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No sabía que hacer, quería apartarlo de un empujón ¿pero por qué no lo hacía? No podía resistir aquellas caricias, esos besos húmedos que dejaba rastro en su cuello.
Se sentía nerviosa y a la vez caliente, tanto que podría incendiarse. Sus manos comenzaron a actuar, sentía como desabrocho su sostén, la joven se sobresalto.
_Veo que estas nerviosa pero no veo que me detengas. Susurró el joven de cabellos negros.
_Sasuke-kun yo...yo quiero que sigas. Le miró con tímides.- Solo se gentil.
En ese momento el Uchiha cayó en cuenta, sintió un ardor en sus mejillas. La joven se sento en su regazo y rodeo sus piernas en la cintura de Sasuke, lo comenzó a besar de forma desesperada, reflejando lo excitada que estaba por sus simples toques.
El Uchiha podía sentir sus pechos apretandolo, no tomo ni dos segundos y supo que debía dejar los nervios de lado si quería complacerla. Si ella había dejado su nerviosismo de lado, entonces el haría lo mismo.
Sus manos comenzaron a acariciar sus pechos y sin aquél sostén era algo completamente diferente, suave y cálido...
Esta dejó de besarla y hecho un gemido.
¿Que es esta sensación tan...tan...genuina? Llegamos a ser tan cercanos como para hacer ¿esto?
El joven bajo su mano hasta la intimidad...
Hasta que escucharon pasos, estos se sobresaltaron al instante, comenzaron a vestirse nuevamente hasta que de forma frenética voltearon a ver al otro lado de las rejas un guardia mirándolo con los ojos muy abiertos.
Mierda...
Esa palabra fue lo único que cruzó por la cabeza de Sasuke.
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La joven salió avergonzada de la celda y caminaba por los pasillos hacía la salida. No podía creer que en todo ese tiempo la estén observando, su cara era un tomate, estaba completamente rojo brillante. Sentía tantas emociones en su cuerpo, quería retroceder el tiempo para avisar que alguien los estaba observando, esta vez no quería que nadie lo detuviesen.
Sonrío, porque se sentía felíz. Aquél Uchiha tenía un aura, algo que hacía que ella quisiera estar todo el día entre sus brazos, tocar su cabello...besarlo y simplemente estar junto a el, sabía que el estaba sufriendo esos dolores bastante particulares, sabía que tenía que pagar años en la prisión, pero ella iba a resistir todos esos años para vivir una vida plena luego de que sea libre.
Miró el sol y aquel cielo celeste, con determinación llegaría lejos.
Resistire Sasuke-kun, si tu lo haces yo también...prometo seguir a tu lado.
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