestido fue diseñado para ti.
Aitana: no digas tonterías.- reí apenada mientras jugaba con el dobladillo del vestido.- quiero dejarme mi cabello así cómo está, solo me agregaré un poco más de fijador para que no se altere a mitad de fiesta.
Acacia: claro, también hay maquillaje aquí, ya no quiero que salgas a tu habitación y te vean con la ropa puesta, quiero que todos se queden impresionados.- sentía que estaba exagerando, pero aún así, me gustaba la forma en la que me hacía sentir.
Ambas continuamos con lo que estábamos haciendo, me coloque labial suave que combinará con los tonos del vestido y después me hice un delineado sencillo, me coloque un poco de rubor y al final Acacia me puso perfume por todas partes.
Aitana: tienes prohibido dejarme sola en la fiesta ¿de acuerdo?, aunque sé que ahí estará Dylan, pero aún así.- ella asintió levantando sus manos en mecanismo de defensa, solo reí.

La noche por fin había llegado, comenzaba a sonar la música y las luces chocaban con la ventana de la habitación, Acacia recién había terminado de arreglarse, me prestó unos tacones del mismo color que el vestido, me conocía perfectamente bien. Le dieron leves golpes a la puerta y mi mejor amiga abrió enseguida, Dylan asomó su cara, vestía con un traje de color azul marino y zapatos negros, su cabello estaba peinado hacia atrás y llevaba puesto su piercing en la ceja.
Dylan: ¡madre mía!- llenó la habitación de aplausos, Acacia modelaba su vestido y yo me encargaba de arreglar mejor mi cabello para que no se pusiera rebelde.- se ven increíblemente bien.- ambas sonreímos en forma de agradecimiento.- también acepto halagos, nenas.
Aitana: te miras muy bien.- sonreí.- creí que ya jamás usarías el piercing.
Acacia: es que quiere impresionarte de una y mil maneras.- se burló y él le hizo un gesto de disgusto.- bueno ya vámonos antes de que nos ganen nuestra mesa.- tomé mi celular del tocador y salí acompañada de mis dos mejores amigos, solo teníamos que entrar por el pasillo y este nos llevaría directamente al espacio en dónde celebrarían a los padres de Acacia.

I'M YOURS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora