Enemy to lovers (Aemond Targaryen) (Aegon II Targaryen)

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La reina mordía discretamente la piel que rodeaba sus uñas mientras que su dama de compañía tomaba la mano de la peli blanca, los maestres hablaban entre sí y las demás damas de compañía le limpiaban el sudor a la princesa. La peli blanca dio otro leve grito y un llanto se adueño de toda la habitación, Helaena había dado la luz a su tercer hijo, un varón, con hermosa cabellera blanca, sano y fuerte.

Al otro lado de la gran fortaleza roja, se encontraba la pareja de peli blancos, Aemond tomaba la mano de su esposa mientras que el gran maestre tocaba el vientre de ella y consultaba algunos libros. Ambos Targaryen estaban ansiosos por la respuesta del anciano y cuando dé su boca salió "Felicidades príncipe Aemond, la princesa Alysanne esta encinta" a ambos se les formo una sonrisa de oreja a oreja pero en sus miradas se podía notar la preocupación. No estarían listos para que sucediera otra vez, no estaban preparados para perder a otro bebé.

- Considerando el historial de la princesa, lo mejor sería un reposo absoluto o al menos hasta cumplir la quinta luna - ambos peli blancos asintieron y después el príncipe le pido discreción al anciano, antes de dejar a la pareja a solas les informo que la princesa Helaena había dado la luz. Aquella noticia creo una leve tensión en el ambiente pero esta desapareció cuando Aemond se puso encuclillas para tomar las manos de su esposa

- Te juro que esta vez no te dejare sola - la princesa asintió con una leve sonrisa y fue directo a la cama, estaba cansada, tal vez no fisicamente pero mentalmente estaba exhausta.

El día transcurrió y la princesa no se levantaba de aquella cama, no fue antes de terminar el día, la reina fue a visitarla y preguntar él porque de su ausencia en todo el día pero al llegar a sus aposentos, recibió la cálida noticia por parte de ambos. "Alysanne estaba encinta", a la reina se le podía ver más feliz que nunca ni en los partos de sus nietos se le había visto aquella sonrisa y brillo en los ojos que desde hace años había estado ausente.

Los días pasaban y la noticia de que la princesa estaba encinta recorría todos los pasillos de la fortaleza roja e incluso las noticias habían llegado a Dragonstone, un cuervo había traído las felicitaciones de la princesa Rhaenyra y del príncipe Daemon. Todo parecía estar bien, todo estaba en calma, hasta el momento.

Alysanne estaba harta de pasar todo el día postrada en cama, Aemond estaba al pendiente de ella las veinticuatro horas del día e incluso cualquier sonido que emitía la princesa dormida hacia que el príncipe se levantara rápidamente.

El embarazo de la princesa había opacado por completo el nacimiento del tercer hijo del príncipe Aegon y de la princesa Helaena, aunque al primero mencionado no sabía de la reciente noticia sobre el embarazo de su hermano y de su sobrina pues desde que Helaena había entrado en labor de parto, él se escabullo para ir a Flea Bottom y desde ahí no había estado sobrio ninguno de esos días. No le importaba en absoluto conocer al ultimo de sus herederos, no le importaba estar ahí para el parto o siquiera para escoger un nombre.

Pasaban los días y el sabor del vino llego a empalagar al príncipe, cosa que jamas pensó que sucedería, salió de la habitación en busca de un buen entrenamiento con su hermano, la luz del sol le molestaba pero le molestaba más seguir un minuto más en sus aposentos pero al llegar al lugar de entrenamiento y no divisar a su hermano, decidió que sería una mejor idea escaparse a Flea Bottom y una vez que estuvo entre aquellas calles donde solo había pobreza, mal olor y delincuencia pudo divisar a su hermano aunque este traía una capa que ocultaba su identidad para Aegon fue fácil reconocerlo, no todos los tuertos de King's Landing usaban un parche o caminaban de una forma lenta que causaba intimidación, lo siguió y fue fácil deducir hacia donde se dirigía.

Hacia la guarida del gusano blanco, hacia Gaemon.

Aemond se sobresalto cuando sintió como alguien colocaba una mano en su hombro pero al voltear y divisar que era su hermano mayor, relajo su expresión y cada uno de sus músculos.