Parte 60

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La mañana avanzaba con lentitud y se sentía demasiado tranquila, ambos habíamos preparado el desayuno juntos, waffles con fruta y licuado de banana, le había ayudado a limpiar, levantamos los pétalos de rosa y los colocamos dentro de una bolsa transparente, quería llevarlos a casa y guardarlos en una cajita.
Sobre el sofá estaba el ramo de flores y la demás cosas que él me había regalado, él decidió darse una ducha mientras que yo terminaba de lavar los platos, el timbre de la puerta principal se escuchó, me limpie las manos en una servilleta y salí de la cocina.
Aitana: ¡termina de arreglarte, abriré yo!- escuché un "ok" y giré el picaporte de la puerta, ahí me encontré con Camila acompañada de dos adultos más y un joven que no pasaba de mi edad.
Camila: ¿Aitana, cierto?- asentí sin poder articular una sola palabra, las personas que la acompañaban me parecían conocidas pero no recordaba de dónde.- bueno, ¿podemos pasar?
Aitana: ehm...- miré en dirección a las escaleras esperando que Oliver me salvará de responder, sin embargo, él no estaba ahí.- claro.- abrí poco a poco la puerta, estaba llena de dudas y desconfianza, las personas entraron junto a Camila mirando curiosamente todo lo que había alrededor.
Camila: bueno, ellos son los padres de Oliver.- mi atención se centró en las personas que ya se habían instalado en el sofá.- Roger y Brianda, el chico es Brandon, su hermano.
Aitana: es un placer.- extendí mi mano y ellos la estrecharon con una sonrisa que a simple vista pareció ser fingida.- soy Aitana, novia de Oliver.- esto último pareció tomarlos por sorpresa.
Brianda: no sabía que mi hijo tenía novia.- miró a su esposo con incredulidad, tenía ganas de responderle pero no era lo adecuado.- siendo sincera, no esperaba que mi hijo estuviera en una relación, después de terminar su compromiso con Camila, creímos esa llama no se apagaría tan fácil.
Camila: oh...no diga eso.- sonrió nerviosa y acomodó uno de sus mechones lisos detrás de su oreja.- Aitana logró borrarme del corazón de Oliver, bien dicen que una edad joven tiene más posibilidades.
Roger: ¿qué edad tienes?- me senté en uno de los sofás libres y comencé a jugar con mis dedos, malditos nervios.
Aitana: tengo 21, señor Roger.- se miraron sorprendidos, el hermano de Oliver me sonrió pero no pude corresponderle.- Oliver se está duchando, supongo que no ha de tardar en bajar.
Brandon: ¿y ustedes están casados o algo por el estilo?- negué, señaló el anillo que había en mi mano izquierda.- eso parece un anillo de compromiso.
Aitana: él me lo regaló cuándo formalizamos nuestro noviazgo.- sonreí orgullosa acomodando la pequeña perla del anillo.
Brianda: ¿tus padres están de acuerdo con esta relación?- esa pregunta me tomó por sorpresa, más aún porque mi padre no estaba de acuerdo y tampoco estaba enterado de mi relación con Oliver.- digo, eres casi 10 años menor que mi hijo, no puedo dejar de imaginarme a una niña de 10 años con un hombre de 20.- sentí incomodidad por la forma en la que ella lo dijo.- supongo que tienes un trabajo, ¿no?
Aitana: sí, trabajo con mi madre, ella es dueña de un restaurante y se podría decir que yo soy su mano derecha, Acacia también trabaja ahí.- se sorprendieron al escuchar el nombre de ella en la conversación.- Acacia es mi mejor amiga.
Camila: incluso se ganó el corazón de mi ex mejor amiga.- me estaba sintiendo bastante incómoda aquí y creo que mi pie golpeando el suelo lo decía todo.
Roger: cuándo regresamos de aquel viaje creía que mi hijo ya estaría casado, con Camila incluso, ella es una persona independiente, se acerca más a la edad de nuestro hijo por lo tanto tiene más madurez, a veces en las relaciones tenemos que contar con las dichosos estatus socioeconómicos, ya sabes, estar al mismo nivel.- no respondí, ahora entiendo el porque Oliver no deseaba tenerlos cerca. Miré por las escaleras él iba bajando mientras sacudía su cabello.
Oliver: ¿quién era, Cariño?- me miró pero después las demás personas captaron su atención, terminó de cerrar los botones de su camisa y bajó el último escalón.- ¿qué están haciendo aquí?
Roger: hijo.- se puso de pie al igual que Brianda y se dirigieron a él, su hermano menor se quedó en el sofá con un toque de ironía.- estuvimos luchando por conseguir tu dirección, afortunadamente tu madre logró encontrar el número telefónico de Camila, ella nos hizo el gran favor de traernos.
Oliver: ya veo.- evitó abrazar a sus padres y se colocó a lado de mí, sentía que estaba en una situación en la que no debería de estar.- pero eso no responde a mi pregunta, ¿qué hacen aquí?
Brianda: queríamos verte, hijo, hay tantas cosas de las cuáles tenemos que platicar.- sonrió y miró a Brandon.- ¿ya viste que grande está tu hermano?, ahora es la mano derecha de tu padre en su agencia de autos.
Oliver: vaya, eso es fascinante, me alegro por ti, Brandon.- sonrió forzadamente y después regreso a su expresión natural.- sí solo venían a restregarme lo orgullosos que están de Brandon, ya pueden irse, y Camila, te voy a pedir una vez más que te mantengas al margen, hace unas semanas te pedí que no aparecieras nuevamente frente a mí, lamento ser tan duro contigo pero te estás tomando atribuciones que no te corresponden.
Camila: lo lamento, Oliver, tus padres estaban navegando por la ciudad sin saber nada de ti, no tienes que desquitarte conmigo...- no sé si ella sabe lo que Oliver pasó junto a sus padres, pero traerlos aquí da a entender que no sabía, a menos de que su propósito sea hacerle pasar un mal rato a Oliver.
Brandon: relájate, Oliver, mis padres solo quieren arreglar las cosas contigo.- Oliver se frotó el puente de su nariz y suspiró con frustración.
Oliver: digan lo que tengan que decir y váyanse.- los padres se sentaron nuevamente en el sofá, se intercambiaron algunas miradas antes de hablar.
Brianda: antes que todo, ¿podrías traernos un vaso de agua?- la mirada de los presentes se centro en mí, yo miré a Oliver mientras me ponía de pie, sin embargo, él colocó su mano sobre mi hombro y miró a los demás.
Oliver: si quieren un vaso con agua pueden levantarse y servirlo ustedes mismos, ¿no tienen fuerza para hacerlo?- bajó la mirada para encontrarse con la mía, me sonrió dándome un poco de tranquilidad.
Roger: vaya, no puedo creer que cualquier par de piernas te hagan comportarte de esa manera.- oh mierda, no quería sacar conclusiones antes de tiempo pero al parecer no les agradaba.- somos tus padres, Oliver, ¿sabes lo que pasa con este tipo de relaciones, verdad?- nos señaló a ambos, la señora Brianda me miraba de una forma muy despreciable.- es menor que tú, hijo, cuándo consiga lo que quiere te dejará abandonado, este tipo de personas lo único que buscan es dinero y cosas lujosas, y por lo visto ya lo está consiguiendo, al final te dejará por una persona de su misma edad, y eso será cuándo ya no le sirvas.
Oliver: ¿qué mierda dices?- dió un paso al frente para ir hasta donde su padre, sin embargo, lo detuve enseguida.
Aitana: no hagas algo de lo que después te puedas arrepentir.- el hermano de Oliver se levantó dispuesto a defender a su padre.- por favor.
Oliver: no me importa nada de lo que ustedes tengan por decirme, no quiero formar parte de su "querida" familia y tampoco los quiero cerca.- las venas en su cuello se exaltaron por la manera tan tensa en la que hablaba.- Aitana es mi mujer y no voy a permitir que le hablen de esa manera.
Aitana: creo que mejor me voy.- mi voz sonaba temblorosa y odiaba eso, me hacía ver débil ante las demás personas.- nos hablaremos después.- le dí un beso corto en la comisura de sus labios y después tomé mi bolso para dirigirme a la salida.
Oliver: ¡Aitana!- decidí no hacer caso a su grito y salí de su casa, sentía un nudo en la garganta que no pude contener, comencé a sentir cómo mis mejillas se humedecian con rapidez y mi nariz se congestionaba.

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