I'M YOURS

Capítulo 96

Había llegado el día de la presentación, estaba sentada frente al tocador del camerino que nos habían asignado, mi madre se había encargado de peinarme y después se retiró para encontrarse con mi padre en sus respectivos asientos, mis manos nuevamente comenzaron a jugar entre sí, mis días habían sido pésimos, tuve muchas bajas emocionales e incluso continúe comiendo poco, los resultados de sangre salieron positivos, tengo 7 semanas de embarazo, lo que equivale a mes y medio, mi padre aún no está enterado de nada, he buscado la forma correcta de decirle pero no se me ocurre una, no quiero decepcionarlo más.
Xx: ¿estás lista?, sales en 5 minutos.- me dió unos golpecitos en los hombros y yo asentí agradecida, me cubrí los ojos y solté un suspiro lleno de cansancio, terminé de ajustarme mi vestido y me puse de pie con decisión.
Llevaba puesto un vestido blanco que acariciaba el frío suelo, tenía detalles de bordado y unas cuantas flores pequeñas esparcidas por la falda, llevaba mi cabello suelto, aunque mi madre me había atado un par de trenzas que rodeaban mi nuca cómo una corona, también había enredado florecitas en el trenzado, me coloque detrás de el telón, el piano ya estaba colocado en el centro del escenario, sentí que mis piernas comenzaron a debilitarse pero aún así me mantuve firme, mi nombre fue mencionado por los altavoces y una luz iluminaba el hermoso piano de madera, tomé una bocanada de aire y me dirigí al centro del escenario, me senté en el taburete acolchonado y coloque mis dedos sobre las teclas del piano.
No quería ver al público porque me pondría exageradamente nerviosa y no quería tener ningún error en la presentación, el silencio reinaba en el lugar haciéndome sentir un poco cómoda, presioné la primer tecla y después no hubo nada ni nadie que pudiese detenerme, la hermosa melodía que despedían las teclas me hacía sentir nostálgica pero a la vez lo disfrutaba, era algo creado por mí, algo que por mucho tiempo soñé y esperé, sonreí al recordar mi niñez con aquel piano de juguete, mi adolescencia tocando el primer piano de verdad y ahora tocando mi propia melodía.
Tenía un toque dramático, nostálgico, romántico y emocional, de alguna forma revelaba lo que yo estaba sintiendo ahora mismo, daba a conocer todo lo que había pasado en mi vida los últimos meses desde que conocí a Oliver. Mis dedos tocaron la última tecla, un sonido largo y suave, después las luces se encendieron y una ronda de aplausos inundó mis oídos, me puse de pie y miré hacia enfrente, mis padres, acompañados de Valentín, se encontraban en la segunda fila y aplaudían con orgullo, mi padre lloraba y me lanzaba besos, el telón se cerró y entonces solté el aire que había guardado en mis pulmones durante la presentación.
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El evento terminó, me quité las zapatillas en el camerino y me coloque mis zapatos, mis pies se sintieron agradecidos casi al instante, me arrepentía de no haberme traído un segundo cambio de ropa para no salir con el vestido puesto. Mis padres llegaron por detrás y me abrazaron con fuerza, yo les tomé de la mano.
Papá: estoy tan orgulloso de ti, mi cielo.- me dió un beso en la frente y soltó un suspiro.- mi pequeña gran hija.
Madre: lo hiciste genial, bebé, tal y cómo yo lo había imaginado, incluso mucho mejor.- le sonreí agradecida.
Aitana: esto no hubiese sido posible sin ustedes, gracias por apoyarme tan incondicionalmente y por no dejarme caer nunca.- mi madre me sonrió con lágrimas en los ojos, nuestro momento emotivo fue interrumpido por Valentín, tenía el celular encendido sobre su mano y su expresión era preocupante.
Valentín: es Oliver...- mi corazón comenzó a latir con fuerza, golpeando dolorosamente mi pecho.- primero que nada tienes que prometerme que no vas a exaltarte.- me tomó de los hombros, ni siquiera tenía que pedirme eso, yo ya me sentía angustiada.
Papá: ¿qué pasa con Oliver?- mi padre también parecía preocupado.
Valentín: uno de los trabajadores del club me informó que Oliver fue herido a las afueras del establecimiento.- me levanté enseguida de la silla y mis ojos comenzaron a inundarse de lágrimas.- al parecer hubo una pelea en el interior del club, él intervino y logró sacarlos del lugar junto a los guardias de seguridad, sin embargo, uno de los hombres llevaba un cuchillo y, aunque sus intenciones eran herir a su rival, finalmente hirió a Oliver en el abdomen, ya fue trasladado al hospital.
Aitana: tengo que ir.- no estaba pensando correctamente, salí corriendo del camerino pero fui detenida por mi padre.- papá, es Oliver...me necesita.
Papá: lo sé, cariño, te llevaré al hospital, no dejaré que te vayas sola.- mi madre llegó a dónde nosotros nos encontrábamos, asentí y comenzamos a caminar con rapidez hasta las afueras de la academia.
Madre: hija, tienes que estar tranquila y lo sabes ¿verdad?- me lo dijo en susurro para que mi padre no escuchará, yo asentí.- entiendo que esto te haya impactado demasiado, pero necesito que estés tranquila.- asentí nuevamente tratando de hacer lo que ella me había pedido.
Me subí con rapidez a la camioneta de mi padre y él enseguida comenzó a conducir, el camino parecía ir demasiado lento, me sentía con impotencia y no podía dejar de llorar.