Eorin Wangja || SanSang

5.3 Rey agobiado, consejeros atentos

—En el pueblo no deja de hablarse de los chicos que escapan de Utopia para ir allá—Seonghwa deja la carpeta en la mesa—. Siendo beastman por lo que he podido recopilar. Es decir, turno nocturno ¿Alguno de ustedes sabe algo al respecto?

—Nada que no sea conocido—dice Jimin, quitándose algunas hojas de arbusto que quedaron pegadas a su cola. Tendrá que pedir ayuda a los jardineros. Toda la vegetación se está creciendo a demasiado rápido—. Le pagan a los guardias para poder salir. Hay que buscar uno nuevo. Uno que no se deje sobornar para lidiar.

—Si no se sobornan con dinero, lo harán con sexo. Hay Omegas entre los niños que se fugan—comenta otro, un hombre con cabellera frondosa, orejas redondas, ojos dorados y colmillos notables. Es el profesor de inglés, francés y ayudante regular del club de deportes: Kim Nam-Joon, un beastman león—. Son bastante manipuladores.

—Por no decir que hay muchos niños creídos aquí. Usan el nombre de sus padres para amenazar a todo el mundo. Se creen Draco Malfoy de Harry Potter. —burla otro, siendo un hombre fornido, cabello largo y negro, orejas puntiagudas, colmillos medianos y cola tupida: Jeon Jung-Kook, beastman lobo y profesor de gimnasia, música y otro ayudante en el equipo de deportes.

—Huh, malditos niños creídos. Como si no tuviéramos nuestra propia cubierta. —mofa quien va sentado al lado. Un hombre rozagante, con plumas turquesa en su cuello y en la cola: Kim Seok-Jin, beastman pavor real y profesor de sociales y teatro, cooperativo en el club de teatro como ente más formal.

—Se les suben los humos y las hormonas todo el tiempo. —queja una mujer de baja estatura, piel morena y cabello frondoso. Ahn Hye-Jin, beastman leona y profesora de historia.

—Tienen todo esto que decir, pero ¿No pudieron informarlo antes? —queja Seonghwa entre dientes con las plumas de su cuello erizadas.

Lo peor de tener profesores beastman, es que hacen lo que les da la gana. EL instinto parece se remas fuerte que seguir reglas básicas. Como anunciar que hay tanto problema con los estudiantes. No le sorprende que puedan fugarse tan fácil si los profesores lo permiten y pasan de largo al momento de anunciarlo.

No son un colegio que ceda a amenaza de los padres. Si hay problemas se defiende al personal, no excusar a los estudiantes.

—No habías solicitado la información y dado que no ha habido ningún problema—El agraciado hombre junto a Jimin da un suspiro, apoyando la mejilla en su mano. Largas astas en su cabeza y las orejas medio caídas. Kim Tae-Hyung, beastman ciervo pelirrojo y profesor de arte y teatro—. Pensamos que era irrelevante. Por no mencionar que nosotros no podemos resolver que necesitamos más guardias. No uno solo.

—Tenemos presupuesto para más. —comenta Namjoon.

—El director no quiere gastar dinero en algo que no debería hace falta.

—Las salidas al hotel no hacen falta. —silba otra profesora y Seonghwa mueve la mandíbula con desagrado. Jimin se ríe y deja las hojas en la mesa.

—Subdirector Seonghwa—llama el leopardo invernal, siendo el que más delicadeza y capacidad social tiene entre sus compañeros de trabajo—. Creo que tiene una propuesta y está tan tenso que se le está olvidando.

—No tuvo su sesión con el director. —tose Jungkook y Seonghwa quiso lanzarle la carpeta entera. Es el más joven de todos, pero se graduó con honores de la universidad. Hongjoong prácticamente lo abordó para que viniera a ser profesor acá.

Paciencia con este hijo de puta impertinente, paciencia.

—Le propuse al director brindar fines de semana libres donde los estudiantes puedan salir de la institución. Teniendo, obviamente, un permiso firmado por sus padres—explica y se pasan los papeles con la propuesta—. No obstante, necesito apoyo de todo el profesorado para que esto funcione.

—No entiendo en qué parte tenemos que ver. —admite Taehyung—. No me mal entienda. Me parece buena idea, pero ¿Qué haremos nosotros?

—Principalmente acompañar a los que tengan permiso de salir. A pesar de que lo implantaremos, dudo que muchos lo tengan permitido. Están aquí por una razón varios de ellos—Namjoon sorbe aire y se lleva una mano a la cara. Casi la mitad de los estudiantes beastman están "por una razón". Lo cual echa por tierra la posibilidad de que salgan—. Y en el dado caso... serán sus supervisores. Tutores por decirlo de alguna forma.

—Considerando que pagaran esas horas extra, no tengo problema. —afirma Jin con tono calmado y dejando el papel en la mesa.

—Tengo sobrentendido que vendrá otro alumno nuevo—dice Hyejin—. Otro "problemático" más. No hace mucho llegó un oso.

—Sí. Aun no tengo detalles del caso, por desgracia. El director aún está discutiendo los acuerdos de su inscripción—suspira Seonghwa inquieto—. No obstante, al mismo tiempo que él llega y antes de que este grupo molesto haga de las suyas de nuevo, hay que implantar esto.

— ¿No lo vio?

Seonghwa va hacia la ventana y encuentra que abajo, en el jardín, hay una exageradamente bella pintura en el césped. Básicamente una lechuza blanca entre las alas de un águila. Siente un tic en su derecha. Como odia a este grupo. Los jardineros ya están en proceso de limpiar. Cierra las cortinas y se mantiene tranquilo. Montar una escena de molestia delante de los profesores no ayudará.

—Y buscar más guardias.

—Un pelotón.

—Hablemos con el director sobre eso. Puede ser irremediablemente necesario.

Seonghwa acaba la reunión con alivio de que ellos estén de su parte. Solo Hongjoong cree que poner más guardias en un internado lleno de adolescentes revoltosos y hormonales, no es urgente.

Solo él, en su mundo permisivo y relajado.

~ * * * ~

—Ya pasó, ya pasó, tranquilo.

Wooyoung tiene quien sabe cuántas horas lloriqueando por lo sucedido. Los regaños de Seonghwa son peores hacia los Omegas cuando se trata de este tema. En parte lo entiende, sabe que a los omegas beastman se los ve como criaturas incapaces de pensar en nada más que sexo. Si uno lo hace, los demás quedan involucrados por relación. Que Wooyoung se exponga tanto a pesar de decirle que no lo haga, no ayuda.

Wooyoung es alguien muy libertino y lo trata con normalidad, su círculo cercano no tiene problema por eso tampoco ¿Los demás? Simplemente esparcen los mismos comentarios ácidos: la puta de Wooyoung estaba teniendo sexo de nuevo. Ser llamado y regañado por su propia naturaleza se vuelve demasiado íntimo.

—No soy una puta. —lloriquea con la cara en la almohada. Yeosang sigue acariciándole la espalda.

—Sé que no, tranquilo, sé que no.

Yeosang suspira agotado y mira hacia su mesa de noche a un par de metros. El celular encendido con el correo que estuvo leyendo. Su papá a veces es tan formal que le envía correos electrónicos perfectamente redactados en lugar de un simple mensaje por LINE o Kakaotalk.

Básicamente un aviso de que ya es mañana la reunión que tendrán. Quisiera decir que lo alegra verlo, pero en realidad, preferiría no verlo.