Chapter 6

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—¿Dot? ¿Estás bien?

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—¿Dot? ¿Estás bien?

Han pasado algunos meses desde la boda, Ron, Harry y Hermione todavía están en algún lugar, ya casi es Navidad y ella se ha estado quedando con los gemelos por un tiempo.

Su entrenamiento de auror se detuvo debido a que el Ministerio se hizo cargo junto con el Quidditch, porque ningún lugar es seguro para nadie.

Se da vuelta para ver a George de pie en la puerta y asiente mientras se aleja de la ventana —Siento que algo anda mal —ella dice.

—¿Qué?

Ella niega con la cabeza con un suspiro
—Siento que alguien me está mirando.

George la sienta en el sofá junto a ella y suspira —Estás paranoica.

—No lo estoy —dice bruscamente, arrepintiéndose al instante cuando ve la expresión de dolor en su rostro—. Algo anda mal, en alguna parte, puedo sentirlo. Draco, él está... no lo sé.

George suspira y la rodea con un brazo
—Estoy seguro de que él está bien.

—Él es un mortífago, George. Dejé que eso sucediera y ahora está en algún lugar en problemas, solo Dios sabe dónde. Y probablemente esté completamente solo, yo-

—Dot —la interrumpe colocando su mano en su mejilla para que ella lo mire—. No es tu culpa.

—Todo es mi culpa —ella susurra

Él niega con la cabeza —Nada es tu culpa.

Ella asiente —Lo es, si hubiera estado en Slytherin, mi padre no me odiaría, si no hubiera dejado a Draco, él estaría a salvo, si no hubiera enviado una lechuza a la Orden, Sirius todavía estaría aquí. Si no hubiera-

—Para —George dice severamente ahuecando su mandíbula para mirarlo de nuevo.

Él observa su mirada llorosa y suspira
—Dot, no fue tu culpa.

Ella se burla —No lo eran —él defiende—. Si no te hubieran puesto en Gryffindor, probablemente nunca me hubiera convertido en tu mejor amigo. Si no te hubieras ido, probablemente estarías muerto. Si no le hubieras enviado una lechuza a la Orden, tú y todo el DA habrían muerto.

—No fue tu culpa.

Ella suspira y se pone de pie —¿A dónde vas?

—Yo solo... —ella mira alrededor de la habitación mientras se pone el abrigo—. Solo necesito unos minutos. Voy a dar un paseo.

George se pone de pie y agarra su propio abrigo &No vas a ir sola —ella abre la boca para protestar, pero él niega con la cabeza y pasa su brazo por el de ella—. No vas a ir sola —él repite.

Ella suspira y permite que él la guíe por la calle, mirando a su alrededor a la nieve que cae suavemente y los aparece lejos del Callejón Diagon.

Aparecen afuera de un café, uno en el que pasaron muchas noches cuando vivían con la Orden en Grimmauld Place. Sonriendo suavemente para sí misma, abre el camino hacia el café y sonríe a la anciana canosa detrás del mostrador.

—Oh, Dottie, cariño, no te hemos visto en años.

Marge, la dueña, también es una bruja, una vieja Slytherin pura sangre que debería haber sido una Hufflepuff. Es una de las personas más amables que Dorothy ha conocido —El quidditch me llevó muy lejos, Marge.

La vieja bruja sonríe mientras mira a su alrededor, casi un café vacío, con un movimiento de su vieja varita aparecen dos tazas frente a los jóvenes magos y sonríen agradecidos.

Pateando la nieve de sus zapatos cuelgan sus abrigos en las clavijas y toma asiento.

Hablan por un rato, sobre cualquier cosa y todo, manteniendo la conversación alejada de Draco y los Mortífagos y la guerra que saben que está por venir, porque necesitan tiempo, se lo merecen, una noche de tranquilidad.

Una noche de tranquilidad antes de que se desate el caos.

DISGRACE⇝G. Weasley ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora