I'M YOURS

Parte 45

*Una semana después

Había acudido al médico para que me quitarán la férula, había estado bajo tratamiento desde que me dieron de alta para terminar de desinflamar algunas partes de mi cuerpo, salí del hospital acompañada de mi padre, había pedido permiso en su trabajo para poder traerme mientras que mi madre arreglaba algunas cosas en el restaurante, me abrió la puerta del copiloto y yo subí enseguida dándole las gracias, sentía cierta molestia en la muñeca pero era soportable.
Acacia me había visitado en varias ocasiones y se había quedado a dormir conmigo por un par de días, se culpaba a cada rato por haber cometido ese accidente y me prometía que aprendería a conducir cuánto antes para no repetir la historia y así poderme salvar en cualquier situación de escape, terminabamos viendo películas de romance y ella se quedaba dormida acariciando mi férula.
De Oliver no he sabido nada hasta el momento, ni siquiera Acacia sabe algo de él y eso me preocupa, me encantaría enviarle un sin fin de mensajes para saber si se encuentra bien, sin embargo, no quiero parecer pesada. Muchas veces tomé mi celular y escribí un mensaje de texto que al minuto eliminaba, creí que me visitaría o me llamaría aunque sea después de salir del hospital, pero no lo hizo.
Papá: tengo que entregarle el pago final a Ferrer.- lo miré con curiosidad pero él pareció no notarlo.
Aitana: creí que ya se lo habías pagado todo, papá.- negó enseguida apretando sus labios y girando su brazo sobre el volante.
Papá: le pagué el 80% solamente para que Priscila ya se instalará ahí, él me dió tiempo para pagar la cantidad restante, aunque aún tengo que pagar la cuenta del hospital que él pagó.- suspiró.- te llevaré a casa primero para que descanses y después iré a casa de Ferrer.
Aitana: sí gustas puedo acompañarte, me gusta pasar tiempo contigo.- sonreí tratando de verme más convincente pero él ni siquiera me estaba mirando.- me siento perfectamente bien, además de que he estado encerrada toda la semana.
Papá: uhm...- en mi mente le imploraba, quería saber al menos que se encontraba bien.- de acuerdo, de regreso compraremos algo de comida para que te quedes en casa mirando alguna película.
Aitana: me parece perfecto, pa.- abracé su antebrazo con ansias y después regrese a mi asiento acariciando mi muñeca.
.
.
.
Mi padre se estacionó detrás de un auto color blanco de dos puertas, pequeño pero lindo, este se encontraba estacionado en la acera de la casa de Oliver, mi padre sacó su chequera de la guantera y arrancó un papel para anotar la cantidad que pagaría, su celular comenzó a sonar dentro de su bolsillo y suspiró, que conveniente para mí.
Aitana: yo puedo llevárselo, si gustas.- vaciló un momento y al final asintió entregandome el cheque y bajandose del auto para responder la llamada, hice lo mismo que él pero caminé al lado contrario, me coloque frente a su puerta y toque un par de veces, después arregle mi cabello para verme presentable, la puerta se abrió y me dejó mirarlo, llevaba puesta una tirantera negra y un pants deportivo con rayas blancas a los costados, su cabello estaba revuelto y húmedo.
Oliver: Aitana...hola.- su voz nerviosa me hizo sentir confundida.- ehm, ¿qué haces aquí?- ni siquiera me preguntó cómo estaba...
Aitana: bueno, quería saber cómo estabas ya que no te he visto desde...- la chica que anteriormente había estado en el hospital apareció a su espalda colocando su antebrazo sobre el hombro de Oliver, este se giró nerviosamente y después me miró a mí.
Camila: oh, hola de nuevo.- me sonrió con amabilidad y tendió su mano hacia mí, la estreché por cortesía.- veo que ya te encuentras mejor.- asentí tratando de contener mis emociones que querían estallar.
Aitana: bueno no les quito más tiempo.- sonreí sintiendo que mis labios temblaban.- mi padre me ha pedido que te dé esto, es el pago final del restaurante.- le tendí el cheque y él lo tomó enseguida.- y me pidió que te dijera que pronto te enviará también lo que tuviste que pagar en el hospital.- suspiré.- lamento haberles interrumpido, bonito día.- les sonreí a ambos por un par de segundos y después salí casi corriendo de su jardín, escuché que dijo mi nombre pero ni siquiera me gire, mi padre colgó la llamada en cuanto me miró y ambos subimos.
Aitana: le dije que pronto le llegaría el pago de lo que gastó en el hospital.- asintió, parecía que su mente ahora estaba en otro lugar.- ¿pasó algo?
Papá: no, hija, vayamos a casa y pide algo de comida desde allá ¿sí?- asentí desganada y me recargue en el asiento mirando a través de la ventana. Yo sé que entre nosotros no hay absolutamente nada y que en sus planes no está tener algo conmigo, pero aún así me afecta lo que él haga, aunque intenté mostrarme indiferente ante la situación, tengo que aceptar que mirar a esa hermosa chica con él me causó celos y no porque yo me sienta insuficiente...pero ella formó parte de su vida, es su ex novia y en algún momento la amó, quizás ese amor ni siquiera se ha extinguido del todo.