Irrational; Irracional

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Dos meses atrás.

Yoongi nunca tuvo una ilusión o expectativa sobre su primera vez puesto que ocurrió antes de que él supiera lo que era eso. Después de cumplir los dieciocho y entrar a la universidad que quería nunca quiso ni pensó en nada relacionado a lo sexual a pesar de las cosas que decían de él.

Mientras admiraba las marcas entre moradas y rosas en sus piernas desnudas sobre los hombros ajenos (porque sí, Jimin lo había golpeado con un cinturón y obligado a quedarse sentado en el sol por horas luego de que intentara escaparse hace un par de semanas) pensaba en lo distinto que se sentía comparado con la primera experiencia que tuvo.

No sentía ganas de correr o de bloquear la situación de su mente, y no es que él estuviera siendo gentil, porque no lo estaba siendo en lo absoluto, las embestidas eran duras, casi dolorosas, pero su subconsciente no lo estaba viviendo de esa forma.

Incluso se sintió a gusto, y eso lo asustaba más que cualquier cosa. Estaba comenzando a desear poder bloquear la situación, pero no porque le disgustara, sino porque el hecho de que se estuviera sintiendo bien con esto era peor.

¿Qué le estaba haciendo ese chico?

Sus manos estaban a cada lado de su cabeza, apresadas por las contrarias, la cabecera de la cama chocaba con la pared constantemente y no podía hacer nada para retener los gemidos que salían de sus labios, aunque no eran muy altos.

Además, esos ojos cafés estaban totalmente fijos en él todo el tiempo.

Cuando todo terminó el castaño se vino dentro, se acostó junto a él y repartió besos en su rostro haciéndolo sentir mimado.

¡Lo estaba odiando! Y fue peor cuando comprobó que él también se había venido sobre su abdomen.

— Eres perfecto mi amor, un muy buen niño — ¿Por qué se sentía tan bien que él le dijera que era bueno?

Ni siquiera Hoseok había vuelto a pasar por su mente tan frecuentemente como al principio, y ya hasta se había olvidado de Jungkook.

Su lado racional estaba volviéndose irracional.

[...]

Mis expectativas sobre cómo sería hacerlo con Yoongi fueron superadas completamente, él ni siquiera había puesto la mínima resistencia y sus expresiones no hacían más que excitarme.

Me encontraba satisfecho y ahora que lo había hecho mío solamente quedaban dos puntos más para llevar a cabo antes de que él me fuera completamente inútil.

Aunque esta no sería la única vez, tenía que disfrutarlo lo más que pudiera antes de acabar con todo.

Iba camino a casa de Hoseok, después de todo tenía que mostrarme como su apoyo incondicional un poco más, esperaba que las cosas no se prolongaran demasiado por ese lado, puesto que su existencia realmente comenzaba a fastidiarme y dentro de mis planes no estaba asesinarlo.

Por el momento.

Como se estaba haciendo costumbre, su aspecto era deplorable, parecía que no existía un solo día en el que no llorara alegando que tal vez él pudo haberlo evitado y que no comprendía por qué no había ni siquiera un rastro y que estaba al límite con todo, y que a este paso él comenzaría a buscar a Yoongi por su cuenta.

— No es tu culpa Seok, no podrías haberlo evitado — ni, aunque quisieras — estoy seguro de que pronto lo encontrarán — no tan pronto la verdad.

— G-gracias por estar aquí Jiminie, no sé qué haría sin ti — y ahí estaba él aferrándose a mí de nuevo. Cuanto odiaba el contacto físico y más viniendo de Hoseok.

[...]

Actualidad.

Al día siguiente Lisa encontró otro sobre encima de su escritorio, imaginaba de quién venían, aunque no el contenido.

Eran dos hojas impresas por cara y cara con direcciones. Apenas las vio recibió una llamada del teléfono descartable.

¿Ha leído las hojas?

— Sí, son direcciones ¿No?

Exactamente, tiene doce horas para encontrar la indicada, allí estará su primera pista. No se vale utilizar su sistema o su computadora, en todo caso me encargué de hackearla.

>> Si no llega a tiempo, perderá la oportunidad y tendrá que esperar más tiempo para obtenerla.

— Pero ¿Cómo voy a encontrar la dirección correcta si ni siquiera sé qué estoy buscando? ¡Y en doce horas!

Esa es la gracia, le dije que no sería sencillo, este es un caso que va a ganar limpiamente señorita Manoban, demuéstreme que merece el trabajo que tiene.

>> El tiempo corre desde ahora, será mejor que lo aproveche — y colgó.

Esto era ridículo, ella era detective y abogada penalista, con un excelente cargo. No tendría por qué hacer esto como si fuera algún tipo de novata jugando con un tipo aparentemente desquiciado.

Pero, ese era el problema. Su carrera dependía de ese desquiciado.

Soltó un grito frustrado que medio departamento escuchó, pero no pudo importarle menos. Se levantó agarrando las hojas con rabia y ajustando un temporizador en su celular.

Si ese lunático quería jugar con ella pues juguemos. 







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Las menciones de temas sensibles como el síndrome de estocolmo y el abuso NO son con intenciones de romantizar ni incitar a este tipo de conductas, por esta misma razón las descripciones NO son totalmente explícitas.

Rectifico que NO apoyo ni apruebo este tipo de actos.

Obsessed | JimSuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora