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La kunoichi dormía apoyando su cabeza en el regazo del joven. Era de madrugada, solo se escuchaba la lluvia golpeando el tejado.
Sabía que pronto llegarían los demás ya que Sakura había ido a avisarles donde esta, tendría que confrontar a todos de una vez. Las cosas serían difíciles pero no le importaba en absoluto, sería rápido.
Oía de lejos sus voces, sus chakras acercandose de manera brusca. Sus manos comenzaron a temblar, su impulso de querer levantarse y huír estaba de vuelta.
No, no puedo huír. No puedo hacer eso toda mi vida. Debo quedarme.
Una mano con delicadeza tomo la suya.
_Tranquilo, todo estará bien.
Este la miro, tenía una sonrisa tímida y sus ojos perlados reflejaban amor. El no respondió y desvió la mirada.
Debo enfrentar esto.
_Ire afuera, necesito aire fresco.
Era de madrugada, la lluvia era interminable, la oscuridad parecía jamás irse, estaba ahí firme fuera de esa casa abandonada mirando la profundidad del bosque.
En un momento estarían sus siluetas cerca.
Sakura estaba dentro, observandolo por la ventana. Sabía que esto traería muchas cosas, y por muchas cosas se refería a conflictos.
El resentimiento de aquél rubio lo mataría, sabía que Naruto tenía un conflicto interno cuando mencionaban a cierto peli-negro.
_¿Por qué estas a fuera? ¿ansioso? Se burlo la kunoichi.
Lo ignoró y siguió mirando la profundidad del bosque. Su característico verde oscuro y cielo nocturno lo comenzaban a fastidiar. Además que no quería que la Hyuga escuche todo lo que le iban a decir. No quería que ella lo vea de aquella forma. No quería sumergir su relación en aquella mierda.
Una melena rubia se avecinaba, junto a otros ninjas.
Sakura miraba con una expresión sería. Pero en lo profundo de su corazón sonreía, quería que el tome su merecido.
Estos frenaron en seco al ver y sentir el chakra de Sasuke. Sus ojos reflejaron sorpresa.
No lo esperaban en absoluto, luego de años, ese sujeto aparecía como si nada. Sasuke le miró sin expresión alguna.
_Sasuke. Susurró al ver al joven luego de tres año, tendría 19 o 20 años.
_Naruto, volví.
Sus ojos negros reflejaban un vacío que mataría a cualquiera. No se veía sentimientos en su mirada, ¡no había nada! ¡y menos amor!
Kiba y Shikamaru quedaron estáticos, no esperaban verlo en absoluto. Temari quedó paralizada.
