Parte 27

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Estaba molesta, eso estaba claro, pero no faltaría a su fiesta de cumpleaños, no quería perderme el momento en el que sus amigos le dieran la sorpresa, Acacia y yo estábamos en camino, según los padres de mi mejor amiga no tardaríamos mucho en llegar, le había dicho a mis padres que probablemente hoy me quedaría en casa de Acacia por lo tanto podían descansar sin preocuparse.
El padre de Acacia se estacionó afuera de una casa de doble piso, las luces estaban apagadas, según Axel nos había dicho que ya todo estaba listo, nos dejó las llaves dentro de uno de los maceteros exteriores, el de flores amarillas, ambas nos despedimos de los padres de Acacia y ellos se fueron una vez que encontramos las llaves.
Encendimos las luces y todo se veía maravilloso, las paredes estaban pintadas de color blanco, lo que resultaban eran los umbrales de las puertas los cuales estaban pintados de color café al igual que las puertas, la escalera tenía una alfombra perfectamente colocada en cada escalón, había algunos cuadros de pinturas y algunos floreros sobre una chimenea, Axel había colocado banderines de feliz cumpleaños, Acacia anteriormente había traído una tarta de vainilla, yo le ayude con una fuente de chocolate con fresas y además a acomodar la mesa de regalos.
Pasó un poco de tiempo, la noche comenzaba a caer y los invitados llegaban, algunos se presentaron conmigo, según recuerdo eran amigos de Axel y Oliver, uno se llama Álvaro, otro más Diego, Saúl, Cristina, Laura, Carolina, Paola, Paul y algunos más que ni siquiera quisieron presentarse, ya todos nos encontrábamos preparados para la señal, habíamos apagado las luces y estábamos colocados justo al frente de la puerta principal.
La luz de un auto penetró la ventana avisándonos que el auto de Oliver ya había entrado al patio de la casa, escuchamos algunas voces mientras cerraban las puertas, segundos después se escucharon las llaves golpear y se abrió iluminandonos con la luz pública de una de las lámparas, Álvaro encendió la luz de la sala para que Oliver pudiera vernos.
Todos: ¡Sorpresa!- él se quedó quieto en el umbral de la puerta mirando a todos los presentes, su mirada se quedó quieta en mí y tragó saliva.
Acacia: ¡feliz cumpleaños, precioso, esperamos te guste!- todos se acercaron a abrazarlo sacándolo del trance en el que se encontraba por haberme visto. Me acerque también y lo abracé con ganas de no dejar de hacerlo, su mano acaricio mi espalda por unos segundos y me separé.
Axel: ¿y que dices? ¿qué comience la fiesta?- abrió la botella de champagne y comenzó a derramarla encima de todos. Uno de los amigos encendió la música y la esfera que colgaba encima de todos nosotros, diferentes luces chocaban con las paredes, cómo en una discoteca. Todos los presentes comenzaron a bailar y a tomar copas con champagne, Acacia tomó de la mano a Oliver para que entrara en confianza, lo llevo al centro de todos y comenzaron a celebrarlo, eso me hizo sentir feliz, él comenzó a sonreír al ver a sus amigos bailar graciosamente frente a él.
Mi celular comenzó a sonar en mi mano, salí al patio trasero para poder escuchar mejor, era Dylan.
Aitana: hola, Dylan.
Dylan: hola Aitana ¿en dónde estás?- suspiró.- quería invitarte a cenar pero tus padres me dijeron que saliste con Acacia.
Aitana: oh perdona por no avisarte, hoy prepararon una fiesta sorpresa por el cumpleaños de Oliver y me invitaron, estoy en casa de él.
Dylan: ¿sabes que eso está mal, verdad?- no entendía lo que trataba de decir, estaba apunto de responderle pero siguió.- avísame cuándo ya estés en tu casa o si necesitas que pase por ti, te juro que ahora mismo salgo para allá si me lo pides.
Aitana: no, no Dylan...- mi cuerpo fue impulsado hacia adelante, mi celular cayó sobre el césped y mi cuerpo se hundió en la piscina, escuchaba las burbujas enredarse en mi cabello y oído, mi cuerpo se impulsó hacia arriba, no pude evitar reír mientras limpiaba el agua de mis pestañas. Acacia cayó a mi lado y me abrazó sin dejar de reír, Oliver se apoyó en el umbral de la puerta mirando hacia nosotras con una sonrisa diminuta en sus labios.
Aitana: mierda, me olvidé de traer ropa de repuesto.- Acacia dejó de reírse y me miró con preocupación.- no importa, me quedaré tendida en el césped hasta que mi ropa se seque, vamos a divertirnos.- miré a Oliver, este no parecía tener ganas de divertirse.- ¡Oye!- me miró y yo extendí mis manos.- ayúdame a salir, tengo que ir al baño.- él se acercó a mi con decisión y se puso en cuclillas para rodear mis muñecas, solo pudo levantarme un poco ya que lo tire hacia mí haciendo cayera dentro del agua.
Acacia: ¡Por Oliver!- se terminó el líquido que había en su copa y abrazó por los hombros a su primo quien se limpiaba las pestañas. Subí los escalones de la piscina y salí de ahí para quitarme los zapatos, los dejé tirados cerca de la puerta y tomé mi celular para protegerlo del agua. Dylan ya me había cortado la llamada pero también había dejado muchos mensajes, creo que se molestó, nuevamente mi celular cayó al suelo, Oliver me llevaba en su brazos, cayó al agua junto conmigo y me soltó estando dentro, sin embargo, sus brazos me rodearon la cintura para impulsarme.
Quité el cabello de mi rostro y limpie el agua que me impedía abrir los ojos, estábamos tan cerca uno del otro, sacudió su cabeza cómo un cachorro haciendo que el agua sobrante de su cabello cayera en mi cara.
Oliver: hola.- sonreí nerviosa, me dolía el pecho por el nerviosismo, dejé de sentir sus manos en mi cintura y ahí Acacia me llevó hacia ella, que alivio. Axel hizo lo mismo con él, se lo llevó y comenzaron a conversar en grupito junto con los demás chicos que se encontraban dentro de la piscina.
Acacia: bailemos cómo solo nosotras sabemos hacerlo.- sonreí al recordar las veces en las que salíamos, aún dentro del agua nos era fácil mover nuestro cuerpo y sentirnos libres.

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